PAN: desbandada, rebeldes y consulta

Además de las renuncias de Margarita Zavala y el senador José Luis Luege Tamargo, Acción Nacional se enfrenta a una guerra interna declarada contra su dirigente, Ricardo Anaya, y a la ‘rebeldía’ de algunos exgobernadores panistas por apoyar las que podrían ser las primeras salidas de sus militantes
Rubén Zermeño Rubén Zermeño Publicado el
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El PAN se desmorona como polvorón, se encuentra en crisis rumbo al 2018, no es solo la salida de Margarita Zavala del partido lo que ha debilitado a Acción Nacional, al interior del horno blanquiazul hay quienes directamente ya le declararon la guerra a Ricardo Anaya y otros que comienzan la retirada.

El pasado sábado 7 de octubre Margarita anunció su salida del partido. Atrás quedaron 33 años de militancia e ideales, pudieron más las ganas de intentar una vez más llegar a la Presidencia, ahora como candidata independiente.

“Me voy sin rencor. Aquí crecí y aquí he pasado la mayor parte de mi vida. Me llevo al PAN en mi corazón y siempre seré panista (…). Durante dos años pedí un método democrático, transparente y claro que se escuchara a los ciudadanos para tomar una decisión, pedí reglas, lo pedí en público y en privado (…) la respuesta siempre fue evasiva”, reclamó en un video Zavala, acusando a Anaya de entregar las decisión de elegir al candidato presidencial a otros (al Frente Ciudadano).

La respuesta del rostro del partido, Ricardo Anaya, fue clara y directa “estoy convencido de que es una decisión equivocada, su salida solo beneficia al PRI”, reviró el Presidente Nacional del PAN.

Zavala y sus aliados acusan a Ricardo Anaya de tomar decisiones unilaterales y en beneficio propio desde la dirigencia nacional, pero poco se acuerdan que desde las filas calderonistas se fraguó la presidencia de Germán Martínez.

Lo mismo ocurrió con su sucesor, César Nava Vázquez, en su designación hubo fractura y guerra ya que un grupo de panistas acusaron a Felipe Calderón de pretender imponer al sustituto de Martínez.

“Estamos en un momento crítico donde, a mi juicio, el partido ha perdido su identidad y se ha alejado de los principios fundamentales. Ricardo Anaya se ha convertido en el López Obrador del PAN”
José Luis Luege TamargoSenador

Desbandada a pasos lentos

A Margarita Zavala muchos la apoyan, pero eso se queda de dientes para afuera, solamente el senador José Luis Luege Tamargo ha renunciado a las filas del Partido Acción Nacional.

El extitular de Conagua en el sexenio de Felipe Calderón salió por motivos similares a los de Margarita, le cerraron la puerta, a él para contender por la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México.

Ayer Luege entregó su carta de renuncia en la sede de Acción Nacional y antes de irse criticó a Ricardo Anaya.

“Estamos en un momento crítico donde, a mi juicio, el partido ha perdido su identidad y se ha alejado de los principios fundamentales. Ricardo Anaya se ha convertido en el López Obrador del PAN”, opinó Luege.

Aunque siguen siendo militantes del blanquiazul, cinco exgobernadores mandaron el domingo pasado una carta de respaldo a Zavala y aplaudieron su salida de las filas del PAN.

“Comprendemos sus razones y motivos para emprender esta nueva etapa de su vida pública, acompañamos su decisión y nos solidarizamos con ella. Es una mujer valiente que ha decidido no someterse ni doblegarse, sino hacer historia y dar testimonio de coherencia y determinación. Estamos convencidos de que con su liderazgo podemos construir el México que queremos para nuestras familias”, decía la carta firmada por Fernando Canales, Alberto Cárdenas, Alejandro González, Emilio González y José Guadalupe Osuna.

De los actuales 12 gobernadores que tiene el PAN, solamente tres manifestaron su apoyo y preocupación por la salida de Zavala, se trata del queretano Francisco Domínguez; el gobernador de Baja California, Carlos Mendoza Davis y el de Aguascalientes, Martín Orozco.

Desobedientes con militancia

Cinco senadores panistas que apoyan a Zavala luchan contra Anaya pero rechazan renunciar a la militancia. Los “rebeldes” se quedan en el PAN para rescatar al partido de Anaya. “No te librarás de nosotros”, le advirtieron.

Esta rebelión surgió luego de la polémica en torno al nombramiento de Ernesto Cordero como presidente de la Mesa Directiva del Senado, cuando la mayoría de panistas afines a Anaya no querían su designación por considerar que apoyaría al gobierno y al PRI a la hora de imponer a un fiscal general a modo.

Ernesto Cordero, manifestó públicamente sus intenciones de votar por Margarita Zavala y dijo que no tenía miedo de que lo expulsaran del PAN ya que no violaba ningún estatuto del partido.

Rafael Moreno Valle, otro de los aspirantes a la Presidencia de la República y quien junto a Zavala abogaba por una consulta pública como método de elección del candidato que representaría al Frente Ciudadano en 2018 lamentó la salida de la expanista.

“Respeto la decisión, pero no podemos hacer que no pasó nada. Hay que reconocer que las cosas van caminando de forma equivocada. Margarita Zavala no le va a quitar votos a Morena, no le va a quitar votos al PRI; le va a quitar votos al PAN”, aseguró.

El poder por el poder

Carlos Salazar

El senador panista Ernesto Ruffo Appel asegura que gran parte de la crisis que atraviesa el PAN tiene su origen en la multiplicación de los grupos que han ido escalando posiciones dentro del partido y de la administración pública por un beneficio personal.

El exgobernador de Baja California está convencido de que en los últimos años, a raíz del crecimiento del PAN y con ello la apertura de mayores espacios y oportunidades, ha llegado mucha gente al partido, algunos con interés genuino de colaborar pero otros con meros intereses particulares.

“Hemos aprendido que el poder político trae interesados y que actúan en contra de los que procesan convicciones. La institución es lo que vale, debe de ser siempre respetada y fortalecida”, afirma.

Dentro de estos grupos de interés estarían los ‘calderonistas’ asegura Ernesto Ruffo, ya que, si bien sus principales liderazgos cuentan con una trayectoria amplia dentro del PAN, se habrían dejado corromper por el poder, lo que incluso los habría llevado a aliarse con el PRI.

Desde su perspectiva, a pesar de la salida de Margarita Zavala aún hay personajes como Rafael Moreno Valle o el senador Javier Lozano, que influyen en las decisiones del partido sin ser en realidad panistas.

“Me siento aliviado por la salida de Margarita Zavala porque en todo esto por fin el PAN se está liberando de una situación en la que la élite del PAN siempre estaba tratando de manipular”, señala.

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