Entre la traición y las protestas, así fue la aprobación de la reforma judicial

Con la traición de Miguel Ángel Yunes Morena concretó su golpe maestro y la oposición padeció un nuevo descalabró
Rubén Zermeño, Rubén Arizmendi e Yvonne Reyes Rubén Zermeño, Rubén Arizmendi e Yvonne Reyes Publicado el
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Ya sea por cohesión, convicción, amenazas o un historial oscuro, el último dique de la oposición se derrumbó, permitiendo que se desbordara la marea guinda y pintara a su paso al Poder Legislativo y ahogara al Judicial.

Las compuertas están abiertas y a partir de hoy Morena y sus aliados tienen vía libre para poder avalar las reformas constitucionales que consideren necesarias para materializar su “Cuarta Transformación”.

Intentando frenar lo que no pudo la oposición política ni en las urnas el pasado 2 de junio ni en el Congreso de la Unión durante los últimos días, un movimiento social cobró fuerza ayer y se convirtió probablemente en la última línea de defensa que podría plantarle cara a Morena.

Si bien, las protestas solo pudieron pausar por unas horas la discusión al irrumpir en el Salón de Plenos del Senado, las imágenes de su “toma” hicieron eco en México y en el mundo y su mensaje se amplificó como terremoto.

A pesar de las protestas y la ‘toma’ del Senado por parte de manifestantes, la reforma al Poder Judicial avanzó sin freno en el Legislativo federal. Foto: Especial

La victoria de la batalla contra el Poder Judicial será guinda, pero aún quedan en puerta muchas más. Esta es una crónica de un día inédito en el Congreso de la Unión, un guión con traiciones, giros de tuerca y mucho conflicto. Así se vivió el 10 de septiembre del 2024 en el Senado de la República.

Un día en el que el peso del destino de un país recayó sobre los hombros de un solo hombre, el senador Miguel Ángel Yunes Márquez, quien decidió abandonar la bancada del Partido Acción Nacional (PAN) para darle el voto que le hacía falta a Morena.

Antes de eso, desapareció, mandó decir que estaba gravemente enfermo en el hospital y su papá salió a defenderlo.

Ya en tribuna, el senador se defendió, defendió la reforma y anunció que votaría a favor de ella.

“Ni cobarde, ni traidor, salí del hospital para dar las razones de mi voto. (…) no está en mis manos el destino de México, está en las de todos los mexicanos (…) Me duele la agresión injusta, pero me duele más la que se originó en mi propio partido. No puedo aceptar que se me quiera imponer el sentido de mi voto a base de amenazas.

“La mayoría legislativa representa a la mayoría de los mexicanos. (…) Ni México se va a destruir si se aprueba la reforma, ni la reforma va a cambiar el sistema de justicia que a gritos pide una transformación de fondo. (…) La mayoría sí tiene derecho a hacer cambios estructurales. (…) Se requiere más valor para ir contra la corriente que montarse en ella. El tiempo dirá”, mencionó entre interrupciones y voz entrecortada Yunes Jr. para justificar la decisión de su voto.

Después de bajar de tribuna recibió un beso de la senadora Andrea Chávez, un abrazo de Manuel Velasco y un fuerte apretón de manos de Adán Augusto López, la traición se había consumado y el voto logrado.

La detención y nunca aparición de Barreda

A las 11:00 horas sonó la campana que daba inicio a la sesión matutina. El ambiente era de incertidumbre ya que no se sabía si Morena contaría con el voto que le hacía falta para obtener la mayoría calificada.

Media hora después, el presidente de la Mesa Directiva, Gerardo Fernández Noroña, fue interrumpido por el coordinador de Movimiento Ciudadano, Clemente Castañeda, quien denunció que la sesión no podía continuar porque su compañero de bancada, Daniel Barreda y su padre, habían sido privados de la libertad en Campeche.

De inmediato y esperando un motivo para no continuar, la oposición se sumó al reclamo, mientras los guindas pidieron continuar con la sesión.

En menos de 15 minutos, el líder de la bancada de Morena, Adán Augusto López Hernández apareció con un celular en llamada y le confirmó a Fernández Noroña que Barreda no estaba detenido y que presuntamente se encontraba sano y salvo en la Ciudad de México.

Pese a ello, los naranjas exigieron aplazar la sesión hasta saber que los dichos de Adán eran verdad. La respuesta del exsecretario de Gobernación fue que la bancada naranja mentía. La petición fue rechazada por la mayoría.

Por los pasillos corrió la versión de que Daniel Barreda sí había sido detenido y que negociaría su libertad a cambio de sumarse a la bancada del Partido Verde Ecologista de México, hecho que fue desmentido por Manuel Velasco.

Clemente Castañeda insistió durante todo el día que Barreda y sus padres estaban retenidos, a lo que Noroña siempre le respondió que de acuerdo con las autoridades no se encontraban detenidos. Lo cierto es que el emecista nunca apareció durante la sesión.

La aparición de Yunes Linares, de enfermo a ‘traidor’

El clima político dentro del salón de plenos se intensificó cuando se aceptó el permiso para que el senador Miguel Ángel Yunes Márquez se ausentara por problemas de salud.

En su lugar, ocupó el escaño su padre, Miguel Ángel Yunes Linares, quien fue recibido con gritos de “¡traidor, traidor!”, dedicados a su hijo.

Traicionado y sabiendo que con la salida de los Yunes del corral albiazul perderían la votación, Marko Cortés se enfrentó en una discusión uno a uno y sin cuartel contra el gobernador de Veracruz en las que recordaron sus “tapaderas” y sus visitas a la Parroquia del puerto jarocho.

