"Se exhorta al Titular del Poder Ejecutivo Federal para que en el uso de sus facultades constitucionales, a través de la intervención de las Fuerzas Armadas, se garantice la seguridad y tranquilidad”
César Camacho Quiroz, presidente nacional del PRI, denunció que el PAN desvió mil 350 millones de pesos del erario de Baja California.
Por un lado quieren elecciones con orden y paz. Por el otro, se acusan de todo.
Son las contrariedades en que incurren los partidos políticos cuando hay una contienda electoral. Principalmente el PRI y el PAN, que tienen una larga historia como adversarios.
Al PRD también lo suben al ring, pero no al nivel de los otros dos.
Mientras que el líder del PAN, Gustavo Madero, acusa que se está utilizando todo el poder para instalar nuevamente el régimen autoritario priista, los senadores albiazules presentan un punto de acuerdo para pedir a las autoridades que las elecciones del próximo 7 de julio se realicen en paz.
Lo mismo hace el PRI a dos días de que desde su sede nacional, diputados locales de Guanajuato acusaran al ex gobernador Juan Manuel Oliva de irregularidades financieras durante su administración.
Unos contra otros. Golpe y contragolpe en la arena pública. Sin embargo, en el Congreso, la beligerancia se vuelve primero punto de acuerdo, luego dictamen y después votación a favor por parte de todos.
En la sesión de ayer de la Comisión Permanente, el PRI hizo un exhorto para que prevalezca la cultura cívica y una actitud democrática en el proceso electoral que se realizará este domingo.
“En los acuerdos de civilidad que debieron haber firmado los actores políticos involucrados en los próximos comicios a celebrarse el 7 de julio próximo, se comprometieron a conducirse con respeto, no solo a las autoridades electorales, sino a sus contrincantes, y a la población en general, sino a respetar los resultados electorales y que sus inconformidades se hagan valer ante las autoridades legalmente establecidas para dirimir las controversias que, en su caso, se generen”, dice el documento del tricolor.
Al mismo tiempo, correos electrónicos con remitente desconocido acusan a perredistas de Quintana Roo -estado gobernado por el PRI- de violencia y enriquecimiento ilícito.
César Camacho, líder nacional del PRI, y Gustavo Madero, presidente del PAN, se acusan mutuamente de violar los acuerdos del Pacto por México.
Ambos usan sus mejores frases. Juegos de palabras.
Desesperado, Madero denunció en el programa de Carmen Aristegui que el Gobierno Federal y las administraciones estatales estaban usando todo su poder contra su partido.
“Olvídense del Pacto por México, lo que está en riesgo es el País”.
El líder se queja amargamente pero los senadores Roberto Gil, José Rosas Aispuro y Francisco Domínguez utilizan la solemnidad del Congreso para pedir elecciones limpias y para eso piden la intervención del Ejército.
Es un compromiso oficial
“Se exhorta al Titular del Poder Ejecutivo Federal para que en el uso de sus facultades constitucionales, a través de la intervención de las Fuerzas Armadas, se garantice la seguridad y tranquilidad de los ciudadanos de los estados durante los comicios electorales del 7 de julio del 2013”, señala el punto de acuerdo del PAN
Además de la petición del PRI y el PAN, ya hay un dictamen al respecto. Para llegar a la votación, se reunieron las solicitudes de puntos de acuerdo presentados por senadores de los diferentes partidos.
Este recurso legislativo está impregnado del clásico lenguaje de los legisladores:
“La Comisión Permanente del Congreso de la Unión, en atención al acuerdo aprobado el pasado 26 de junio respecto a los procesos electorales en diversas entidades federativas, hace un respetuoso llamado a las autoridades de los 3 niveles de gobierno, servidores públicos, partidos políticos, candidatos y ciudadanos para que en el ámbito de sus responsabilidades y facultades realicen las acciones a su alcance para que la jornada electoral se desarrolle en un ambiente de civilidad, orden, paz y tranquilidad, asegurando a los ciudadanos el pleno ejercicio de sus derechos político-electorales con apego estricto a los principios del Estado Constitucional y Democracia de Derecho”.
Así expresan los partidos su interés en que las elecciones se lleven a cabo en paz.
Sin emabrgo, sus líderes, candidatos y legisladores no actúan en concordancia en los medios ni en las 14 entidades donde habrá elecciones… A pesar del Pacto por México.
