Prevén aumento de contaminación por lento cumplimento a la Ley de Publicidad Exterior y elecciones de 2024

El lento avance en el reordenamiento de la publicidad exterior de la capital y las próximas elecciones de 2024 representarán un problema en el espacio urbano, debido a las modalidades de publicidad que permite la nueva ley.

Así lo indican organizaciones de la sociedad civil al señalar que el trabajo lento en el retiro de espectaculares será aprovechado por las fuerzas políticas para continuar con la contratación de dichos espacios aunque ya no están permitidos.

El 31 de mayo de 2022, el Congreso capitalino aprobó el dictamen con modificaciones a la iniciativa por la que se abroga la Ley de Publicidad Exterior del Distrito Federal y se expide la Ley de Publicidad Exterior de la Ciudad de México que propuso la jefatura de Gobierno.

La nueva disposición, al igual que la anterior de 2015, ordena el retiro obligatorio de todos los espectaculares en azoteas que están registrados en el marco legal de 2015.

“Una vez concluido el plazo de 70 días naturales contados a partir de la entrada en vigor de este decreto, todos los medios publicitarios prohibidos conforme a la misma, respecto de los cuales no se haya solicitado su permanencia, cambio de modalidad o reubicación, se presumirán ilegales y, por lo tanto, se procederá a su retiro por parte del Instituto de Verificación Administrativa de la Ciudad de México”, detalla la normativa.

Incluso, los retiros deberán ser financiados y llevados a cabo por las mismas empresas; contrario a lo que se realizaba anteriormente, cuando el Instituto de Verificación Administrativa los ejecutaba con los recursos públicos.

Especificaciones legales

La ley fue publicada en la Gaceta Oficial de la Ciudad de México el pasado 1 de junio, y estipula que, en el plazo máximo de un año, se deberán retirar todos los espectaculares ilegales: los que están en azoteas y los autosoportados.

También se prohíbe la publicidad en puentes peatonales y delimita las dimensiones y tipos de anuncios en zonas patrimonial. Igualmente, estipula un total de 13 corredores publicitarios para colocar anuncios.

“En el Centro Histórico de la Ciudad de México y otras zonas de monumentos históricos, así como en áreas de conservación patrimonial se deberán respetar tamaños, ubicación, dimensiones, colores y materiales.

“En apego a la normativa establecida por la Secretaría, en concurrencia con la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicas, Artísticas e Históricas, así como con el Instituto Nacional de Antropología e Historia y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura”, especifica el marco legal.

Los nuevos tipos de publicidad que permite la nueva ley son los tapiales, muros ciegos y los de proyección óptica, también llamados “video mapping”, que antes no estaban considerados.

La disposición estima que son más de mil 200 anuncios espectaculares los que deben ser retirados de las azoteas. Sin embargo, de acuerdo con datos dados a conocer por las autoridades capitalinas, se calcula que apenas el 30 por ciento de los espectaculares prohibidos han sido retirados.

Elecciones a la vista

En 2024 se llevarán a cabo los comicios para elegir a los integrantes de 31 Congresos locales, a las y los diputados de la Cámara baja y del Senado de la República, así como a la o el sucesor del presidente de México.

Además, se renovarán las gubernaturas de Chiapas, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Puebla, Tabasco, Veracruz y Yucatán; mientras que en la Ciudad de México se votará por un nuevo titular para la jefatura de Gobierno.

Esto se convertirá en un grave problema de contaminación visual a nivel local, de acuerdo con Jorge Carlos Negrete Vázquez, presidente de la Fundación por el Rescate y Recuperación del Paisaje Urbano (FRRPU).

El activista explica que el reordenamiento y retiro de publicidad exterior es muy lento y no se va a cumplir con lo que estipula la ley.

“La meta de la nueva ley era quitar todos los anuncios espectaculares en un año a partir de la entrada en vigor de la ley. Se tendrían que estar retirando cinco diarios, pero hay un rezago muy grande”, detalla.

Esto se debe a que las autoridades no han obligado a las empresas a retirar sus espectaculares.

“Entonces, en la medida en que no haya un acto de autoridad en el que se obligue a la industria a dejar las azoteas limpias, lo que se va a lograr es que haya desorden”, menciona.

Negrete añade que la nueva ley permite anuncios como mupis (soportes publicitarios instalados en elementos de mobiliario urbano), envolventes y muros ciegos que provocarán contaminación visual a nivel de calle.

“Tenemos pendientes en todos lados, pero obviamente en los muros y los envolventes hay anuncios prohibidos por la ley anterior que volvieron a salir, pese a que habían desaparecido”, indica.

Por último, dice que el retraso en el ordenamiento y las nuevas formas de publicidad ocasionarán que durante el proceso electoral de 2024 haya un gran aumento de basura propagandística y contaminación.

“Estas situaciones serán aprovechadas por las fuerzas políticas para poner, no sus mensajes, si no su imagen. Lo que va a generar es que tengamos calles totalmente invadidas, al igual que los transportes. Esto obviamente no va a ayudar en nada al problema de la contaminación visual y contaminación física conforme se vaya acercando el proceso”, explica.

Cabe señalar que las elecciones y todo lo que conlleva su realización genera grandes cantidades de basura: el 28 de junio de 2018, al término de las campañas electorales a nivel federal y local en la capital del país, la entonces Agencia de Gestión Urbana de la Ciudad de México informó que se habían recogido 9.6 toneladas de residuos como lonas, carteles y pendones.