Residentes de zona norte de Monterrey se organizan ante alta delincuencia

La ausencia policial en un polígono de la capital de Nuevo León motivó mecanismos de defensa propios como el llamado a los medios de comunicación en cuanto ocurre un ilícito en alguna de las colonias
Daniel Anguiano Daniel Anguiano Publicado el
Comparte esta nota

Las colonias de la zona norte de la capital del país tienen años en el abandono, lo que las ha convertido en un foco de inseguridad.

Vecinos entrevistados por Reporte Indigo, que prefirieron el anonimato, coincidieron en que existe una ausencia de vigilancia por parte de las autoridades, y que en este caso, la seguridad de la zona le corresponde a la Policía de Monterrey.

Las colonias Estrella, Hidalgo, Bella Vista, Pedro Lozano, Niño Artillero, Garza Nieto, Progreso, Larralde y hasta Mitras Norte integran un polígono donde el descuido y la ausencia de vigilancia se percibe en cada momento del día.

Sin embargo, es en la noche cuando las condiciones son más favorables para la delincuencia, pues los asaltos a negocios y a peatones, robos tipo “cristalazo” y hasta casos de abuso sexual se registran.

Un vecino de la colonia Pedro Lozano, que pidió ser identificado solo con el nombre de “Lalo”, dijo que el problema más común en este barrio es el robo a casa habitación y el tipo “cristalazo”, este último sobre todo en los alrededores de la Clínica 17 del IMSS.

“Yo tengo más de 20 años de vivir en esta colonia y no ha cambiado nada desde entonces y la seguridad de la zona no cambia ni con un alcalde ni con otro”, dijo.

Explicó que la vigilancia es escasa y que un mecanismo que han adoptado los vecinos de la zona es que cuando perciben que los robos y otros incidentes “se desbordan”, hacen denuncias a los medios de comunicación para que así la autoridad se sienta comprometida a incrementar la seguridad.

“Vienen (las autoridades) y luego se hacen juntas con la policía y luego se calma un rato (la delincuencia), pero después vuelven”, agregó.

En ese sentido, Ana María Esquivel, presidenta del Consejo Ciudadano de Seguridad de Nuevo León, dijo que los vecinos tendrían que mantenerse organizados y convocar a las autoridades de manera periódica para que no se abandonen las estrategias de vigilancia.

“Tiene que ver mucho que nosotros como ciudadanos exijamos de forma constante, porque luego lo solucionan. Tiene que haber un seguimiento. El hecho de que cambien los titulares, no implica que las cosas se tienen que relajar”, agregó.

Esquivel mencionó que, al principio de la administración municipal actual al mando de Luis Donaldo Colosio, se propuso la creación de consejos ciudadanos de seguridad; sin embargo, añadió, el edil no dio una respuesta positiva.

“Al inicio de esta administración se tenía contemplado contratar más elementos, que se iba a dar una capacitación más amplia. Sabemos que no ha sido fácil reclutar policías.

“En su momento solicitamos al alcalde instalar el consejo ciudadano de seguridad como lo tienen algunos municipios, pero no nos dio una respuesta positiva, nos decía que no era el momento y que tiene otros consejos”, agregó.

Policía Regia y Fuerza Civil, ausentes

La seguridad de esta zona, que involucra al menos a 10 barrios, le corresponde a la Policía Regia, no a la Fuerza Civil; para ello se buscó al Municipio de Monterrey y se le solicitó información sobre las acciones en este perímetro, pero no hubo respuesta.

En tanto, la percepción de seguridad en el municipio se ha deteriorado en el último año: en abril de 2024, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) presentó los resultados de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana.

El ejercicio arrojó que el 70.5 por ciento de la población de Monterrey percibe al municipio como inseguro, lo que representó un alza de 12 puntos porcentuales, luego de que en diciembre de 2023, el porcentaje era del 50.8 por ciento.

El Semáforo Delictivo de la Fiscalía General de Justicia de Nuevo León coloca en amarillo el delito de robo tipo “cristalazo” para la zona vigilada por la Policía Regia, y en verde para la que le corresponde a Fuerza Civil.

Sin embargo, en los delitos de violencia familiar, lesiones, violación y homicidio, ambas zonas se encuentran en colores rojo y amarillo. El primer caso representa un indicador de que los delitos de este tipo sobrepasan el límite histórico; y el segundo que hay una reducción menor a 25 por ciento.

Los abusos se cometen a plena luz del día

El pasado 23 de junio, un hombre identificado como Américo S. fue detenido en la colonia Benito Juárez, en Monterrey, por presuntamente haber violado a una menor de 14 años.

Los hechos habrían ocurrido cerca de la Clínica 17 del IMSS, a plena luz del día, cuando el hombre presuntamente abusó de la joven en un baldío de la zona.

La empleada de un negocio cercano a la clínica dijo que el sujeto era cliente frecuente y que acudía por lo regular a comprar cerveza y cigarros.

“La verdad es que hay muy poca vigilancia. ‘El Américo’ aquí venía, se me hace que ya está en el penal”, dijo.

Agregó que un problema constante, derivado de la falta de presencia policiaca, es el robo de baterías a los vehículos que se estacionan alrededor de la clínica y el asalto a los familiares de los pacientes que aguardan por la noche fuera del hospital.

A propósito, Esquivel dijo que la vigilancia es parte de la estrategia de prevención, y en ese sentido, existe una responsabilidad municipal.

“El municipio debe reforzar las acciones en estas colonias de forma constante y permanente, sin necesidad de que se den llamados de los vecinos, siempre es mejor prevenir”, agregó.

Síguenos en Google News para estar al día
Salir de la versión móvil