El Ayuntamiento de Puerto Vallarta tiene un largo listado de pendientes de las administraciones pasadas.
En las oficinas del municipio, de los regidores, hay gente que pide el pago de deudas de las administraciones pasadas.
O reclaman el término de apoyos económicos que ya no se pueden entregar por el estado financiero de Puerto Vallarta.
Las cuentas que dejaron los presidentes municipales priistas anteriores son escandalosas.
Los sobrecostos, las compras y licitaciones que representan un perjuicio a las finanzas del municipio son parte del historial que ahora el gobierno de Ramón Guerrero Martínez está revisando.
La regidora de Movimiento Ciudadano -del mismo partido del alcalde- Susana Carreño, es la encargada de la Comisión de Entrega Recepción y ha visto lo oscuro de las cuentas que dejaron los priistas.
“Existen muchas irregularidades, una desestabilización económica en el municipio ¿porqué? Porque tenemos deuda con laboratorios, tenemos deudas con proveedores que son, no de miles, de millones de pesos.
“Venimos arrastrando una serie de cuestiones jurídicas, laudos, deudas, que hoy se han convertido en un problema muy fuerte, económico y social para el Ayuntamiento de Puerto Vallarta”.
Pero a pesar de que ya pasaron cuatro meses desde la entrada de la nueva administración, el trámite de entrega recepción no ha concluido.
Eso sí, ya se cumplió con los protocolos, según explica el contralor del Ayuntamiento Víctor Manuel Bernal.
“Ya están firmadas todas las actas por cada una de las dependencias, cada uno de los funcionarios entrantes ya firmaron de recibido todas sus actas a todos los funcionarios salientes”.
Pero el proceso completo sigue en curso, no ha terminado y las reuniones de la Comisión de Entrega Recepción se postergan.
Esta tardanza hace que funcionarios de la nueva administración ya se cuestionen sobre las determinaciones del alcalde que reiteró hasta el cansancio que no haría una “cacería de brujas”, pero tampoco sería “tapadera de nadie”.
Y es que sus visitas a Guadalajara ponen sobre la mesa el tema de un posible acuerdo que le permita sobrevivir con un ayuntamiento tan endeudado.
Porque si alguien podría especificar como se gastó el dinero en las administraciones de Javier Bravo Carbajal (2006-2009) y de Salvador González Reséndiz (2009-2012), sería Guerrero Martínez.
Pero al mismo tiempo, el próximo gobierno del estado es priista, y el municipio vallartense necesita mucha ayuda.
Y en la negociación con el PRI podría ir el encubrimiento de lo que pasó en los gobiernos de los dos ex alcaldes que hoy suenan para formar parte del gabinete de Jorge Aristóteles Sandoval Díaz.
Por eso empleados de la administración que encabeza Guerrero Martínez se cuestionan porque el alcalde actual no asume la responsabilidad de declarar al Ayuntamiento en quiebra, como lo hizo Acapulco.
Y sobretodo que se deslinden responsabilidades y se sancione a los culpables de que hoy el Ayuntamiento de Puerto Vallarta deba tanto.
“Eso que tú me dices de que podrían algunos de los funcionarios ocupar algunos cargos en la administración del maestro Jorge Aristóteles esa sería una ofensa para Vallarta y yo creo que para todo el estado de Jalisco, para todos los habitantes.
“Ellos son los responsables del saqueo que se dio en este municipio (…) ellos son los responsables de este quebranto, de este endeudamiento, entonces, ¿se les va a dar un premio porque son del mismo partido?”, señaló Carreño.
Deudas con particulares
Los adeudos de las administraciones pasadas con particulares, están haciéndose evidentes en el nuevo gobierno.
Irma Galicia Monrroy, es una vendedora de artesanías que perdió 20 mil pesos del enganche que dio para un local que sería construido en la administración de Javier Bravo Carbajal.
A la fecha reclama el pago al Ayuntamiento de Puerto Vallarta por el local que nunca le dieron, como le pasó a 15 vendedores más que dieron el mismo adelanto que ella.
