Con el objetivo de anticiparse a los impactos del cambio climático, crisis energética, hídrica, de salud y otros temas como las desigualdades y la seguridad, el municipio de Monterrey alista el Plan de Resiliencia Urbana a través de la firma de un convenio con el cual se dará la capacitación necesaria para crearlo.
Como primer paso, funcionarios municipales de Monterrey fueron capacitados en el tema por la Red Global de Ciudades Resilientes, misma que está integrada por 97 ciudades del mundo, a través del taller denominado “Fundamentos e Institucionalización de la Resiliencia Urbana”, donde también participaron empleados del Gobierno Estatal.
Surella Segú, Directora de la Oficina de Calor Extremo de Monterrey, dijo que el Plan de Resiliencia Urbana ayudará a cumplir el compromiso de bajar la temperatura global y de que el calor extremo impacte lo menos posible a las personas.
Para ello, agregó, ya se trabaja de la mano con Protección Civil y otras dependencias para transformar a la ciudad y hacerla más verde.
Además, durante el encuentro se profundizó en la importancia de institucionalizar la resiliencia urbana para preparar a las ciudades en un contexto de mucha complejidad.
Por su parte, Edgar Olaiz, Director del Instituto Municipal de Planeación Urbana y Convivencia de Monterrey (IMPLANC) sede de la Oficina de Resiliencia, dijo que el alcalde Luis Donaldo Colosio tiene mucho interés para que la ciudad cuente con este proyecto en beneficio del medio ambiente.
Mientras que, Luis Bonilla y Javier Garduño, representantes de la Red Global de Ciudades Resilientes, indicaron que para lograr el objetivo servirá tomar la experiencia de sus integrantes.
Buscan evitar depredación del Cerro de las Águilas
El municipio de Monterrey informó que continuará con las acciones legales y de supervisión necesarias para evitar la depredación del Cerro de las Águilas, ubicado en el sector de San Jerónimo, luego de detectarse una construcción ilegal en la zona.
Señaló que en la zona solo hay autorización para un proyecto de rasantes (desmonte), que consiste en trazo de calles, despalme y movimiento de tierras sobre las mismas; sin embargo, en las inspecciones se detectó que las labores corresponden a un proyecto ejecutivo de construcción que no cuenta con permiso.
Desde abril de 2022, la administración municipal ha aplicado clausuras y suspensiones de los trabajos que realizan particulares en un predio del Cerro de las Águilas, por lo que mantendrá la supervisión permanente de los trabajos y el seguimiento puntual de los cuatro juicios de amparo que los promotores de la construcción han presentado en respuesta a las gestiones municipales.