Niños: derechos de papel

En México los derechos de los niños y las niñas están protegidos. Están incluidos en la Constitución Mexicana, en leyes federales y en tratados internacionales.

Pero en realidad la población infantil en el país es uno de los grupos más marginados y vulnerables, y para ellos los derechos básicos como el de la educación, seguridad y la alimentación no están garantizados.

En vísperas de la celebración que se realizará este domingo 30 de abril a los niños mexicanos, los derechos de niños, provocan un debate.

El retraso legal y cultural que existe en el país es notable. No hay avances y el Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA) -último gran esfuerzo institucional en esta materia- pues apenas está en proceso de conformación, a pesar de que la Ley federal lo ordenaba desde el 2014.

“Es reciente la creación del Sistema Nacional de Protección Integral de niñas, niños y adolescentes. Me parece que da un piso mínimo que todos debemos respetar…”, señala Mario Ernesto Pfeiffer, magistrado del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Hidalgo.

El SIPINNA, que debe de fungir como el organismo rector para la coordinación entre Federación, estados y municipios en la implementación de las políticas públicas para este sector de la población, fue incluido en el presupuesto recursos asignados para este mecanismo que encabeza Ricardo Bucio, apenas este año.

Mientras en los países europeos la cultura por la protección de los derechos infantiles surgió en 1945, después de la Segunda Guerra Mundial, en México se comenzó a hablar sobre este tema en 1990 con la firma de la Convención de los Derechos del Niño.

“Sabernos con capacidades y dignidad desde que nacemos es un reconocimiento que ha superado siglos de injusticia, sin embargo, son los cambios legales, políticos y culturales los que están costando mucho al resistimos a dotarlos de dignidad”, acepta la CNDH en su informe sobre la materia.

Niñez al desamparo

Actualmente México cuenta con una población aproximada de 40 millones de niños, niñas y adolescentes menores de 18 años.

Si en el tema de la pobreza, un informe de la UNICEF de 2014 destaca que la situación alcanzó a 21.4 millones de niñas, niños y adolescentes, de los cuales, 4.6 millones se encontraban en pobreza extrema.

En salud, de acuerdo -con el mismo estudio pero de 2013- la tasa de mortalidad en niños menores de 5 años fue de 15.7 por cada mil nacidos vivos, una cifra que arrojaba una reducción en relación con 2012, sin embargo, las regiones en extrema pobreza país mantuvieron la misma cifra elevada de mortandad.

Niños castigados

El Instituto Nacional de Salud Pública, a través de la Encuesta Nacional de Niños, Niñas y Mujeres 2015 revela la situación crítica por la que atraviesa la población infantil y adolescente en el país

>> 63%

De niños y niñas entre 1 y 14 años de edad han experimentado una agresión psicológica y castigo físico

>> 12%

De los niños y niñas entre los 5 y 17 años de edad revelaron que trabajan

>> 8%

De los menores que trabajan lo hacen en situaciones de peligro

>> 17%

De las mujeres entre los 15 y 19 años de edad han sido madres

>> 20%

De las niñas que viven en la zona rural han sido madres

¿Todos tenemos los mismos derechos?

Los números incluidos en la Encuesta Nacional de Niños, Niñas y Mujeres 2015 que presentó este año el Instituto Nacional de Salud Pública, revelan la situación crítica por la que atraviesa la población infantil y adolescente en el país.

Según la ENIM 2015, el 63 por ciento de niños y niñas entre 1 y 14 años de edad han experimentado una agresión psicológica y castigo físico.

El 12 por ciento de los niños y niñas entre los 5 y 17 años de edad entrevistados en la encuesta revelaron que realizan trabajo infantil y el 8 por ciento lo hacen en situaciones de peligro.

El 17 por ciento de las mujeres entre los 15 y 19 años de edad han sido madres y este porcentaje crece por encima del 20 por ciento entre las niñas que viven en la zona rural.

Al parecer, los niños y niñas no son una prioridad para los políticos mexicanos.

El desinterés oficial se refleja en el pobre trabajo de la Comisión de los Derechos de la Niñez de la Cámara de Diputados que en un año y medio apenas han aprobado 8 iniciativas.

O lo que es lo mismo: una iniciativa cada 75 días.

“No tenemos calidad de legislación en el país… Muchas de las iniciativas legales, se negocian en los grupos parlamentarios, es decir, pasa la mía pasa la tuya, sin importar el contenido sustancial y los segmentos a los cuales se encaminan. A algunos legisladores se les olvida que tienen hijos y por tanto que hay niños que viven en tragedia”, expone Daniel Márquez Gómez, doctor en la Facultad de filosofía y letras de la Universidad Autónoma de México (UNAM).

