Con una bata hospitalaria de color azul, el 26 de abril del año 2017, un hombre de alrededor de 80 años fue presuntamente abandonado por sus familiares en las calles del municipio de Nezahualcóyolt, en el Estado de México.
El anciano fue hallado recostado en una banqueta sobre papel periódico y cubierto con dos cobijas, algunas almohadas y una sombrilla. Debido al mal estado de salud en el que se encontraba, no pudo indicar datos personales como su nombre a los policías que acudieron, alertados por los vecinos.
De acuerdo con las proyecciones del Consejo Nacional de Población (CONAPO), en el país habitan casi 13 millones de personas mayores a los 60 años. Por ello, en México el problema del abandono y maltrato que sufre este sector de la población es serio y debe atenderse.
Durante el Segundo Congreso Internacional Interdisciplinario sobre la Vejez y Envejecimiento, celebrado el año pasado, Margarita Maass Moreno, investigadora del Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades (CEIICH) de la UNAM alertó que el 20 por ciento de los adultos mayores vive olvidado por el gobierno, la sociedad y sus propias familias.
Además, la especialista informó que el 16 por ciento de los ancianos sufre abandono y maltrato. Debido a que en 2025 habrá 14 millones de personas mayores, dijo que se deben de diseñar e implementar programas preventivos en todas sus áreas.
La negligencia, el maltrato psicológico, físico y económico, son algunas de las agresiones que las personas de la tercera edad sufren para ser intimidados, aislados, dominados o controlados, señalaron académicas de la UNAM el pasado 15 de junio
Según las especialistas, el despojo patrimonial no es el único abuso que sufren, pero sí el más doloroso, pues suele ser cometido por sus propios descendientes.
Exigen al gobierno proteger sus derechos
En conjunto titulares e integrantes de organizaciones no gubernamentales, dieron a conocer la creación de un frente para exigir al gobierno federal firmar la convención Interamericana sobre la Protección de los Derechos Humanos de las Personas Mayores.
“Implica garantizar a los 13 millones de personas mayores en México un marco legal más amplio, que les permita ejercer plenamente sus derechos. Así, cuando un procedimiento legal no alcanza a ser resuelto en instancias nacionales se acude a las internacionales para que se puedan hacer recomendaciones abandono mayores en el a las autoridades y se resuelva”, dijo Graciela Casas Torres, académica de la escuela Nacional del Trabajo Social (ENTS), de la UNAM.
Para la senadora Angélica de la Peña, el Gobierno Federal no ha querido aprobar la Convención Interamericana sobre la Protección de los Derechos Humanos de las Personas Mayores, pese a que se le han hecho diversas excitativas, porque no quiere comprometerse.
“Hemos aprobado ya muchos tratados internacionales y (el gobierno) ya no quiere que haya revisión de esos compromisos y pretende cerrar las puertas del país para que no vengan relatores a verificar qué sí y qué no estamos cumpliendo”, acusó.
“Lo que establece la convención es que el Estado mexicano está obligado a tomar toda las medidas para garantizar los derechos de las personas mayores a partir de sus propias circunstancias, de las circunstancias específicas, por ejemplo, la atención a la salud, que debe ser especializada”, dijo De la Peña.
La legisladora también señaló que el problema en el país es que no hay una etiquetación para poner en funcionamiento el Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores (INAPAM), el cual tiene deber de orientar, atender y promover los derechos civiles y humanos de las personas ancianas.
Otro aspecto que señaló importante y diferente al de la política pública tiene que ver con la cultura, pues señaló que al llegar a cierta edad, las personas adultas requieren cuidados especiales que pueden constituir un ‘estorbo’ para la familia y por ello suelen ser maltratadas.
“Se tiene que desarrollar un programa desde los institutos del ámbito federal y local encargados de atender a los adultos mayores, para que se pueda hacer una articulación y de esa manera poder protegerlos”
“Al requerir de cuidados especiales pueden constituir un estorbo para la familia y sufren de discriminación, o mucho peor, de olvido. Entonces es necesario que se vea integralmente el problema sobre todo en un país como México”, agregó Angélica de la Peña.
Sector más vulnerable
Luis Enrique Hernández, director de la Asociación civil El Caracol, que se dedica a ayudar a personas en situación de calle, señala que los ancianos olvidados por sus familias son los más vulnerables a caer en esta situación.
Si nos focalizamos en los adultos mayores encontramos que muchos de ellos salen a las calles no porque salieron desde niños, son personas que están saliendo ya adultas.
“Y sobre todo están saliendo adultas porque tienen alguna enfermedad crónico degenerativo y las familias no pueden atenderles, porque perdieron su patrimonio, porque entraron por alguna razón a la cárcel y al salir su familia ya no los quiere ver o porque tienen alguna discapacidad psicosocial” explicó Hernández.
En el caso de las mujeres han identificado que tienen padecimientos de orden mental, aunque no han podido definirlas, mientras que en de los hombres son crónico-degenerativas como diabetes o hipertensión, lo cual los ha llevado incluso a perder alguna extremidad.
A diferencia de los jóvenes, las personas mayores no se pueden defender cuando son atacadas y suelen ser más vulnerables también en épocas de frío
“Nosotros creemos que en realidad se tiene que desarrollar un programa desde los institutos del ámbito federal y local encargados de atender a los adultos mayores, para que se pueda hacer una articulación y de esa manera poder protegerlos”, concluyó Luis Enrique Hernández.