OCDE, urgencias para México
El organismo internacional encabezado por el mexicano José Ángel Gurría ha entregado un documento a los candidatos presidenciables, con excepción de Andrés Manuel López Obrador, en el cual se incluye una serie de recomendaciones en distintos sectores para que sean incluidas en sus proyectos de gobierno
Imelda GarcíaBajar impuestos a empresas, pero aumentar el predial o el ambiental; eliminar o disminuir al máximo la exención del IVA a determinados productos, pero dar más subsidios a los más pobres; aumentar los ingresos fiscales y eliminar la informalidad.
Aplicar cabalmente el Sistema Nacional Anticorrupción; proteger a quienes denuncien delitos de corrupción; continuar respaldando la reforma educativa; activar el seguro de desempleo a nivel nacional; aumentar la pensión mínima para la vejez.
Estas son algunas de las recomendaciones que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico entregó a los candidatos presidenciales en México, con excepción de Andrés Manuel López Obrador, en busca de que las incorporen a sus programas de gobierno.
Luego de hacer un diagnóstico sobre la situación que vive el país y el impacto que han tenido las reformas impulsadas en este sexenio, la OCDE consideró que falta profundizar en algunos aspectos, como el combate a la corrupción o la disminución de la desigualdad.
El organismo internacional reúne a 35 países y su principal tarea es armonizar políticas públicas de los estados miembros para que tengan un mayor crecimiento económico. Actualmente es dirigida por el mexicano José Ángel Gurría, quien antes fue servidor público en gobiernos federales priistas.
A pesar de que varios países miembros tienen un índice menor de desarrollo que México, en temas como educación o corrupción el país está en el último lugar del listado.
Al pie de la letra
En este sexenio, el Gobierno federal ha prestado mucha atención a los dictados y políticas impulsadas desde la OCDE, el organismo ha apoyado a la administración del presidente Enrique Peña Nieto desde el inicio de su mandato para impulsar la aprobación de las reformas estructurales.
En la hechura de estas reformas, propuestas por el Ejecutivo y aprobadas por el Congreso de la Unión, se ve la mano del organismo encabezado por José Ángel Gurría.
Al igual que como ocurre ahora, en 2012 la OCDE buscó que Enrique Peña Nieto entonces candidato presidencial del PRI, hoy presidente de México, se comprometiera a seguir la lí- nea del organismo.
Fue así que se hizo la reforma educativa y se quitó poder al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE); incluso, Elba Esther Gordillo, su lideresa, fue encarcelada.
Lo mismo sucedió con la reforma laboral, la cual se aprobó por la recomendación de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico de flexibilizar el mercado de trabajo; siguieron las reformas en telecomunicaciones, en energía y otras.
Para este año, el panorama electoral es más complicado pues no se tiene claridad sobre quién podrá triunfar el 1 de julio. Ahora, Gurría entregó el documento “Getting it Right (Hacerlo bien), Prioridades Estratégicas para México” a cada uno de los aspirantes a Los Pinos.
Peticiones a los candidatos
José Ángel Gurría ha entregado a los candidatos presidenciales un documento en el que hace un análisis sobre la situación nacional y da una serie de recomendaciones sobre lo que el país debe hacer para mejorar su desarrollo en próximos años.
“México, un país que ha emprendido reformas ambiciosas en numerosos ámbitos, es un paladín de las reformas. Aunque comienzan a mostrar los primeros efectos positivos, los resultados de dichas reformas no han logrado estar a la altura de lo esperado”, se informa en el documento.
“Sería importante que el próximo gobierno consolidara los anteriores esfuerzos de reforma, asegurando la implementación plena y efectiva de los cambios ya legislados para posibilitar la continuidad reformista y emprender reformas adicionales en varios ámbitos prioritarios, incluidos el estado de derecho, la educación y la protección social”, destaca.
La primera recomendación es realizar una nueva reforma fiscal, pues es necesario que el Estado cuente con más recursos. Para ello, la OCDE propone algunas medidas específicas que debe contemplar, como obligar a que las empresas cumplan con sus obligaciones ante el IMSS o bajar los impuestos a las personas morales —sobre todo después de la reforma fiscal de Estados Unidos—. Eso sí, plantea que cualquier “pérdida” ocasionada por estas medidas debe ser compensada con otras.
En México, algunas actividades profesionales y productos alimenticios o medicinas están exentas del cobro del Impuesto al Valor Agregado. La OCDE recomienda también crecer la recaudación fiscal aumentando impuestos como el predial o los cobros ambientales.
Otros temas importantes
Otra de las urgencias que llama a resolver la OCDE es consolidar el Sistema Nacional Anticorrupción, pues se trata de mejorar la confianza en las instituciones públicas, por lo que pone atención en dos temas específicos: aplicar medidas de decomiso en los casos de cohecho, en los que el instrumento y el producto de la transacción corrupta deben ser confiscados y proteger a quienes denuncien los casos de corrupción.
El organismo recomienda a los candidatos también fomentar la construcción de ciudades más sustentables desde el punto de vista del “derecho a la ciudad” y evitar, como se hizo en el pasado, crear polos urbanos muy lejanos a los centros de trabajo.
El área laboral es otra en las que la OCDE pide que haya un cambio sustancial. El primero de ellos es la necesidad de que se instituya un seguro de desempleo en todo el país pues México es la única nación miembro que no cuenta con este mecanismo.
Otro reto del país en materia laboral es el bajo ingreso de los trabajadores. De acuerdo con el análisis hecho al país, una de cada 7 personas en edad de trabajar vive con menos de la mitad del ingreso familiar promedio; el promedio en los países de la OCDE es de una de cada 10 personas.
La informalidad; los bajos salarios; las pocas oportunidades para jóvenes, personas mayores y personas poco calificadas, pegan no solo en la cantidad de las contribuciones en impuestos, sino en esquemas de futuro como las pensiones, lo que llevará a una crisis entre los adultos mayores del futuro.
La OCDE también llama la atención sobre la necesidad de que México mejore sus esfuerzos en cuando a equidad de género, así como una mayor inversión en salud y que se permita más participación a empresas extranjeras en la construcción de obra pública y adquisiciones de gobierno.