De acuerdo con Márquez Gómez, otro de los rezagos se debe a que como ciudadanos damos por satisfechas las necesidades básicas de la familia y pensamos que no requerimos hacer uso de nuestros derechos.

“El cuestionamiento y la crítica comienza aquí”, puntualiza.

Tener derechos como niño no garantiza que sean aplicados o que, en casos de abuso, los responsables sean castigados, detalla.

Poco y malo

Sólo ocho iniciativas han sido dictaminadas en los últimos dos años en la Cámara de Diputados. La Comisión de los Derechos de la Niñez, presidida por el perredista Jesús Valencia es de los órganos legislativos menos productivos de la Cámara baja.

Sólo 8 iniciativas han sido aprobadas de las 65 que le han sido turnadas del 2015 a la fecha. La mayoría resultan ser reformas sin importancia en el fondo. La declaración del Día Nacional contra el Abuso Sexual Infantil, incluir como derecho de los niños la paz e incluir la palabra Ciudad de México en lugar del Distrito Federal en las leyes infantiles, son parte de lo que los legisladores han avalado en los últimos meses.

La lista de iniciativas pendientes -que implican verdaderos pasos en la protección de los derechos de los niños- han quedado en la congeladora.

Temas como el derecho de los niños a la enseñanza y uso de lenguas extranjeras; la protección a los menores en situación de vulnerabilidad por haber nacido o vivir en algún centro penitenciario con su madre privada de la libertad y el derecho de los infantes de comunidades indígenas para acceder a una educación bilingüe e intercultural, por mencionar algunas.

El presidente de la Comisión de los Derechos de la Niñez, el diputado del PRD, Jesús Valencia Guzmán, es más conocido por sus escándalos que por su trabajo en la política infantil. Uno de los escándalos que más ha trascendido fue el accidente automovilístico que tuvo el 17 de diciembre de 2014, por el Bulevard de la Luz, en el Pedregal de San Ángel.

De acuerdo con sus diferentes versiones, el auto que iba manejando y que quedó destrozado era prestado, aunque también existió la versión de que era su camioneta y la estaba pagando.

Igual que la situación del auto, las versiones sobre el accidente también fueron diversas, entre el cansancio laboral y el medicamento combinado con alcohol que lo hizo perder el control, nunca se supo el verdadero origen del siniestro.

Las deficiencias del nuevo Sistema de Protección

La creación reciente del Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes, es el último gran esfuerzo en México que pretende convertirse en un mecanismo protector de los derechos de la infancia.

El SIPINNA está diseñado para coordinar entre la Federación, estados y municipios, la implementación de políticas públicas con perspectiva de los derechos humanos para la infancia y la adolescencia, su intención, canalizar la atención de leyes, normas y presupuesto a este sector de la población.

Dicho Sistema cuenta con un portal de internet que, a una semana de celebrada su primera sesión, continúa aparentemente en construcción.

Dentro de la página web del SIPINNA encontramos numeralia de la Encuesta Nacional de Niñas, Niños y Mujeres 2015 (ENIM), el Anteproyecto del Programa Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes sin aprobación y una Alianza Global para poner fin a la Violencia contra la Niñez que no contiene las acciones a realizar, entre otras.

Este hecho, marca la poca importancia que se da a temas como la infancia en México.

“Antes de calificar al Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas Niños y Adolescentes como un logro, habrá que preguntarnos si ya no hay niños golpeados, violados, niños en trabajando forzados o invisibles a la ley”, platica el doctor Daniel Márquez Gómez.

Falta de estadística: Su máxima vulnerabilidad

Existen diversos conteos que pretenden exhibir la falta de resultados como un nuevo reto. Las autoridades han construido el discurso de que hay que seguir trabajando en las debilidades y beneficios para los menores de edad, pero no existen bases de datos confiables para medir resultados en los temas relacionados a la niñez.

“Encuestas a modo, comisiones, leyes y organismos encargados de garantizar la seguridad de los niños que no son un cimiento fuerte de raíz para combatir los abusos, son una realidad”, comenta Daniel Márquez Gómez, doctor en Filosofía y Letras de la UNAM.

De acuerdo con un informe realizado por la UNICEF, en 2015 existieron 11 mil 667 casos de repatriación de niños mexicanos desde Estados Unidos, el 84 por ciento de ellos emprendieron el viaje solos.

Por otra parte, de acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL) y la UNICEF, en 2013 el 86.6 por ciento de los niños sufría por falta de acceso a la seguridad social; el 62.6 por ciento por acceso a los servicios básicos de la vivienda; 41.7 por ciento por calidad y espacios del hogar; y un 38 por ciento por el acceso a la alimentación.

