Personas privadas de la libertad en reclusorios de Nuevo León tomaron una importante decisión en su vida para aplicarla al momento de reintegrarse a la sociedad y cambiar su manera de pensar, luego de cumplir una pena.
En meses pasados los reos decidieron inscribirse a los cursos que ofreció el Gobierno para concluir sus estudios de educación básica en primaria y secundaria, para poder tener más oportunidades de crecimiento profesional.
Fue el pasado jueves que la Secretaría de Igualdad e Inclusión realizó la ceremonia de graduación en donde más de 300 personas finalizaron con éxito sus estudios y aprendizajes.
El patio del Centro de Reinserción Social número 2, ubicado en el municipio de Apodaca, fue el escenario para montar el templete en donde estuvieron presentes autoridades de otras secretarías del Gobierno.
Reciben reos certificado
Uno a uno fueron llamados los reos graduados vestidos con su torra y birrete a recibir su certificado expedido por la Secretaría de Educación estatal, que acredita la conclusión de sus estudios.
La dependencia informó que este tipo de acciones embonan en el objetivos de los centros de readaptación, para lograr la reinserción en la sociedad de las personas que en el pasado hicieron algun mal y por tal motivo fueron encerradas por un tiempo fijado por un impartidor de justicia.
“Hicimos entrega de más de 𝟑𝟎𝟎 𝐜𝐞𝐫𝐭𝐢𝐟𝐢𝐜𝐚𝐝𝐨𝐬 𝐝𝐞 𝐩𝐫𝐢𝐦𝐚𝐫𝐢𝐚 𝐲 𝐬𝐞𝐜𝐮𝐧𝐝𝐚𝐫𝐢𝐚 a personas privadas de la libertad, lo que permitió abatir en un 75 por ciento el rezago educativo en los centros penitenciarios del estado”, dice una publicación de la secretaría en redes sociales.
Se informó que en la actividad participaron diversas asociaciones como Faro en el Camino, que se dedican a impulsar la reinserción social de las personas privadas de la libertad.
También de la Secretaría de Educación de Nuevo León y la Coordinación del Sistema Estatal de Educación para Adultos (COSEA).
