Niños, niñas y adultos salieron a las calles de la ciudad de Monterrey y de otros municipios para gritar “Noche de brujas, Halloween”, pero no solo las personas pidieron dulces, también un oso negro que se unió a la tradición y llegó a una casa para “pedir” golosinas, sin embargo, no le dieron, pues no llevaba su disfraz.
El inesperado momento fue captado en video por los propietarios de una vivienda, ubicada en la colonia Valle Alto, al sur de la capital de Nuevo León, quienes participaron en la festividad para entregar dulces a los menores de edad disfrazados que pidieran dulces.
En las imágenes se observa que las personas se prepararon con una mesa donde colocaron los dulces para entregarlos a los pequeños que entusiasmados llegaron disfrazados de su personaje favorito de las películas de superhéroes, princesas y otros.
Pero mientras esperaban a que llegaran más niños, se apareció un oso de gran tamaño como si estuviera pidiendo golosinas casa por casa, incluso se acercó a la mesa, la cual olfateó ante el olor que desprendían los dulces, sin embargo, por fortuna no tomó ninguno.
En un ambiente silencioso y tranquilo, el ejemplar caminó por la banqueta sin mayor prisa y después de quedarse por varios segundos detenido cerca de la mesa de dulces, se retiró sin realizar mayor desmán, como ha ocurrido en otros avistamientos.
El video concluye cuando el animal se interna en el cerro, que forma parte de la Estanzuela.
Otros avistamientos
Una sorpresiva visita de un ejemplar a una vivienda de la colonia San Agustín, en el municipio de San Pedro Garza García, en donde intentó abrir un refrigerador que estaba instalado en una cochera.
#IndigoMTY | La visita de un enorme oso negro a una vivienda de la colonia San Agustín en el municipio de San Pedro Garza García, #NuevoLeón sorprendió porque el animal salvaje intentó hábilmente abrir un refrigerador que estaba en una cochera.https://t.co/afFNWPmAwS
— Reporte Índigo (@Reporte_Indigo) October 26, 2024
Un video muestra la gran destreza del oso al intentar abrir la puerta del electrodoméstico, sin importarle que a un costado el propietario colocó trampas armadas con clavos para evitar precisamente que los osos ingresaran a su casa.