La respuesta de la administración de Bravo y González Reséndiz fue que “no hay dinero”, e incluso señala que en algún punto recibió la amenaza de que si continuaba cobrando su deuda, le quitarían su permiso municipal de puestera.
“Sabe qué, no se van a hacer los locales y no hay dinero”, señala que le dijeron empleados del Ayuntamiento de la administración de Bravo Carbajal.
Por otro lado el caso de José de Jesús Navarro Hernández es otro que muestra las finanzas paupérrimas del municipio.
Porque a finales de la administración de Bravo Carbajal, ante un proyecto de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) de invernaderos en el que fueron defraudados empleados municipales, quien pagó los platos rotos fue Navarro Hernández.
Y es que cuando la Sedesol realizó la auditoría para conocer el proyecto de los dos invernaderos que obtuvieron 250 mil pesos en recursos federales, pidieron ayuda a Navarro Hernández, quien se dedica a la fabricación de invernaderos.
Él les entregó las facturas y el invernadero por adelantado, pero hasta la fecha el Ayuntamiento sigue sin pagarle.
“Cuando ya estuvo Salvador (González Reséndiz) como presidente tuve algunas dos o tres entrevistas. En la primera entrevista él me dijo: ‘¿cuánto se te debe?’, le dije mira aquí los papeles dice que se me debe 60 mil pesos, me dijo: ‘bueno, ¿con cuánto lo arreglamos?’.
“Le dije ¿sabes cómo se gana el dinero en el campo? Yo creo qué no porque si tú supieras como se gana el dinero en el campo no creo que me hicieras esa oferta, porque esa es una ofensa.
“La respuesta de Salvador (González, para con sus empleados) fue o le pagamos al señor, o pagamos nómina: no hay dinero”, indicó Navarro Hernández.
Ahora el agricultor busca que la nueva administración le pague lo que le debe, de la deuda que nunca saldó la de Bravo Carbajal.
Por otra parte, también las carencias del Ayuntamiento de Puerto Vallarta han truncado las carreras de jóvenes atletas.
Es el caso de Orlando Medina Cedillo, atleta sordomudo que por retirarle el apoyo que se le daba y quedarle debiendo 14 mil pesos, tuvo que dejar el deporte.
Su madre, Ángela Cedillo Mayo, empleada del Ayuntamiento de Puerto Vallarta explicó:
“El último año de Javier Bravo ya no lo recibí. Fueron 14 mil pesos que le quedaron debiendo a los atletas. Y luego los tres años que pasaron de este (González) Reséndiz tampoco se le dio, no se le dio nada”.
Las finanzas familiares se vinieron abajo cuando los viajes salieron del bolsillo de su madre, empleada de Aseo Público que gana alrededor de cinco mil pesos al mes.
Y como el Ayuntamiento debe al Instituto de Pensiones del Estado de Jalisco, los empleados no pueden acceder a prestamos.
“No hay préstamo para los de Ayuntamiento, hasta que el presidente haga convenio con pensiones, donde nos prestaban”, indicó Cedillo Mayo.
“Estamos con una deuda a pensiones, actualmente y mí y a cualquier empleado le descuentan para pagar pensiones, sin embargo, ningún trabajador puede accesar a los créditos”, dijo al respecto la regidora Susana Carreño.
Afectación a las finanzas
Como el proceso de entrega recepción del Ayuntamiento de Puerto Vallarta todavía no termina, es imposible determinar todo lo que está mal en las cuentas del municipio.
Pero el contralor de Puerto Vallarta Víctor Manuel Bernal insiste en que no debe haber preocupación por la tardanza, pues aunque termine el proceso de entrega recepción, siempre se podrán fincar responsabilidades por actuación irregular.
“El hecho de que se reciba una administración no quiere decir que hasta ahí se lavan las manos los que se fueron.