Todas estas son situaciones reales que los legisladores no han decidido abordar, y que institutos como el INEGI no han a contabilizado con periodicidad y exactitud.

Los dobles olvidados

¿Qué sucede con la atención a niños con VIH? ¿Qué pasa con los niños de la calle que no conocen sus derechos y que carecen de una maduración intelectual? ¿En dónde entra la gran diversidad de culturas y lenguas indígenas?

Los resultados que proyecta el informe de 2015 realizado por la UNICEF, apoyado con la recabación de datos de la Encuesta Nacional de los Niños, Niñas y Mujeres en México (ENIM) refleja que las carencias aún son muchas y que el trabajo legislativo en el que llevamos siglos continúa igual.

Contratiempos ‘menores’

A continuación se mostrará parte de los problemas y las cifras más actualizadas que se encuentran registradas:

> La pobreza alcanzó a 21.4 millones de niñas, niños y adolescentes en 2014, de los cuales, 4.6 millones se encontraban en situación de pobreza extrema.

> 16.2 por ciento de los niños y niñas de 0 a 1 año carecían de acceso a servicios de salud en 2014.

> El 79.4 por ciento de los niños y niñas menores de un año contaron oportunamente con acta de nacimiento en 2015.

> En municipios rurales, sólo 1 de cada 4 niños y niñas es registrado antes de su primer año de vida.

>  En 2015 hubo 11 mil 667 eventos de repatriación de niños, niñas y adolescentes mexicanos desde EU, 84 por ciento de éstos emprendieron su viaje sin la compañía de un adulto.

> En 2013, 2.5 millones de niños y niñas trabajaban en México, de los cuales 25 por ciento lo hacían para ayudar económicamente en su casa o a su familia.

> En el mismo año, 981 mil 353 niños, niñas y adolescentes de entre 5 y 17 años realizaban únicamente tareas domésticas y, por ende, no asistían a la escuela.

> 36 de cada mil niños, niñas y adolescentes, de entre 10 y 17 años sufrieron algún tipo de agresión en 2012. Un 42.28 por ciento sucedieron en la vía pública.

Foco rojo de impacto

Los niños ahora no quieren ser policías, astronautas o bomberos, ellos quieren hacerse de justicia por las armas y ser capos del mundo del narco.

Esas son las conclusiones del informe “Infancia y conflicto armado en México” presentado por la Red por los Derechos de la Infancia de México (REDIM), en 2011.

Alrededor de 30 mil niños cooperan con la delincuencia organizada mexicana, ya sea en actividades como extorsión, tráfico de personas, piratería y narcotráfico, expresa el estudio de la REDIM.

Niños sicarios

Por Hidalgo Neira

Protección, pertenencia y problemas, son las tres principales circunstancias por las que actualmente los menores de edad buscan un resguardo en la opacidad, entre lo ilegal y la corrupción.

Esa, de acuerdo a la investigación “Violencia, niñez y crimen organizado” de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), es la manera en cómo el narcotráfico encuentra camino y da cobijo a estos niños que caen en sus redes criminales.

El estudio, realizad en 2015 por especialistas en el tema y dado a conocer en el Foro Interamericano de Sistemas Nacionales de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes celebrado en la ciudad de México el 26 de abril detalla que los niños del narco son reclutados principalmente en los estados por los que transita la droga para llegar a Estados Unidos.

Según el informe de la Secretaría de la Declaración de Ginebra sobre Violencia Armada y Desarrollo, “Carga Global de la Violencia Armada” del 2011, de 14 países más violentos del mundo, la mitad se encuentran en América.

Argentina, Bolivia, Chile, Costa Rica, Nicaragua, Perú y Uruguay tienen las tasas nacionales por debajo de 10 homicidios cada 100 mil habitantes.

Pero el Salvador y Honduras suben a 65 asesinados por cada 100 mil habitantes, además de que el grupo de edad más expuesto a esta violencia ronda entre los 15 y 29 años de edad.

Pero México no se queda atrás

Ocho ciudades en el país están catalogadas como las más violentas del mundo, de un total de 50 a nivel global, según el estudio del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal A.C., de México (CCSPJP) publicado este año.

Acapulco alcanza el segundo puesto con 918 homicidios por 810 mil habitantes.

Además, 250 mil armas intentaron pasar por México desde la Unión Americana entre el 2010 y 2012, de las que solo el 15 por ciento fueron interceptadas por autoridades, pero la cantidad efectiva del tráfico real es desconocida, según datos revelados en 2014 por la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos de Estados Unidos.