El gobierno de Nuevo León ordenó el cierre total de diversos comercios y plazas comerciales, así como la prohibición de vender bebidas alcohólicas los fines de semana, tras el incremento de contagios por COVID-19 en el estado.
Los establecimientos que deberán permanecer cerrados son los comerciales, zapaterías, mueblerías, tiendas departamentales, tiendas de ropa, mercados rodantes, centros religiosos y de cultos, supermercados, plazas y parques púbicos.
También deberán cerrar todos los espacios de entretenimiento y bienestar: gimnasios, clubes deportivos, spas, salas de tatuaje museos, teatros, casinos, cines, autocinemas, circos, exposiciones, congresos, ferreterías, salones de eventos y ligas deportivas, entre otros.
Te compartimos las nuevas medidas que estarán vigentes del 5 al 21 de diciembre. De todas y todos nosotros depende que estas no se prolonguen, por lo que debemos redoblar esfuerzos para poder volver lo más pronto posible a la normalidad.#Covid19 pic.twitter.com/5y7OiIywW3
— Secretaría de Salud de Nuevo León (@NlSalud) December 4, 2020
Los anteriores establecimientos sólo podrán abrir entre semana, con horarios y medidas de capacidad autorizados.
En tanto, las tiendas de conveniencia y depósitos no podrán vender bebidas alcohólicas durante los próximos tres fines de semana.
Los mitines y eventos pre electorales sólo podrán realizarse entre semana y con un máximo de 20 personas.
Las medidas inician este fin de semana y concluye el lunes 21 de diciembre a las 5:00 horas, siempre y cuando disminuya los contagios en el estado.
Estos negocios sí podrán abrir los fines de semana
Los restaurantes sí podrán vender comida, pero sólo a domicilio y los salones de eventos abrirán si es que tienen eventos programados con anterioridad.
Farmacias, boticas y droguerías que solo venden medicinas, servicios médicos y funerarios, tiendas de conveniencia y abarrotes, servicios de seguridad privada, gasolineras, talleres de reparación de vehículos y bancos sí podrán operar los fines de semana.
Este jueves, el estado registró más de 800 nuevos casos y 35 fallecimientos por el virus. El promedio de casos nuevos pasó de 673 a 694, mientras que el de casos positivos escaló de 57 a 60 por ciento y el de fallecimientos de 29 a 34 por ciento.
El número de neumonías pasó a riesgo máximo, al aumentar de 46 a 51 por ciento. La ocupación de camas y terapia intensiva continúan en riesgo alto.
“Tenemos un sector importante de la población que ha ignorado las precauciones que se deben ejercer. Esta situación hoy nos obliga a aplicar medidas tendientes a disminuir la tasa de contagios”, manifestó el secretario de Economía y Trabajo, Roberto Russildi Montellano.