“Cuando la Auditoría Superior del Estado revise alguna situación concreta, ellos pueden encontrar algún detalle, ellos en su momento harán la observación y quién resulte responsable de ese actuar en su momento pues ahí pudiera dar lugar a algún procedimiento de alguna autoridad”, indicó Bernal.
Pero los casos concretos ya están saliendo a la luz y con ello se esperan las denuncias.
Ya se presentó una contra el ex síndico Fernando Castro Rubio y contra quien resulte responsable por los delitos de ejercicio indebido de servicio público, abandono del ejercicio público; y también por desvío de recursos y aprovechamiento indebido de atribuciones y facultades.
Pero la denuncia no ha sido ratificada.
“Hay un caso en que se denunció al ex síndico, en donde él ya no era síndico y firmó documentos como síndico en donde benefició a una empresa que le debía nueve millones de pesos al Ayuntamiento en impuestos y de un plumazo se lo dejó en tres”, señaló Carreño.
La empresa, es una compañía farmacéutica con la razón social Repuestos Orientales Kinmu, S.A. de C.V.
Seguridad comprometida
La Secretaría de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Puerto Vallarta tiene serias carencias e irregularidades en el manejo de sus recursos, que vienen de las administraciones pasadas.
Las instalaciones eran un mercado municipal ubicado en el poblado Las Juntas, y los propios empleados de las áreas de seguridad reconocen que no cubren con las exigencias mínimas en materia de derechos humanos.
Tampoco se cumple con ciertos requisitos que se exigen por ley para la entrega del Subsidio para la Seguridad en los Municipios (Subsemun), especialmente en cuanto a la ubicación del armamento.
“Me interesa mucho el área de Seguridad Pública (…) aquí tengo por ejemplo el asunto de las cámaras que nunca han funcionado, que de las 43 funcionan 9. También el de las lámparas que se compraron a sobreprecio”, señaló la regidora encargada de la Comisión de Entrega Recepción.
Y es que el déficit de patrullas en el Ayuntamiento también es grave, pues de las 119 que tiene el municipio, menos de 20 funcionan.
¿En dónde terminaron los recursos del Subsemun que deberían ser gastados en infraestructura de seguridad y mejoras laborales para los policías?
La UMA y el Malecón
Dos de los temas pendientes por resolver, son las grandes obras de la administración de Salvador González Reséndiz: la Unidad Municipal Administrativa (UMA) y la renovación del Malecón.
Un recorrido por las instalaciones de la UMA permite constatar que hubo errores en la construcción que ponen en riesgo su completa habitabilidad.
Y todo a pesar de que ha costado al municipio tres veces más de lo presupuestado inicialmente: su precio sería de poco más de 40 millones de pesos y terminó costando 120.
Más la inversión adicional que tenga que hacer la actual administración por las deficiencias estructurales.
Por otro lado, el nuevo Malecón llevó al Ayuntamiento de Puerto Vallarta a solicitar un préstamo de poco más de 46 millones de pesos a la banca, y a la fecha tiene errores básicos que están siendo revisados.
“En el caso del Malecón se tiene que hacer un estimado –y tiene que ser un perito- de la obra para ver si realmente coinciden los costos.
“Hasta la fecha la empresa no ha resuelto los problemas del Malecón; te comento que hubo una chica que murió electrocutada, cosa que no quiso reconocer la pasada administración”, indicó Carreño.
Además de estas dos obras, hay empresas constructoras que tenían asignados contratos de obra pública que nunca realizaron, por eso la nueva administración empezó a rescindir de éstos.
Porque había casos en los “no se dio una licitación como se debiera”, y eventualmente podrían generaran una erogación mayor a las ya de por si golpeadas finanzas del Ayuntamiento.
“Servicios médicos municipales está saqueado, sin medicinas, sin nada porque no sabemos a donde fueron los recursos.
“A mi me invitaron aquí a cambiar la historia, y sino cambiamos la historia y la repetimos, pues entonces yo creo que por dignidad tendríamos que retirarnos”, concluyó Carreño.