Hogwarts, Springfield, Ciudad Gótica y Forrest Hill dejaron de ser mundos imaginarios. Desde hace años, los libros, las series de televisión y películas han sido fuente de inspiración para la creación de negocios y restaurantes temáticos además de bares, cafeterías, tiendas y hasta parques de diversiones.
Con el paso del tiempo, este auge ha permitido que cada vez más personas puedan socializar en espacios donde, además de encontrar productos y alimentos, también construyen una comunidad alrededor de sus gustos e intereses.
El objetivo de abrir lugares inspirados en series o películas tiene que ver con que cada vez más se busca aportar un valor agregado a los personajes fuera de la pantalla o de los libros
La industria de los restaurantes y los segmentos relacionados con ésta en el país tienen un valor estimado de aproximadamente 250 mil millones de pesos y contribuyen con el 13 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) nacional, de acuerdo con cifras de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac).
La cultura pop es un elemento que ha dado un giro importante y con el estreno de filmes fortalece su músculo en el sector del consumo.
La franquicia de películas más rentable a nivel mundial es el Universo Marvel, cuyas ganancias ascienden a 21 mil 245 millones de dólares, según Box Office Mojo.
Le siguen Star Wars con 9 mil 307 millones de dólares y desde 2001, año en que Harry Potter saltó a la pantalla grande hasta la fecha, ha recaudado 9 mil 185 millones de dólares en taquillas.
Estas tres marcas son las que más se utilizan como inspiración al momento de establecer espacios para los fanáticos (aunque no son las únicas), pues con el lanzamiento de spin-offs y ediciones especiales vuelven a recuperar auge entre el fandom.
El mago creado por J.K. Rowling es el ejemplo más claro de ello; la clave de su éxito entre los mexicanos está en que muchos de sus seguidores, que en su momento se involucraron con la trama, hoy son adultos jóvenes que trabajan y pueden adquirir los productos conmemorativos que salen al mercado.
Gerardo Torres, coordinador editorial en Marvel México, asegura que los lugares temáticos no son nuevos, a pesar de que en este momento están experimentando un importante auge entre las nuevas generaciones, pero la diferencia con décadas anteriores es la estrategia que han implementado los empresarios.
Estos lugares son un punto de encuentro porque las personas pueden conocer y conectar con otros fanáticos, algo que trasciende las barreras del internet
Oportunidad para crecer
Si bien esta tendencia tuvo sus inicios desde las décadas de los 60 y 70 con la creación de espacios personalizados, poco a poco en México se ha ido adaptando al grado de que hoy es muy común ver lugares y restaurantes temáticos en todo el territorio nacional.
En bares, restaurantes o cafeterías los comensales disfrutan de bebidas y platillos con un toque personalizado al mismo tiempo de que conviven con otros fanáticos de su serie o libro favorito.
Adolfo Cotero, desarrollador y consultor de negocios, refiere que otro factor importante en esta clase de lugares es que cuando concluyen las temporadas o se publica la última edición de un libro, los seguidores siempre pueden regresar a revivir y recrear sus momentos favoritos.
Actualmente la industria restaurantera está conformada por más de 500 mil negocios, de los cuales entre el 1 y 2 por ciento son temáticos
“No es malo que se estén abriendo establecimientos temáticos en México, pero sus propietarios deben ofrecer un valor adicional al resto para que puedan sobrevivir al boom, por ello es necesario que se ofrezcan experiencias y no solo alimentos”.
También puedes leer: Mario Bros, del pixel a la franquicia
La apuesta por ser diferente
Las modas impuestas llegaron a su fin, lo de hoy es optar por lo que es diferente e inusual.
Los restaurantes, bares y cafeterías temáticas rompieron con los límites que existían entre la fantasía y la realidad a través de sus ambientaciones, alimentos y bebidas, logrando que todo tipo de público pueda experimentar qué se siente estar en una época diferente o dentro de una serie, película o libro.
Los lugares temáticos se han popularizado entre las nuevas generaciones; las ambientaciones, alimentos y bebidas son los factores que han impulsado este mercado en los últimos años
La gastronomía es uno de los factores más importantes que influye en la preferencia de los clientes, ya que ofrecen menús poco convencionales que se adaptan a la simbología de su decoración.
Alex Ortega, nombrado como el fan número 1 de los Simpson por los productores de la serie, asegura que bares o restaurantes de ese tipo son capaces de transportar a las personas a su infancia, ya que los hace sentir como si lo personajes de la pantalla estuvieran presentes.
“La sensación más padre es cuando sabes que probarás una hamburguesa o bebida de la serie. También son puntos sociales importantes porque ayudan a encontrar personas afines en gustos”, expone Ortega.
