Con la llegada de abril, también se acerca el plazo para que las personas físicas en México presenten su declaración anual del Impuesto Sobre la Renta (ISR) correspondiente al ejercicio fiscal 2023 ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Es importante recordar que esta obligación fiscal aplica para aquellas personas que hayan obtenido ingresos por sueldos y salarios, servicios profesionales, arrendamiento de bienes, o cualquier otra actividad empresarial durante el año pasado, siempre y cuando estos ingresos superen los 400,000 pesos anuales.
Roberto Colín, integrante de la Comisión Técnica Fiscal del Colegio de Contadores Públicos de México (CCPM), señala que el periodo para presentar la declaración inicia el primero de abril de 2024 y concluye el 30 de abril del mismo año. Es importante tener en cuenta que esta fecha límite no se recorre al caer en día hábil.
¿Qué sucede si se presenta la declaración fuera del plazo establecido o directamente no se hace?
El Código Fiscal de la Federación (CFF) contempla multas para aquellos contribuyentes que no presenten su declaración en la fecha establecida o la presenten fuera del plazo límite. Estas multas pueden ir de entre 1,810 y 22,400 pesos, según cada caso y la omisión cometida.
Colín destaca que es importante cumplir con esta obligación fiscal, ya que no hacerlo puede acarrear consecuencias financieras adicionales, como multas, actualizaciones y recargos. Además, el no presentar la declaración puede ser considerado como un crédito firme por parte de la autoridad fiscal, lo que podría afectar el historial crediticio del contribuyente.
Por otro lado, si la declaración anual resulta en un saldo a favor para el contribuyente y esta no se presenta en el plazo establecido, se estaría perdiendo la oportunidad de recibir un reembolso por parte del SAT.
Vale la pena detallar que la presentación de la declaración anual del ISR es una obligación fiscal que no debe pasarse por alto. Su incumplimiento puede generar consecuencias financieras.
