Como si no les faltaran conflictos, una nueva batalla asoma en el horizonte del Poder Legislativo local: la Presidencia del Congreso, “heredada” del panista Mauro Guerra al priista Ricardo Canavati, es reclamada por los diputados de Movimiento Ciudadano, pues afirman que la oposición la retuvo de forma irregular.
El conflicto comenzó el día de ayer con la renuncia de Guerra Villarreal a la titularidad de la Mesa Directiva, argumentando que no sería “propicio” ejercer el cargo al estar en plena campaña por la reelección de su distrito.
#RedesDePoderMTY | Mauro Guerra, quien busca la reelección en el distrito 9 con sede en San Nicolás, renunció a su cargo de presidente de la Mesa Directiva del Congreso local, según dijo, para que no se preste a malas interpretaciones.https://t.co/eW1JAXa00R
— Reporte Índigo (@Reporte_Indigo) April 9, 2024
“Esto es para que no se preste a acusaciones de un uso indebido de lo que representa el Poder Legislativo (…) Yo me hago a un lado, la Mesa Directiva sigue trabajando con el aval de todos los diputados que sí quieren trabajar y aquí seguiremos, no tomaré licencia”, afirmó Guerra, en clara referencia a la protesta que desde el pasado 7 de febrero ejercen los diputados emecistas, que se niegan a participar en sesiones del Pleno mientras no se le tome protesta a Rosaura Guerra, suplente de Alhinna Vargas.
La renuncia de Mauro Guerra fue aprobada por los 24 diputados presentes en el Pleno, todos del PRI y el PAN, mismos que también avalaron el nombramiento de Ricardo Canavati.
Emecistas aseguran que Guerra fue ‘presidente espurio’
La bancada de Movimiento Ciudadano no tardó en reaccionar al enroque opositor, acusando al panista de querer “escaparse” de tomarle protesta a Rosaura Guerra, lo que confirmaría a la bancada emecista como la de mayor presencia en el Congreso.
De la misma forma, Eduardo Gaona, coordinador del grupo parlamentario naranja, aseguró que, de acuerdo con los estatutos vigentes del Legislativo, la presidencia del Congreso no debió ser entregada a Canavati, sino que tuvo que pasar por la Comisión de Coordinación de Régimen Interno (Cocri).
“Mauro Guerra avienta el arpa aquí en el Congreso por el miedo que tiene a que la justicia lo alcance, y eso hay que señalarlo (…) La presidencia de este Congreso, desde un principio lo señalamos, le corresponde a Movimiento Ciudadano, por eso decimos que es una presidencia espuria, es una presidencia que nunca debió haberse dado”, señaló el emecista.
En agosto de 2023, diputados de Movimiento Ciudadano y Morena ya habían reclamado que la presidencia del Legislativo se mantuviera en manos del PRI y el PAN, toda vez que se nombró al panista Mauro Guerra como titular luego de dos periodos presididos por la priísta Ivonne Álvarez.
