Para aquellos que piensen que las segundas oportunidades nunca fueron buenas, la historia de ‘Leo’ es el claro ejemplo de que algunas veces sí funcionan. ‘Leo’ es el perrito pitbull que mató a una pareja de abuelitos en Torreón, Coahuila y cuando estaba a punto de ser sacrificado, una animalista lo rescató y vive una vida sana en un refugio.
Leo vivió un infierno en su vida pasada
La Asociación Lagunera de Defensoría Animal (ALDEA) intervino en febrero pasado en el caso del perro involucrado en el presunto ataque que resultó en la muerte de una pareja de adultos mayores en la colonia Nueva Aurora de Torreón a finales de enero de 2024.
De acuerdo con la Fiscalía General del Estado (FGE) de Coahuila, el can propinó múltiples mordidas a la pareja de adultos mayores, quienes fallecieron a causa de asfixia y hemorragia interna.
Tras el trágico hecho, la fiscalía tomó la custodia del can y cuando estaba a punto de sacrificarlo, Grisel Plata, presidente de ALDEA pidió la custodia del animal para rehabilitarlo y darle una segunda oportunidad.
Con la colaboración de un médico veterinario especializado en comportamiento animal, se realizaron pruebas que indicaron que ‘Leo’ podría ser rehabilitado. La Fiscalía emitió un comunicado permitiendo que ALDEA se haga cargo del perro, con la condición de enviar informes de su progreso cada dos meses.
Leo recibió una segunda oportunidad
Meses después, ahora bajo el nombre de ‘Leo‘, este can, que originalmente fue identificado como un pitbull, pero más tarde se determinó que es una mezcla de razas terrier, se encuentra bajo el cuidado de la asociación.
De acuerdo con la activista, ahora que Leo vive en un patio de cuatro por 10 metros y además tiene un cuarto que lo protege del sol y de la lluvia, no duda en lanzarse a jugar con la pelota y en demostrar su afecto a quien lo acaricie.
Plata señaló que el anterior comportamiento del perro estaba influenciado por su entorno y el trato que recibió desde su nacimiento. Leo, según describe, muestra una actitud dócil: juega con una pelota, busca la interacción humana y no se muestra perturbado por la presencia de otros perros que ladran cerca.
ALDEA ha rehabilitado a otros perros agresivos
Vale mencionar que ALDEA ha logrado resguardar a otros perros en situaciones similares en el pasado, como el caso de ‘Canela’, cuya mordida resultó en la pérdida de la pierna izquierda de un menor, y ‘Coca’, quien había mostrado agresividad hacia otro animal. En estos casos, la asociación abogó por el resguardo de los animales y su rehabilitación en lugar de la ejecución.
Con este precedente, la activista hace hincapié en considerar a la rehabilitación como una forma importante para la defensa de los derechos animales, lo que puede darle una segunda oportunidad a otros animalitos que hayan pasado por la misma situación que este pitbull.