Un ejemplo del uso de las redes sociales e influencers para posicionar a un candidato o partido político es el que realiza desde Nuevo León el matrimonio del gobernador Samuel García y Mariana Rodríguez, quienes libraron una multa de 55 millones de pesos por el impulso que representó el uso de redes sociales de la influencer para la campaña de su esposo.
Esto se da luego de que la Sala Superior del TEPJF consideró que las publicaciones de Instagram realizadas por Rodríguez Cantú fueron espontáneas y en uso de su libertad de expresión.
Al respecto, Paco Santamaría, director estratégico de mercadotecnia y conductor del podcast “Guía para el homo sapiens moderno”, opina que el modelo de promoción de Mariana Rodríguez “es impresionante”, pues hace campaña sin elementos evidentes, aunque recurra a imágenes polémicas como la que compartió con el menor de edad que adoptó temporalmente.
Ejemplifica lo anterior al describir una imagen de la titular de la oficina “Amar a Nuevo León” en la que aparece saltando en el aire ataviada con una blusa y pantalón color verde.
“Ella está haciendo más campaña a favor del Gobierno o en contra de sus adversarios políticos construyendo una narrativa donde dice ‘sí, subo la foto del niño, pero mírenme, soy libre’.
“Si nos descuidamos, pueden llegar tranquilamente a la Presidencia, porque los políticos se parecen a sus audiencias y ellos retratan el modelo aspiracional”, declara.
En tanto, Enrique Ortega, CEO del buró de comunicación estratégica e imagen pública de Lata de Ideas, aclara que, aunque popularmente los creadores de contenido son conocidos como influencers, su objetivo es crear videos, texto o imágenes que sean lo suficientemente populares para que mucha gente comente, comparta y, en el mejor de los casos, lo vean y se sientan influenciadas.
De este modo, sugiere que la regulación que se elabore en esta materia contemple sanciones más duras hacia los partidos políticos, y se determine la labor de los influencers, quienes, aunque tienen corresponsabilidad, únicamente son el conducto, por lo que, en ese caso, debería impulsarse una mayor conciencia ética.