Los cárteles de drogas mexicanos continúan operando con normalidad pese a la emergencia sanitaria y las restricciones asociadas a los viajes impuestas en los Estados Unidos, reveló el más reciente informe de Evaluación Nacional de la Amenaza de Drogas de la DEA.
Según la Administración para el Control de Drogas estadounidense, a pesar de las interrupciones iniciales del contrabando, transporte y distribución de drogas, los cárteles ensayaron nuevos métodos y emplean las técnicas existentes para continuar operando durante la pandemia por COVID-19.
Aunque las organizaciones criminales sufrieron algunas afectaciones iniciales a corto plazo, la pandemia alteró sus operaciones muy poco o de manera insignificante a largo plazo y continúan exportando cantidades significativas de fentanilo, heroína, metanfetamina, cocaína y marihuana a los Estados Unidos.
AVAILABLE NOW! #DEA’s 2020 National Drug Threat Assessment a yearly review of the challenges communities face related to drug abuse & drug trafficking. Highlights include usage & trafficking trends for Rx, illegal & synthetic drugs, & the effect of #COVID19 during early 2020.
— DEA HQ (@DEAHQ) March 2, 2021
La DEA advierte que los cárteles mexicanos continúan teniendo el control de corredores de contrabando y el tráfico de drogas en los Estados Unidos a través de las organizaciones con mayor influencia: el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Además de no sufrir afectaciones, el Cártel de Sinaloa y el CJNG se aprovecharon de la emergencia sanitaria para inflar artificialmente el precio de la metanfetamina. Según la DEA, ambas organizaciones retuvieron envíos regulares de droga para incrementar después la venta y los precios.
Cárteles como el de Sinaloa tienen presencia en alrededor de 50 ciudades estadounidenses, incluyendo Los Angeles, San Diego, Houston, Miami, Boston y Nueva York.
En tanto, el CJNG se encuentra en alrededor de más de 20 regiones, donde destaca un control absoluto de Orlando, Kansas, Seattle y Roanoke. Por su parte, el cártel Beltrán Leyva mantiene control sobre Bellingham; mientras que Los Rojos están completamente posicionados en Oklahoma.
La DEA considera que las siguientes organizaciones criminales han tenido el mayor impacto en el tráfico de drogas a los Estados Unidos: el Cártel de Sinaloa, el CJNG, la organización Beltrán Leyva, el cártel del Noreste y Los Zetas; Guerreros Unidos, el cártel del Golfo, de Juárez y La Línea; así como la Familia Michoacana y Los Rojos.
Según informes policiales consultados por la DEA, la metanfetamina procedente de México continúa siendo de muy fácil acceso en los Estados Unidos. Además, las muertes provocadas por esa sustancia siguen incrementando, mientras que los precios se mantienen relativamente bajos.
“La mayor parte de la metanfetamina disponible en Estados Unidos se produce clandestinamente en México y se contrabandea a través de la frontera sur. Las muertes por envenenamiento con metanfetamina siguen aumentando”.