¿Ni confrontación ni sumisión?

Son horas históricas para nuestro País. A partir de la toma de protesta del presidente estadounidense, Donald Trump, México ha entrado en un espiral político que amenaza su economía y seguridad.

La afrenta es también para los mexicanos que radican allá, con papeles o sin ellos, los paisanos están temerosos de una ola de deportaciones y de una escalada de discriminación por la política del “compra americano y contrata americano”, que fue parte toral del discurso en la investidura del mandatario norteamericano el viernes pasado.

Por parte del gobierno mexicano la estrategia ha sido la mesura y el apuro por concretar una primera reunión entre equipos de gobierno como antesala a un encuentro entre Enrique Peña Nieto y Donald Trump. 

El presidente mexicano fue enfático y dijo apenas ayer que no habrá confrontación pero tampoco sumisión. Se explorará por la vía del diálogo llevar a buen puerto la añeja relación, vista por analistas económicos como dependencia para México y que con la directriz del nuevo gobierno pasa a ser un riesgo latente para el desarrollo del País. 

Estamos en el filo de la navaja. 

El presidente mexicano apuntó que la política exterior se orientará hacia dos grandes prioridades: la primera fortalecer la presencia de México en el mundo a fin de diversificar vínculos políticos y comerciales, y la segunda abrir una nueva etapa de diálogo y negociación en la relación bilateral con Estados Unidos.

“Es evidente que Estados Unidos tiene una nueva visión para su política exterior. Ante esta realidad México está obligado a tomar acciones para defender sus intereses nacionales. Es claro que tenemos que iniciar una negociación”, lanzó el mandatario en un encuentro para fijar posicionamiento por parte de su gobierno.

Peña Nieto enumeró los cinco principios básicos que guiarán las negociaciones con la nueva administración de Estados Unidos, que son: la soberanía nacional, respeto al estado de derecho, visión constructiva y propositiva, integración de Norteamérica y negociación integral.

“México tratará de manera abierta y completa todos y cada uno de los temas de nuestra relación. Llevaremos a la mesa todos los temas: el comercio sí, pero también la migración y los temas de seguridad; incluyendo la seguridad de la frontera, las amenazas terroristas y el tráfico ilegal de drogas, armas y efectivo”, insistió. 

El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) lanza la propuesta, lo que sigue es que México mire hacia otros mercados. Es momento de salvaguardarse y dejar de ver al vecino como única posibilidad. Se lo dice a los gobernantes. Pero, ¿tendrá contemplada el gobierno mexicano la posibilidad de que es imposible negociar con Donald Trump?

¿Cuál será entonces la estrategia del gobierno mexicano si todo indica que Trump prefiere los monólogos en lugar del diálogo?

 ¿Qué margen de negociación existe si el presidente de los Estados Unidos se sienta a negociar con una pistola sobre la mesa?

En las primeras 48 horas el tema toral de sus discursos y comentarios ha sido la renegociación del Tratado de Libre Comercio poniendo como prioridad a su País. Otro de sus movimientos recientes que tiene un alto contenido semiótico y político es el desaparecer la versión en español de la página web de la Casa Blanca. 

El nuevo presidente del país más poderoso del mundo es sin duda la refundación del sueño americano. Su política erige una nueva era: la pesadilla trumpiana. 

Principios

Puntos básicos que guiarán las negociaciones con EU:

1.- Respeto al estado de derecho

2.- Soberanía nacional

3.- Visión constructiva y propositiva

4.- Integración de Norteamérica

5.-Negociación integral

La escalada de Trump

La limpieza étnica que impulsa el presidente Donald Trump ha comenzado con una cacería lingüística en contra de los hispanos –inmigrantes o no- que viven en los Estados Unidos. 

La suspensión de la versión en español de la página de internet de la Casa Blanca no es un atentado menor. Es el primer ataque de Trump, ya como presidente, en contra de esos “indeseables” que no pertenecen a su “American First”. 

Es decir: los hispanos e inmigrantes que viven en suelo norteamericano.

El vocero del gobierno de Trump, el secretario de Prensa de Trump, Sean Spicer, atribuyó la suspensión a un retraso normal como parte de la transición digital. 

“Continuaremos construyendo la web en las áreas cruciales. Tomará un poco más de tiempo, pero estamos trabajando paso a paso en ello para tenerlo todo listo”, declaró Spicer.

El trumpismo también suspendió las cuentas en redes sociales que proporcionaban información en español de los servicios que brinda el gobierno. La decisión afectará directamente a casi 50 millones de personas que conforman la comunidad hispana considerada la primer minoría de los Estados Unidos.