“He escuchado la intervención de Marko Cortés. Y no, Marko, ni cobarde ni traidor. Cobarde y traidor eres tú, no Miguel Ángel Yunes Márquez. Cobarde y traidor eres tú. Miguel Ángel Yunes Márquez ha dado siempre la cara y a la familia Yunes nadie nos ha doblado”, defendió, pero sin soltar prenda ni anunciar la decisión de su voto.

Después del pleito entre los panistas, vino lo inesperado, intempestivamente un trabajador del Senado se acercó a Fernández Noroña para comunicarle al oído que las personas que se mantenían afuera de las instalaciones en protesta por la reforma judicial, tras conocer que el oficialismo tenía el voto para lograr su Plan C se habían metido al recinto y estaban por entrar al pleno.

Protestas que llegaron hasta el pleno y cambio de sede

Se levanta la sesión y se decreta un receso indefinido”, fueron las últimas palabras del presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña al conocer que cientos de personas se introdujeron al Senado de la República para impedir que Morena y sus aliados del Partido del Trabajo y Verde Ecologista aprobaran la reforma al Poder Judicial de la Federación.

Poco antes de las 17:00 horas, en uno de los templetes de la protesta sobre Paseo de la Reforma, una mujer que no fue identificada pidió el micrófono para notificar a los manifestantes que un sujeto se acercó a ella para decirle que la puerta de acceso a las instalaciones del Senado de la República estaba abierta. Sin esperar, cientos de manifestantes entraron sin que nadie se los impidiera.

Con banderas de México y una batucada, hombres y mujeres entraron hasta el Salón de Plenos, en donde aún sesionaban 127 senadores de los 128.

Con banderas de México y una batucada, hombres y mujeres entraron hasta el Salón de Plenos, en donde aún sesionaban 127 senadores de los 128. Foto: Especial

El caos rebasó al personal de resguardo. Con lo que encontraban, los manifestantes lograron romper candados.

“¡El Poder Judicial no va a caer! ¡No va a caer!”, “¡En dónde están, en dónde están, esos senadores que nos iban a escuchar!” coreaban al unísono hombres y mujeres sin que nadie los pudiera frenar.

Mientras los manifestantes avanzaban, Fernández Noroña pedía a los senadores que abandonaran el lugar, siendo los primeros en salir los del partido guinda y sus aliados.

La “toma” del Senado se fue diluyendo cuando se corrió la voz que los legisladores sesionarían en la antigua casona de Xicoténcatl.

Por la noche, las protestas arreciaron en el primer cuadro de la ciudad. Al querer entrar a la sede alterna, policías capitalinos recibieron a los manifestantes con escudos y gas.

En punto de las 19:00 horas, Fernández Noroña continuó la sesión con la presencia de todos los grupos parlamentarios y 127 senadores.

El presidente de la mesa directiva notificó al Pleno que Miguel Ángel Yunes Márquez se reincorporaría a sus funciones legislativas.

Con ello, Morena y sus aliados consiguieron el escaño que les faltaba mientras la oposición sufrió una derrota incluso más dolorosa que la del pasado 2 de junio porque en esta ocasión el verdugo fue la traición.

Al cierre de esta edición continuaba la discusión de la reforma al Poder Judicial la cual fue aprobada durante las primeras horas de hoy.

Reforma a la Guardia Nacional, lo que sigue

El coordinador de Morena en la Cámara de Diputados, Ricardo Monreal Ávila, no descartó que sea en una sede alterna en donde aprueben las reformas en materia de Guardia Nacional y la de derechos indígenas y afromexicanos, de mantenerse bloqueados los accesos al recinto legislativo de San Lázaro por trabajadores del Poder Judicial de la Federación.

Acusó directamente a la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Norma Piña, de ser la responsable de que los legisladores no puedan ingresar al recinto a trabajar y de que estén paralizados los trabajos en la Cámara de Diputados y en el Poder Judicial.

“Ella es la titular del Poder Judicial y ella es la responsable de mantener esta situación en la que nos vemos situados en la imposibilidad física de acudir a trabajar, ella es la responsable, sin duda, y obviamente a los trabajadores de la Corte y del Poder Judicial les tenemos respeto, no vamos a entrar a la fuerza.

“No vamos a generar condiciones que puedan, después, provocar alguna ríspidez social. Entonces, estamos tranquilos, pero sí le hacemos un llamado a la presidenta Norma Piña para que nos permita trabajar en nuestras instalaciones.

Sin embargo, indicó que lo que sí es un hecho es que el miércoles y jueves de la siguiente semana serán aprobadas ambas reformas.

En conferencia de prensa, dijo que esta semana la Cámara de Diputados ya no sesionará, pero confió en que la siguiente puedan ingresar al recinto parlamentario para retomar el trabajo.

“Si no hay condiciones, si no se desaloja mañana (hoy) voluntariamente, también dejaríamos de sesionar para hacerlo la semana que entra. Tenemos dos reformas, vamos a deliberar y, en su caso, a aprobar la semana próxima la relativa al artículo segundo constitucional sobre pueblos originarios, comunidades indígenas, afromexicanos y la relativa a la Guardia Nacional”.

Monreal reiteró su confianza en que la discusión y aprobación de ambas reformas se den en el pleno del recinto legislativo de San Lázaro. “Yo confío que sea ahí. Yo confío en eso, pero tenemos recursos para buscar alternas”.

Sobre la reforma al Poder Judicial, Monreal mencionó que se cuidó el proceso legislativo por lo que está “blindada” ante los cientos o miles de recursos que se presenten en su contra para intentar impugnarla.

“Lo hemos cuidado de manera muy especial, hemos observado todos los procedimientos, otorgado todos los tiempos para la deliberación. No hay ningún recurso que proceda contra la reforma constitucional, contra el órgano reformador de la Constitución que se compone con las dos Cámaras y con la mayoría de legislaturas”.

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