El empresario mexicano Carlos Chavarría asesora a bancos y otras empresas en procesos democráticos y ofrece ceder su tecnología para abaratar procesos como la revocación de mandato y otras votaciones, e incluso procesos federales.
De acuerdo con el especialista mexicano en identificaciones biométricas, esto es posible con la tecnología que hoy está desarrollada y que opera en nuestro país, ya que cada que vamos al banco los funcionarios verifican nuestra identidad.
“Nosotros hemos trabajado estos 17 años con bancos. Tenemos temas de multibiometría: voz, facial, dactilar y grafoscópico. Nosotros ya tenemos una integración, una conexión con el INE, para hacer una validación facial, por biometría facial, además también se conectan con el INE a través de dos terceros, que son los autorizados, para biometría dactilar”.
“Nosotros hemos propuesto en varias ocasiones el uso de multibiometría, si los primos o los hermanos gemelos en una biometría facial se puede llegar a parecer mucho, en la huella no, o en la voz no, o en la firma no”, explica Carlos Chavarría en entrevista.
La utilización de estos procesos combinados ofrece casi un 100 por ciento de seguridad en la identificación de las personas y es costeable. Una identificación a través del iris y con AND resultaría costosa para un proceso como una elección, considera el experto.
“Cuando tú haces una mezcla de por lo menos cuatro biometrías, que son las que nosotros proponemos: facial, dactilar, voz y grafoscopía. Es prácticamente imposible que una persona pueda coincidir con otra. Son biometrías confiables que no son tan caras, tan ostentosas”, explica.
Carlos Chavarría expone que en su compañía, denominada NA-AT Technologies (“NA-AT” significa conocimiento en lengua maya) hacen identificación de personas para procesos conocidos como “de alto nivel”, es decir, en los que implica el intercambio seguro de dinero entre personas.
“Esto ya se hace desde hace algunos años, lo único que yo hice viendo lo que estaba pasando en el contexto de México, dije, puedo hacer una versión modificada, una pequeña versión que tarde un minuto una persona en hacer un proceso de participación ciudadana utilizando los componentes que ya utilizamos con bancos, aseguradoras, casas de cambio”, expresa.
Elección federal por celular
En el futuro, los mexicanos podríamos votar por un Presidente de la República a través de nuestros teléfonos celulares en un proceso en el que a través de un solo artefacto podrían votar varias personas y sin riesgo de fraude.
Carlos Chavarría apuesta a la tecnología biométrica para garantizar el voto ciudadano de manera remota a través de tecnología de teléfonos celulares para la realización de consultas, votaciones, plebiscitos o revocación de mandato. Actualmente lo renta para la votación en empresas y otras actividades del ámbito privado.
“Hay una cosa que me gustaría recalcar, yo hasta hoy no he vendido nunca y no tengo ningún uso de negocio con el Gobierno, no ha sido nunca mi interés. Pueden investigar lo que quieran. Nunca le he vendido al Gobierno. Mi idea es ofrecer una plataforma porque me preocupa lo que está pasando en este país, y la verdad es que yo con el sector financiero donde trabajo estamos bien, es un apoyo auténtico, aunque se escucha difícil de creerlo”, considera.
El empresario descarta que se vaya a hacer uso ilícito de los datos personales, ya que existen candados y certificaciones que protegen la información de los ciudadanos.
“Lo descarto porque tengo certificación en ISO-27001 como empresa, pero los servidores donde la información está también están certificados y hay certificaciones de un montón de cosas, de niveles y de muchas cosas, y además esos servidores son auditados todo el tiempo y además están en México”, argumenta.
El especialista refiere que solamente requeriría que el Gobierno mexicano mantenga su marca en la presentación de los resultados, ya que aunque no persigue un fin económico sí quiere ver su logotipo en el ejercicio ciudadano que quedará en la historia del país. Asimismo, ofrece su tecnología para algún otro gobierno local que quiera realizar un ejercicio con la ciudadanía.
Costo accesible de votos con tecnología
Otra ventaja que ofrece este procedimiento es que el costo por cada voto se abarata.
“Hoy un voto tradicional cuesta 40 dólares. Con una plataforma como la nuestra, mexicana, porque los extranjeros cobran muchísimo más, le costaría al gobierno un dólar. Así de distante es el tema de la tecnología.
“Abrir una cuenta de banco en sucursal cuesta como 70 u 80 dólares a los bancos, que es algo similar a ir a votar, abrir una cuenta de banco a través de un dispositivo móvil o de una plataforma digital, como está, te cuesta entre dos o tres dólares. Así de diferente y así de radicalmente cambian los costos”, expone el experto.