“Tenemos un país donde, si te quieres integrar, tienes que hablar inglés. Necesitamos que haya integración para tener un país. No soy el primero en decir esto. Este es un país donde hablamos inglés, no español”, aseguró Trump en uno de los debates republicanos.

En campaña y luego como presidente electo, Trump ha endurecido su discurso contra México. Ha amenazado con un impuesto especial a las empresas armadoras que deciden llevar sus inversiones a México, que ha propiciado que algunas firmas como Ford y General Motors, hayan detenido sus planes en suelo mexicano.

El presidente norteamericano en sus primeros discursos ha enviado más que señales de que está decidido a cumplir sus promesas de campaña como lo son la construcción del muro fronterizo, la repatriación de inmigrantes y la renegociación del TLC (Nafta, por sus siglas en inglés)

Este fin de semana el presidente Trump firmó la retirada de Estados Unidos del TPP, acuerdo comercial en el que participaba México. Se espera que hoy en la tarde firme una orden ejecutiva –acuerdo que no se requiere aval del Congreso- para comenzar una renegociación del TLC que tiene con México y Canadá.

La posición de Trump es renegociar el TLC, pero en varias ocasiones ha hablado de cancelar el acuerdo si México y Canadá no aceptan sus condiciones.

“Empezaremos a renegociar NAFTA, la inmigración y la seguridad en la frontera”, declaró Trump.

La próxima semana, el 31 de enero, Trump tiene contemplado reunirse con su homólogo mexicano Enrique Peña Nieto en Washington.

En este encuentro bilateral, además de la renegociación del TLC, estará en la agenda la construcción del muro en la frontera y la inmigración.

‘Si quieren salirse del tratado, que lo hagan’

El Presidente de la mesa directiva del Senado de la República, el senador Pablo Escudero, aseguró que México está listo para una eventual salida de los Estados Unidos del Tratado de Libre Comercio.

“Hay que decirlo claro, si los Estados Unidos deciden salirse del tratado, que lo hagan, nosotros estamos listos. México es grande, sabremos cómo de manera rápida salir adelante. México es más grande que cualquier tratado”.

Durante la presentación del posicionamiento en materia de Política Exterior, el senador del Partido Verde, hizo un llamado a honrar la conmemoración de los 100 años de la Constitución Política de México con una postura digna y de unidad.

“Iniciemos dichos festejos con una posición valiente, de fortaleza, digna, de unidad, el país nos lo reclama”.

El presidente del Senado reiteró a Enrique Peña Nieto el apoyo del Senado para la construcción de una política única del Estado mexicano en materia de política exterior.

“Los retos obligan a una suma de esfuerzos para definir una sola política de Estado, pues con una política única fortalecemos las capacidades institucionales de todos, nos volvemos más potentes”.

Asimismo, Escudero calificó como apremiante atender la situación de los migrantes y las familias de los migrantes que se encuentran en situación de retorno, para que éste pueda ser digno, ordenado y seguro.

“No les podemos dar la espalda dos veces a nuestros paisanos. Ya fuimos una vez incapaces de darles las condiciones para vivir en México, no les podemos dar nuevamente la espalda”.

Sobre los retos y desafíos que se presentan ante la nueva realidad de la relación con Estados Unidos, Escudero apuntó que están obligados a la debida protección de los mexicanos y sus familias en Estados Unidos sin pretexto alguno.

“Compartimos la preocupación de todos los mexicanos, en especial la de nuestros hermanos migrantes que están viviendo momentos difíciles, derivados de las políticas que pretende adoptar el gobierno entrante de Estados Unidos, que atentan y ponen en riesgo los intereses nacionales de México”.

México, socio indispensable

El titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray, habló sobre la importancia que tiene México para Estados Unidos, calificándolo como un socio indispensable para le economía y la sociedad estadounidense.

Videgaray mencionó algunos ejemplos concretos como California, en donde el comercio con México representa darle soporte a 566 mil empleos a través de exportaciones de California a México por 26 mil 800 millones de dólares.

Asimismo apuntó que Texas, el principal socio comercial mexicano en Estados Unidos, tuvo un comercio con México en 2014 por encima de 92 mil millones de dólares en exportaciones texanas al país.

“Esto significa que más de 380 mil empleos tan sólo en el Estado de Texas, dependen del acceso de las exportaciones texanas al mercado mexicano”, enfatizó Videgaray.

