¿Quiénes integrarán dicha comisión y quién la presidirá?
Es la pregunta que muchos empresarios
Los asesores jurídicos de MVS presentarán a los integrantes de la próxima legislatura una propuesta de modificación a la Ley de Radio y Televisión para garantizar que todos los mexicanos tengan acceso al uso de la banda ancha.
Pero también propondrán cambios de fondo a los próximos integrantes de la Comisión de Comunicaciones de la Cámara de Diputados para, como respondió en la conferencia de prensa el miércoles pasado Joaquín Vargas, a pregunta expresa de Reporte Indigo:
“No tengan hincado y con la espada de Damocles a ningún otro grupo, como lo están haciendo con nosotros”, dijo el presidente de MVS.
¿Quiénes integrarán dicha comisión y quién la presidirá?
Es la pregunta que muchos empresarios de los medios de radio y television se hacen.
Las modificaciones son necesarias “para evitar que la telebancada tome las decisiones”, admite Alieda Calleja a Reporte Indigo.
La presidenta de la Asociación Mexicana de Derecho a la Información recuerda que hoy el duopolio Televisa-TVAzteca tiene la batuta en el Congreso.
Y mientras las piezas se acomodan, Purificación Carpinteyro, ex subsecretaria de la SCT, otrora funcionaria de Telefónica, se prepara para la batalla.
Ella quiere encabezar esa comisión legislativa. La moneda está en el aire.
Ni Televisa, ni Telmex
El presidente de la Comisión Federal de Competencia Eduardo Perez Mota, se pronunció el día de ayer para que los operadores de la banda de 2.5 GHz no sean ni Televisa, ni Telmex.
En entrevista con Carmen Aristegui, Pérez Mota señaló:
“Si esto (el “rescate de la banda de 2.5 GHZ) nos lleva a que esa frecuencia no pueda ser utilizada y no signifique mas competencia del mercado, en los próximos años y probablemente en la próxima administración, yo creo que sería muy, muy desafortunado”.
Aunque “los gigantes (Televisa y Telmex) quedarían compitiendo entre ellos, pero tener un tercer competidor inálambrico en ese mercado, naturalmente disminuiría cualquier posibilidad de colusión y eso maximizaría la competencia y benefiaría a todos los consumidores y ciudadanos”.
“Todavía hay que ver que va a pasar en esta historia”, concluyó.
Los cambios
Fue en 1992 cuando el entonces presidente Carlos Salinas de Gortari subastó los activos de Imevisión.
Fue así como se incorporó al sistema audiovisual mexicano la empresa TV Azteca.
En aquel entonces, la decisión del presidente Salinas buscaba promover la competencia en la televisión abierta monopolizada desde siempre por Televisa. También buscaba abrir mercados rentables a la publicidad y una mayor pluralidad de contenidos.
Canal 11 sólo cubre el 27 por ciento del territorio mexicano. De ahí que se dejó a la iniciativa privada el monopolio.
Con Ernesto Zedillo en el poder, se reformó el artículo 28 de la Constitución para la prohibición de los monopolios y se sacó a la comunicación vía satélite de las operaciones estratégicas del Estado.
Esto abrió la puerta para la privatización y la participación de capitales extranjeros en esa rama de las telecomunicaciones.
En l995 salió la Ley Federal de Telecomunicaciones.
Su eje principal era la convergencia tecnológica entre las telecomunicaciones, la informática y la television de paga –cable alta frecuencia y vía satélite.
Se permitió la inversión extranjera en esta rama hasta el 49 por ciento.
También se modificó el Reglamento de la Televisión por Cable y se cambió la figura de concesionarios por el de operadores de redes públicas.
Con ello se amplían los servicios a la telefonía, televenta, Internet, etcétera.
Ya en el sexenio del presidente Vicente Fox se presentó al Congreso la controvertida “Ley Televisa”, que llegó hasta la Suprema Corte de Justicia para impugnar la reforma. El recurso jurídico documenta 21 violaciones a 27 artículos de la Constitución.
Dos de los alegatos principales se basan en la violación a los artículos 28 y 134 de la Carta Magna.
El artículo 28 constitucional prohíbe los monopolios, mientras que el 134 establece que se deberán licitar las concesiones que el Estado otorgue a particulares.
Ello no ocurre con el uso del espacio excedente producto de la digitalización.
De acuerdo con el especialista Gabriel Sosa Plata, investigador de Mediatelecom y la UAM, es evidente que las reformas impulsadas y el proceso de negociación en el que se desarrollaron las mismas, fueron hechas a modo de los grandes conglomerados de medios de comunicación.
Son los más favorecidos de las distintas posibilidades que ofrece la convergencia tecnológica para potenciar sus servicios.
“No debemos olvidar que el régimen de propiedad de estas empresas se basa en el otorgamiento de concesiones para el uso, temporal y regulado, de las bandas de frecuencias”, agrega.
El espectro radioeléctrico, por donde transitan las ondas electromagnéticas, es un bien finito administrado por el Estado en beneficio de la sociedad y no sólo para que los particulares lo exploten a perpetuidad, concluye.
