El Grupo Parlamentario del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) en el Senado aseguró que existe un pendiente grave por atender en materia de empaquetado de medicamentos, pues debe establecerse en cada caja, empaque, envoltorio, envase o cualquier tipo de embalaje que esté rotulado con el sistema de lectura braille.
La discapacidad visual es el impedimento más presente en toda nuestra población, con 61 por ciento del total, seguida por la limitación para caminar con 38.8 por ciento y, en tercer lugar, la limitación para escuchar con 24.4 por ciento, del 100 por ciento de nuestra población con discapacidad.
María del Rocío Corona Nakamura detalló que al menos 12 millones de mexicanas y mexicanos padecen algún grado de discapacidad visual.
Ante ello, presentó una iniciativa para reformar la Ley General de Salud, para establecer, de manera obligatoria, que los empaques de los medicamentos contengan en sistema braille su denominación genérica y distintiva, sus miligramos y fecha de caducidad.
Además de ello, solicitó que los distribuidores implementen en los medicamentos un código QR con dicha información.
Con este contenido, “están dando un enorme paso hacia adelante en materia de disfrute del derecho a la salud de las personas con discapacidad visual”.
Además de sentar un precedente muy valioso en materia de inclusión de nuestras personas con algún tipo de discapacidad.
“No podemos hablar de responsabilidad en el manejo de los medicamentos, de suficiencia para disposición, de su cuidado en su administración, ni siquiera de una verdadera inclusión de nuestras personas débiles visuales, si no atendemos este pendiente que es grave y desafortunado para nuestra sociedad”, apuntó.
Sobre todo porque la automedicación sigue siendo un peligro latente y común, la sobredosis por medicamentos sigue siendo recurrente y amenazante, así como el error inconsciente en su consumo es un riesgo real.
Además de ello, señaló que seis de cada 10 medicinas que se ofrecen en el país para su venta y consumo son en lugares no regulados por la autoridad y en establecimientos regulados venden medicamentos falsos, caducos, robados o fabricadas clandestinamente, sin controles de calidad.
“La población con discapacidad visual, que es completamente dependiente de un tercero, si es que cuenta con él, para saber qué medicina se está tomando, para asegurarse que sea la adecuada o al menos, que no esté caducada”, resaltó.
Finalmente dijo que países como Chile y Brasil ya han empezado a implementar sistemas de lectura braille en sus empaques de medicamentos, como medida de responsabilidad social.
