País de vicios

La adicción al alcohol, al tabaco y a otras drogas es uno de los principales problemas de salud pública en el país que significa un alto gasto para resarcir sus consecuencias, además de que la población comienza a consumir estas sustancias cada vez más joven
Ernesto Santillán Ernesto Santillán Publicado el
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En medio del debate nacional que actualmente existe en México sobre la legalización de la mariguana, se están dando una serie de problemas que afectan gravemente la salud de la ciudadanía y las finanzas del sector salud tanto por el consumo de tabaco y alcohol como por el de drogas ilegales.

De acuerdo con la última Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco realizada por la Secretaría de Salud Federal (Encodat 2016-2017), el uso de este tipo de sustancias en los últimos años se ha ubicado en el contexto nacional como uno de los problemas de salud pública de mayor relevancia debido a las consecuencias sanitarias y sociales que experimentan quienes las consumen.

México tiene una población de 85.2 millones de habitantes de entre 13 y 65 años, de los cuales 14.9 millones son fumadores de tabaco. De éstos, 5.4 millones fuman diariamente un promedio de 7.4 cigarros; mientras que9.4 millones lo hacen de forma ocasional.

La encuesta también muestra un dato revelador: el 98.4 por ciento de las personas que fuman tabaco están conscientes de las graves enfermedades que este hábito provoca, sin embargo, la fuerte adicción que genera hace muy difícil para los consumidores dejarlo aunque lo deseen

El indicador que mejor demuestra la dependencia que genera la nicotina en las personas es el tiempo promedio que un fumador tarda en encender su primer cigarro del día después de despertar.

En México, más de 1.8 millones de consumidores de tabaco de entre 12 y 65 años fuman su primer cigarro del día dentro de los primeros 30 minutos después de levantarse, señala la encuesta.

Además, el porcentaje de personas que fracasan al intentar dejar de fumar también es muy elevado. Según la Encodat, más de la mitad de las personas que fuman han intentado dejarlo, sin embargo, sólo un 15 por ciento lo logró en el último año.

14.9
millones de mexicanos de entre 13 y 65 años fuman tabaco

En un intento por reducir el consumo de este producto entre la población, el gobierno mexicano ha aumentado los impuestos que se imponen a los cigarros, estrategia que aparentemente ha fracasado, pues tan sólo en 2017, por cada una de las 2 mil 451 millones de cajetillas de cigarros que se vendieron en México, el Estado cobró 16 pesos de impuestos.

Una cantidad 78 por ciento mayor a lo que se cobraba en 2007, cuando el impuesto recaudado era de 9 pesos.

El tabaquismo provoca entre 25 mil y 60 mil muertes cada año y está relacionado con más de 200 enfermedades distintas, lo que genera un derroche multimillonario en atención médica por parte de los servicios gubernamentales de salud.

El gasto público se calculó en 81 mil 132 millones de pesos, lo que representa el 2.8 por ciento de los ingresos tributarios y el 58.3 por ciento de los ingresos percibidos por el cobro del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) no petrolero.

La droga más consumida

Sin importar su estatus de ilegal, la mariguana se ha convertido en los últimos años en la droga más consumida entre los mexicanos, incluso creciendo en popularidad entre la ciudadanía de manera exponencial.

Más de 7 millones de personas que habitan en el país, según el documento Encodat 2016-2017, aseguran que la han probado al menos una vez, porcentaje que se duplicó entre el 2011 y 2016, lo que hace a la mariguana la droga que más crece en el país.

+7
millones de personas dijeron fumar mariguana en México entre el 2016 y el 2017

En los últimos 12 meses, los consumidores que la usaron pasaron del 1.2 por ciento al 2.1 por ciento en cinco años, colocándola muy por encima del consumo de otras drogas como la cocaína, la cual es la segunda más usada por los mexicanos y ha sido probada al menos una vez por el 3.3 por ciento de la población adulta en el país; los inhalables por un 1.1 por ciento; los alucinógenos por un .7 por ciento y otros tipos de anfetaminas por un .9 por ciento de los mexicanos.

Sin embargo el verdadero problema se encuentra entre la población menor de edad, sector donde el uso de la cannabis se ha multiplicado, pues un 5.3 por ciento de los jóvenes entre 12 y 17 años la han probado, mientras que en 2011 solo un 2.4 por ciento lo había hecho.

La mariguana se ha convertido en la droga ilegal más consumida por los jóvenes mexicanos, entre el 2011 y el 2017 el número de usuarios de esta planta se duplicó, según la Encodat

Si las cifras relacionadas con el consumo de drogas se compara con los datos del 2002, el número de adolescentes que han probado cualquier droga por primera vez se ha multiplicado por más de cuatro al día de hoy.

Alcohol, aceptado pero peligroso

La droga legal con mayor aceptación entre la población podría ser el alcohol y es en esa característica donde está su alto grado de peligrosidad.

Tal como lo señala la Organización Mundial de la Salud (OMS), en la actualidad el consumo de esta sustancia es considerado como un vehículo para la integración en diversos grupos sociales.

Sin embargo, el alcohol también es visto por algunas organizaciones como la droga legal de inicio, es decir, la que da pie a que después se consuman otras sustancias ya sea legales o ilegales.

Cifras de la OMS señalan que cada año mueren 3.3 millones de personas debido al consumo nocivo de alcohol, representando el 5.9 por ciento de todas las defunciones reportadas y siendo un factor causal en cientos de enfermedades y otros trastornos, situación que afecta gravemente a México, pues el país ha sido colocado por la misma organización internacional en la quinta posición en el consumo de bebidas alcohólicas al considerar países de América del Norte y América Central.

Por su parte, la última Encodat dio a conocer que un 28 por ciento de los mexicanos admite que su consumo de alcohol ha sido excesivo en el último año y que la mayoría de los mexicanos y las mexicanas empezó a tomar antes de los 17 años.

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