Oportunidad para dignificar a profesionales de la salud
El Covid-19 ha evidenciado la precariedad en la que trabajan los profesionales de la salud, por lo que una vez que concluya la pandemia se deben de impulsar acciones para mejorar sus condiciones laborales, una situación que se prevé difícil por la crisis económica que se avecina
Laura IslasLa pandemia del coronavirus puede ser una oportunidad para finalmente dignificar el trabajo de los profesionales de la salud en México.
Hasta ahora ha visibilizado más que nunca la precaria situación en la que opera el personal médico de todo el país.
Pero más allá del desabasto de medicinas y equipamiento, un problema que no es nuevo, pero es el más conocido, hay otros temas que urgen ser atendidos, como sus derechos laborales.
Por lo que una vez que termine la crisis que ha provocado el Covid-19 se deben de impulsar acciones para mejorar las circunstancias en las que trabajan los profesionales de la salud.
El informe “Las remuneraciones del personal de la salud en México: entre el amor al arte y los esfuerzos débilmente recompensados”, del Instituto Belisario Domínguez del Senado de la República, menciona al menos tres puntos que se deben de priorizar.
La aprobación de la reforma en materia de derechos laborales de los médicos residentes, acelerar la contratación y basificación del personal médico que comenzó la administración actual, y reforzar los incentivos económicos para los médicos, médicas, enfermeras y enfermeros que prestan sus servicios en las zonas marginadas del territorio nacional.
De acuerdo con el documento, en el Marco del Plan Nacional de Salud 2019-2024 se contempla la basificación de 87 mil trabajadores del sector salud que no tenían contrato.
“Tan solo en este 2020 se tiene previsto basificar a 17 mil 274 empleados, entre los que destacan: 2 mil 593 médicos; mil 356 enfermeras; 841 paramédicos y 799 administrativos”, señala el informe de la Cámara alta.
Además, en septiembre de 2019 se anunciaron mejoras salariales del 10, 15 y 20 por ciento para el personal médico adscrito en las zonas marginadas del país.
Mientras que el 20 de abril de 2019, en el Senado de la República, se aprobó una reforma a la Ley General de Salud con el fin de fortalecer los derechos laborales de los médicos residentes, la cual quedó pendiente en la Cámara de Diputados.
La otra epidemia para los profesionales de la salud
Al mismo tiempo que los médicos combaten al virus SARS-CoV-2, también enfrentan una epidemia mayor: las malas condiciones laborales.
El diputado Éctor Jaime Ramírez Barba, secretario de la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, explica que se deben mejorar los salarios y las prestaciones del personal de salud, sobre todo de quienes prestan sus servicios en zonas marginadas.
Explica que los médicos que realizan su servicio social como parte de sus años curriculares tienen horarios de tiempo completo que van de lunes a sábado, por los que reciben alrededor de 3 mil 500 pesos quincenales.
“Las coberturas que tienen de seguridad social no son las óptimas, es decir, al no tener seguridad social, trabajo, seguro de vida, etcétera, están en condiciones muy precarias. Estamos hablando de todos los médicos que salen de una generación de este país, enfermeras, odontólogos”, dice.
El legislador panista menciona que un reto es que a nivel salarial, en las diferentes categorías y ramas, se requiere de un ingreso diferente.
Lo cual se evidenció cuando a los médicos residentes se les retiró un bono de casi 4 mil pesos en esta administración, el cual se les devolvió luego de que salieran a las calles a manifestarse, pues era una gran parte de su salario.
Ramírez Barba señala que se deben de homologar los sueldos en las diferentes instituciones de salud, ya que existe una disparidad en los salarios del personal médico que trabaja en las instituciones de salud pública como el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) y las secretarías de la Defensa Nacional y la Marina.
Otra de las mejoras que deben de realizarse es en el desempeño de la planeación para formar especialistas, ya que la pandemia del coronavirus hace notar la falta de personal como neumólogos, infectólogos, internistas e intensivistas.
Por ejemplo, hay un exceso de pediatras y un déficit de geriatras.
Sobre la reforma a Ley General de Salud con el fin de fortalecer los derechos laborales de los médicos residentes, menciona que era una simulación, por lo que no fue aprobada en ésta última instancia.
Pese a la urgencia por dignificar las condiciones de los profesionales de la salud, —que no solo incluye a médicos o residentes, también a especialidades en enfermería, químicos, nutriólogos, psicólogos, entre otros— el diputado ve un panorama adverso.
“A este país le va a costar mucho trabajo en los próximos años salir de esta pandemia y no me refiero al tema de salud, sino al de la economía.
“Realmente esta caída del Producto Interno Bruto le va a llevar muchos años recuperarla y no solo para los profesionales de la salud, sino para los medios de comunicación, el turismo, las Pymes; nos va a conducir a que millones de personas caigan en la pobreza extrema”, advierte.