El desorden en el espacio público de la Ciudad de México por la ausencia de una regulación será atendido por primera vez en la historia.
Esto involucra a las banquetas, paradas de camión, estaciones y rutas del transporte público, avenidas, postes, comercio ambulante, parques, señales vehiculares e incluso anuncios espectaculares.
Los tres aspectos fundamentales de la ley, según legisladores locales promoventes, son la coordinación interinstitucional para llenar el vacío que existe en la regulación del tema; la participación ciudadana; y procurar que todas las intervenciones respeten y aporten al medio ambiente de la ciudad.
Todas las modificaciones en los mil 845 kilómetros cuadrados que mide la Ciudad de México, de acuerdo con la iniciativa de ley presentada el 15 de mayo pasado en el Congreso, deberán estar diseñadas conforme a las necesidades del entorno, de la población y sin afectar al medio ambiente.
Además, se busca que el mejoramiento del espacio público ayude a solucionar cuestiones como la inseguridad.
Llenar el vacío del espacio público
Gabriela Salido Magos, diputada promovente y presidenta de la Comisión de Uso y Aprovechamiento del Espacio Público, indica en entrevista que la ley pretende llenar el vacío institucional que existe, debido a que no hay una dependencia que regule o se haga cargo de la supervisión del espacio público desde la extinción de la Autoridad del Espacio Público en diciembre de 2018.
Es una ley que define claramente los derechos y obligaciones en el espacio público que es algo que se ha vuelto un vacío
La propuesta de ley, que contiene 281 artículos, define las responsabilidades y atribuciones en todo lo que comprende el espacio público de las alcaldías así como de las dependencias del Gobierno de la Ciudad de México como la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi), el Instituto de Verificación Administrativa (Invea), la Secretaría de Movilidad (Semovi), la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial (PAOT), la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco), la Secretaría de Pueblos y Barrios Originarios y Comunidades Indígenas Residentes (SEPI), entre otras.
Lo anterior es con la intención de que el diseño y la gestión de la capital en el tema sea homogéneo.
“Sobre todo queremos un espacio público social con diseño universal, que es fundamental y nunca se ha planteado un esquema en el que se homogenice la imagen del espacio público para garantizar una ciudad mucho más amigable”, explica.
Participación ciudadana
Para Salido Magos, hacer una ciudad más amigable para los más de 8 millones capitalinos es posible con la participación ciudadana, contemplada en la propuesta de la Ley de Espacio Público.
Esto, refiere la diputada, ayudará a evitar y mediar problemas como los ocurridos en 2017 durante la construcción de la Línea 7 del Metrobús por Paseo de la Reforma (zona patrimonial e histórica) por la que vecinos se ampararon e incluso lograron la suspensión de obras en una ocasión.
“Se debe resaltar que la ley reconoce mecanismos de participación ciudadana para mejorar el espacio público, se propone la participación ciudadana en el diseño y discusión de los espacios y no es limitativo a los Comités de Participación Comunitaria porque se busca que los habitantes de las cuadras se involucren, no solo por colonia”, dice Magos.
La legisladora prevé que en este 2020 se apruebe la ley, que actualmente está siendo dictaminada en la comisión; y posteriormente se hagan los reglamentos necesarios para su aplicación.
Medio ambiente
Uno de los ejes más importantes de la ley es que las intervenciones no tengan un impacto ambiental negativo, como en los casos donde se talan árboles para construir o modificar edificaciones.
“Otra de las intenciones es reducir la huella ecológica de la ciudad al definir las obligaciones de las autoridades de velar por la conservación y preservación de los recursos naturales”, señala.
Por ejemplo, darle más capacidades sancionatorias a la PAOT en caso de que se violen las normas ambientales vigentes.
El marco legal también estipula que toda intervención al espacio público vendrá acompañada de áreas verdes.
“La lógica será no restarle un solo metro cuadrado a la ciudad de área verde sino al contrario, incrementarla, que las intervenciones consideren zonas de irrigación al subsuelo. Es una cosa muy importante, la recarga del manto freático en cada obra”, explica.
Salido Magos afirma que el mejoramiento urbano, promoverá que la ciudadanía se apropie de los espacios y los use más. Con ello, dice, la capital se hará más segura.
Los ejes fundamentales de la iniciativa son la coordinación interinstitucional, la participación ciudadana y el respeto al medio ambiente
La oportunidad de regular el espacio público
Roberto Remes, especialista en urbanismo y extitular de la Autoridad del Espacio Público, reconoce que la ley es positiva y completa.
Sin embargo, puede mejorar más si se define lo concerniente a los espacios peatonales, denominados en la iniciativa como franjas peatonales.
Añade que la ley también se puede construir mejor si se regulan los Permisos Administrativos Temporales Revocables (PATR’s) que actualmente particulares usan para explotar y modificar el espacio público.
“Son permisos en los que particulares cumplen requisitos para explotar y apropiarse del espacio público, sin considerar otros aspectos importantes como los pasos peatonales. Me parece que si la normativa de PATR’s se añade, puede mejorar muchísimo”, explica.