A este tipo de lugares asisten en su mayoría individuos de entre 25 y 30 años de edad. De acuerdo con los especialistas, la ventaja de acudir a estos establecimientos es qué, además de ser lugares diferentes, promueven el consumo y comercio local
Toque divertido, el valor agregado para restaurantes y negocios
De acuerdo con los especialistas, las personas que quieran abrir negocios o restaurantes de este tipo deberán tomar en cuenta que gran parte de su presupuesto se invertirá en la ambientación, pues es el valor añadido más importante de estos establecimientos, la base del concepto de negocio y el verdadero reclamo para la clientela.
Para Rubén Dario, creador del concepto Lovecraft Café, si se quiere tener una cafetería temática es importante el valor agregado.
“No se trata solo de ir a probar los alimentos, debe existir un concepto divertido. A la gente le gustan los videojuegos, la literatura, las películas y series, antes no había este tipo de espacios y ahora, con ellos, les podemos ofrecer nuevas experiencias”.
Las nuevas generaciones son quienes más se han abierto a estas propuestas, ahora prefieren tomar un café en ambientes inusuales, probar alimentos, bebidas extrañas y tomarse selfies junto a la decoración.
“Imagínate una ambientación orientada a darle construcción a los mitos de Lovecraft a partir de lo oscuro, angustiante y sin limites de tiempo y espacio, estos lugares le dan un giro a todo, desde la decoración, el menú y los postres que son temáticos, una experiencia que va mucho mas allá de un café, aquí todos pueden convivir con la cosmogonía de Lovecraft”, dice Rubén Dario.
También puedes leer: Negocios tricolor dan sabor a las Fiestas Patrias
El lado arriesgado de los Restaurantes temáticos
Levantar la cortina a un espacio temático es el sueño de muchos, sin embargo, el principal error que se comete es que no se analiza el riesgo de lo que significa aventurarse en este mundo.
Las cifras no mienten. En México, la esperanza de vida promedio de los negocios en el país es de 7.8 años, pero este número se reduce a 6.9 años para el caso del sector económico integrado por restaurantes, bares y cafeterías, de acuerdo con cifras del Inegi.
La situación es más complicada al momento de mirar hacia los espacios temáticos, pues, aunque no existen cifras exactas sobre su mortalidad, basta con revisar las de la industria en general para saber cómo se están moviendo las tendencias de consumo y a qué están expuestos.
Para incursionar en este tipo de negocios es necesario contar con conocimientos sobre propiedad intelectual y derechos de autor por las implicaciones legales que a la larga puedan surgir a causa del uso inadecuado de marcas registradas
En el mundo de los negocios, las modas son pasajeras y si los restauranteros no se logran adaptar a esto, ni siquiera la magia de Harry Potter o del Universo Marvel los podrá salvar del fracaso.
Adolfo Cotero, desarrollador y consultor de negocios, opina que esta clase de establecimientos deben dividirse de dos formas: entre los que han sobrevivido al paso del tiempo y los que están llegando al mercado como resultado de un boom.
También destaca que el riesgo de incursionar en un nicho monotemático es alto y si no se cuenta con una sólida estrategia el camino será más complicado.
“Aquellos que se aventuren a emprender inspirados por sus pasiones deben medirle el pulso al mercado para saber si el negocio se logrará mantener vigente con el paso de los años y sobrevivirá a las exigencias de los consumidores, de lo contrario están condenados a morir”, precisa Cotero.
El consultor de negocios detalla que un factor clave en la ecuación de las unidades empresariales temáticas son los precios, pues en algunos restaurantes tradicionales el ticket promedio puede ser de hasta 250 pesos por persona.
De la fantasía a la realidad
Dirigir un negocio con alguna temática relacionada con libros, películas o series siempre será sinónimo de pesos.
Preparar alimentos y bebidas, así como instalar réplicas de escenografías permite crear atmósferas donde innumerables fanáticos se dan cita.
Sin embargo, para poner en marcha conceptos inspirados en creaciones originales es importante que los empresarios conozcan más allá de leyes laborales, pues se trata de conceptos con derechos de autor y marcas registradas.
En el caso particular de México, los delitos contra la propiedad intelectual se sancionan con hasta 10 años de prisión y de dos a veinte mil días de multa, de acuerdo con lo tipificado en el Código Penal Federal
Por ello, muchos establecimientos evitan elementos con marca registrada, con el objetivo de evitar infringir algún derecho de autor, pues ningún restaurante querrá lidiar con el músculo legal de los gigantes de la industria del entretenimiento.
Gerardo Torres, coordinador editorial en Marvel México, manifiesta que más allá de las cuestiones legales, otro de los mayores errores que se cometen al momento de establecer este tipo de negocios son las malas imitaciones o carentes de detalles que le dan la magia.
No obstante, el también conductor del programa de radio Fan Boys Mx considera que los homenajes más sutiles también son una buena fórmula para poder alcanzar el éxito, ya que, si el boom de las series y películas en las que están inspirados pierde poder, otros elementos pueden salir al rescate.
