La planta recicladora de baterías que Enertec opera en el municipio de García, involucrada en la investigación por tráfico de tóxicos en Nuevo León, debe ser clausurada por las autoridades ambientales, afirma Guillermo Martínez Berlanga.
El integrante del Comité Ecológico Pro Bienestar de Nuevo León señala que esta empresa filial de la norteamericana Jhonson Controls Inc. no debe continuar operando aquí, hasta que se resuelva su nivel de involucramiento en el mercado negro de residuos peligrosos.
“Lo que hay que hacer es clausurar y luego proceder penalmente, y saber con quién está en contubernio.
“Debe de haber funcionarios y exfuncionarios ambientales, tanto de la pasada administración, que protegían a estas empresas por la influencia que podían tener algunos de los socios y exsocios”, acusa Martínez Berlanga.
“Lo que tiene que hacer la Profepa, que es la policía ambiental, es que en lo que son peras y manzanas, cancelar e iniciar una investigación pero con carácter de investigación penal”.
El viernes Reporte Indigo publicó que la PGR y la Profepa investigan en Nuevo León el robo de miles de toneladas de escoria de plomo, producto del reciclaje de baterías usadas.
Este caso pondría al descubierto un mercado negro de este material, no sólo en México, sino en países asiáticos, entre ellos China.
La investigación a cargo de Profepa y de la PGR involucra a la mayor productora de acumuladores en México, la empresa Enertec y su planta recicladora de baterías usadas, instalada en el municipio de García.
Martínez Berlanga atribuye este tipo de acciones clandestinas a un grupo de funcionarios y empresarios que denomina como la “Ecomafia”, que con sus actos han dañado el medio ambiente no sólo en Nuevo León.
“Hay un grupo perfectamente bien organizado que ha estado manejando clandestinamente los tóxicos en Nuevo León y que nosotros hemos denominado como la ecomafia de Nuevo León”, dice el activista.
“Es un gran negocio muy rentable manejar clandestinamente los metales pesados, en este caso el plomo, y los tóxicos, que es un negocio sumamente rentable.
“En esta investigación hay un montón de millones de dólares que se están moviendo en empresas que no eliminan o reducen in situ, o en un lugar apropiado sus desechos tóxicos peligrosos, como Enertec antiguamente LTH”.
Martínez Berlanga asegura que el mal manejo en la disposición final de este material tóxico está provocando daños en el medio ambiente de Nuevo León.
“Al momento en que están disponiendo de este residuo, dejan una huella muy grande en el medio ambiente que está causando un daño irreversible, no sólo a la salud de Nuevo León, sino la de todos los seres humanos”.
La escoria de plomo y los desechos de las baterías tienen un alto valor comercial.
Hay países como China que son grandes compradores de este material que se reutiliza en los procesos de minería y fundiciones.
La Norma Oficial Mexicana NOM-052-SEMARNAT-2005 señala que los residuos generados en la fabricación de baterías de plomo-ácido se consideran tóxicos y deben manejarse como tal.
Delegado en NL guarda silencio
El nuevo delegado de la Profepa en Nuevo León, Víctor Jaime Cabrera Medrano, se ha negado a pronunciarse sobre el tráfico de tóxicos que investiga la dependencia federal y que involucra a la empresa Enertec.
Desde el viernes que se publicó este caso se intentó entrevistar a Cabrera Medrano, pero el funcionario federal no pudo ser contactado alegando que no se encontraba en su oficina, ubicada en el Palacio Federal de Guadalupe.
El día de ayer se buscó una vez más al delegado de la Profepa en Nuevo León, pero en su oficina su asistente una vez más comunicó que el funcionario no estaba disponible para una entrevista sobre este tema.
La investigación por la desaparición de plomo de la planta recicladora de baterías de Enertec, en García, comenzó por parte de la Profepa con un procedimiento administrativo en contra de esta empresa filial de Jhonson Controls Inc.
El lunes el diputado del PAN, Francisco Treviño Cabello, exdelegado de la Profepa, adelantó que la Comisión de Medio Ambiente que él preside en el Congreso citará a Cabrera Medrano para que rinda un informe sobre su investigación.
Víctor Jaime Cabrera Medrano asumió el pasado 6 de mayo como delegado de la Profepa en Nuevo León, en sustitución de Juan Carlos Moreno Loo.
Cabrera Medrano se ha desempeñado como subdelegado de la PGR en Nuevo León y como coordinador de la Unidad Antisecuestros de la Procuraduría de Justicia del Estado, a cargo de Adrián de la Garza.