Una mujer fue secuestrada, asesinada e inhumada en Tlalpan, luego de que sus captores no recibieran el rescate que habían exigido a cambio mantenerla con vida.
La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ) ejecutó una orden de cateo en un inmueble ubicado en la calle Bronce de San Miguel Topilejo, donde encontraron restos humanos que, aparentemente, pertenecen a la mujer secuestrada en julio de este año. En el domicilio también había pertenencias de la víctima.
En el lugar, la policía aprehendió a Silvana “N” y a Pablo “N” por su probable participación en el secuestro y privación de la libertad de la víctima. Al hombre también se le relaciona con la posible comisión de delitos de narcomenudeo.
Los restos humanos, localizados tras la búsqueda de indicios por binomios caninos, ya son analizados por la Coordinación General de Investigación Forense y Servicios Periciales, para dar con la identidad de la persona y confirmar si se trata de la mujer secuestrada.
Versiones apuntan a que la policía pudo dar con el domicilio luego de interceptar las llamadas de chantaje que los secuestradores hicieron a la familia. Cuando los agentes llegaron al domicilio, los presuntos secuestradores negaron que ahí hubiera una persona secuestrada; pero después el hombre confesó su crimen.
Durante cateo en la alcaldía de Tlalpan fueron detenidas dos personas involucradas en el secuestró de una mujer: FGJCDMX
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— Enfoque Noticias (@EnfoqueNoticias) November 10, 2020
Los presuntos delincuentes habían secuestrado a la mujer hasta quitarle la vida, debido a que, se presume, su familia no había pagado el rescate que ellos exigían.
Luego de asesinarla, los secuestradores cavaron una fosa y la inhumaron en un terreno donde construían un cuarto.
La detenida fue trasladada al penal femenil de Santa Martha Acatitla, donde un juez determinará su situación legal. El sujeto fue trasladado ante el representante social de la FGJ.
De enero a septiembre, en México se han abierto 14 mil 973 carpetas de investigación por delitos que atentan contra la libertad personal. Entre ellos, hubo 640 secuestros, de los que 558 ocurrieron para extorsionar a las familias de las víctimas. La mayor parte de ellos ocurrieron en el Estado de México y la Ciudad de México.