El funcionario reconoció que Estados Unidos es el origen de la mayor parte de la inversión extranjera que ha llegado en los últimos años al país, sin embargo también México se ha convertido en una fuente muy importante de inversiones en Estados Unidos. 

“Hoy las inversiones que empresas mexicanas han realizado en Estados Unidos representan ya un acumulado de más de 18 mil millones de dólares”, aclaró.

Videgaray habló también sobre la transformación del flujo migratorio, pues si bien en 2009 se estimaba que había un flujo de más de 380 mil mexicanos indocumentados que cruzaban los Estados Unidos, esta cifra fue de apenas 80 mil en 2014.

Mientras tanto, el número de ciudadanos de otras naciones que cruzan territorio nacional para tratar de llegar a los Estados Unidos ha crecido de manera significativa en los últimos años. 

“Este es un cambio fundamental en la forma en que ocurre el fenómeno migratorio e implica que Estados Unidos y México hoy comparten un problema y comparten un interés para resolver juntos esta compleja dinámica de flujos poblacionales”.

El canciller recalcó que será en los próximos días cuando habrá de iniciar conversaciones con el nuevo gobierno de los Estados Unidos, con la seguridad de llegar a un buen resultado.

La postura empresarial

Durante su participación en el posicionamiento en materia de Política Exterior, el presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Juan Pablo Castañón, aseguró que los empresarios asumen el compromiso que la situación demanda y están decididos a responder a la altura.

“Todos tenemos algo que aportar: en lo público y en lo privado, la sociedad y el gobierno, debemos trabajar juntos para que México siga fortalecido y salga marchando con firmeza hacia un futuro de desarrollo compartido”, dijo.

El líder empresarial recalcó que los mexicanos no pueden depender de un solo mercado, y el actual panorama debe ser un estímulo para diversificar el destino de las exportaciones. 

“Trabajar en nuestra relación con Estados Unidos no puede ni debe ser nuestra única respuesta a las circunstancias actuales del mundo.

“México debe y tiene que aprovechar este momento de incertidumbre para buscar lo que no hemos alcanzado durante años: objetivos en diversificar aún más nuestros mercados y, sobre todo, fortalecer nuestros mercados internos”, señaló Castañón.

Castañón subrayó la necesidad de que se tomen medidas impostergables para fortalecer la economía interna y contrarrestar de esta forma las eventualidades externas. 

“Necesitamos continuar una agenda de fortalecimiento de nuestro mercado interno a través de mantener la estabilidad macroeconómica; impulsar la construcción de infraestructura; promover la adopción y el desarrollo de nuevas tecnologías y fomentar un crecimiento incluyente”.

Asimismo destacó la necesidad de seguir construyendo un ambiente propicio para el desarrollo, lo cual permitirá capitalizar la inversión extranjera en el país, apuntalando las cadenas productivas.

“Fortalecer el Estado de derecho en el país, combatir sin tregua la corrupción en las instituciones públicas y privadas y fomentar también la rendición de cuentas en los gobiernos”, dijo.

Trabajadores, en el olvido

El secretario general de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), Carlos Aceves del Olmo, aprovechó su participación en el Posicionamiento en Materia de Política Exterior para hablar del rezago que vive el sector obrero en el país.

“Mientras no tengamos a los trabajadores con suficiente alimento en su mesa para ellos y su familia y un poco de dinerito en la bolsa, no hemos cumplido”.

El líder sindical aseguró que el Tratado de Libre Comercio surgido hace 20 años sí dio buenos resultados en el país, aunque quedó un pendiente que sigue vigente hasta nuestros días, el sector laboral, por lo que éste debería de estar presente en las negociaciones que vienen. 

“Con todo respeto, con humildad, de mi parte y de las trabajadoras y los trabajadores, pido que nosotros seamos parte de esa negociación, que los sindicatos estén, porque los sindicatos norteamericanos van a estar.

“Hoy yo siento un nuevo ambiente, se sentía que nos iban a comer vivos, ahora yo siento que las cosas van tomando su exacta dimensión. Ojalá eso se vea en los hechos”, dijo.

Aceves apuntó que a los trabajadores no se les ha hecho justicia, pues llevan casi 30 años de rezago salarial, siendo la gran deuda social del país, y que se ha venido postergando durante demasiado tiempo.

“Esa gente que a veces se enoja, a veces tiene razón, porque no se le da la información adecuada o puntual.

“Los trabajadores no son traidores, quieren a sus instituciones, hemos buscado ser cercanos a las instituciones y seguramente vamos a llegar muy lejos”, señaló.