El proceso interno en Morena para definir a sus abanderados a las gubernaturas en juego para 2022, a punto de iniciar, vuelve a generar tensión en el partido guinda y entre quienes han levantado la mano para buscar una de las seis preciadas candidaturas.
A mediados de noviembre, Morena lanzará la convocatoria para seleccionar a sus representantes en Oaxaca, Hidalgo, Quintana Roo, Durango, Tamaulipas y Aguascalientes, situación que coincidió con la filtración del audio de Marko Cortés, dirigente del partido opositor Acción Nacional, en el que reconoce que, pese a gobernar tres de estas entidades, solo tienen posibilidad de ganar la última, “no hay más”.
El comentario del líder del PAN, instituto que junto a Movimiento Ciudadano son los únicos que han podido arrebatarle gubernaturas a Morena desde 2018, agrega una relevancia particular a los procesos internos que están por arrancar, para los cuales algunas figuras ya han comenzado campañas con la intención de posicionarse ante la opinión pública o de congraciarse con los dirigentes del partido.
De acuerdo con las mediciones publicadas por la agencia Massive Caller durante la primera semana de noviembre, el PAN lleva una ventaja de alrededor de 15 por ciento en Aguascalientes, pero sale perdiendo en todas las demás entidades que estarán en juego, particularmente en Tamaulipas y Quintana Roo, donde hoy gobierna, y que Morena aventaja por 25 por ciento en las preferencias.
De concretarse este panorama, Morena gobernaría un total de 21 estados para estas fechas el próximo año, 23 si se agregan Morelos y San Luis Potosí en manos de sus aliados, los partidos Encuentro Social y Verde Ecologista de México.
En tanto que el PAN se quedaría apenas con cuatro, habiendo retenido Aguascalientes y MC con dos. Mismo número que el PRI con Coahuila y el Estado de México, a renovarse un año después.
Para analizar esta situación, Reporte Índigo entrevistó a Marcos Fuentes del Foro Nacional de Militantes de Morena, quien confía en que el partido pueda llevarse las seis gubernaturas en 2022; no solo porque los dichos del dirigente panista podrían afectar la integración del frente opositor, sino porque espera que se haya aprendido de los errores cometidos en las pasadas elecciones para contar con una estructura partidista.
“Se debe construir una poderosa estructura electoral que no tuvimos. No tuvimos una estructura política con la cual intervenir, en realidad no funciona el Comité Ejecutivo Nacional, no tenemos comités en funciones en los estados y, por lo tanto, no tenemos estructura municipal. Es el momento ideal para reconstruir esa estructura y, con ello, avanzar para no solamente ganar gubernaturas, sino impulsar un cambio”.
Si bien Morena se llevó 11 gubernaturas el 6 de junio, Fuentes señala como “trágicas” las derrotas en Nuevo León y en las alcaldías de la Ciudad de México, además de destacar que perdieron un gran número de capitales importantes del país, lo cual atribuye también a que no se seleccionaron los perfiles adecuados ni se involucró a la militancia de base en los procesos.
“Pusimos figuras innombrables como nuestros candidatos con tal de no generar un problema interno y eso, en lugar de fortalecer y promover la unidad, no solamente generó división, sino que nos llevó a los resultados que hoy tenemos y que son trágicos.
“No es posible que la Ciudad de México y una gran cantidad de capitales de estados se hayan perdido por falta de una estructura organizativa y por no escuchar a la militancia”.
Fuentes insiste en que se debe cuidar el perfil de los candidatos para que sean afines a los principios del partido, así como abrir los procesos de selección a la militancia.
“Ponderando que ‘Morena es muy poderoso, hay una discusión muy fuerte al interior y con muchas expresiones que se debaten diaria y cotidianamente, algo que quedó demostrado en el Congreso Nacional anterior”.
Por su parte, Ricardo Tapia Basurto, profesor de la Facultad de la Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México y maestro en Gobierno por la misma institución, comenta a Reporte Índigo que, si bien no se puede discutir con el diagnóstico de Cortés sobre las posibilidades de su partido, la oposición puede aspirar a ser competitiva si busca hacer política desde lo local.
“Sobre ese primer punto no creo que pueda haber mayor discusión, sin embargo, no hay que perder de vista que las elecciones locales se construyen desde lo local. Un año antes de los pasados comicios, no se hubiera vaticinado el triunfo de Samuel García en Nuevo León, una elección tan cerrada por las alcaldías de la Ciudad de México o procesos como los de Guerrero o Campeche, donde los márgenes fueron mucho menores a los esperados”.