La casa Millon subastó este miércoles 120 piezas, de las cuales el 95 por ciento salieron del patrimonio artístico de México, pese a que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) presentó una denuncia contra los propietarios para obtener su restitución.
El embajador de México en Francia, Juan Manuel Gómez Robledo, junto con la directora general de Asuntos Culturales de la cancillería del país latinoamericano, Laura E. González, se presentaron un par de horas antes de la subasta para insistir en que el evento no se realizara.
Se planteó que la suspensión del remate era un primer paso para entablar un diálogo que llevara a la restitución de las piezas ‘a su legítimo propietario que no es otro que México‘, describió el embajador.
La puja por las piezas comenzó como estaba previsto esta tarde en París, y de acuerdo a la prensa francesa, Alexandre Millon, presidente de la casa de subastas, dijo que al parecer los reclamos diplomáticos y jurídicos mexicanos eran una forma de publicidad de medios.
Pero el embajador mexicano describió de manera puntual la serie de gestiones hechas por el gobierno que representa a fin de detener la venta, negociar y conseguir la reincorporación al patrimonio cultural mexicano 95 piezas que entraron este miércoles en remate y que fueron extraídas de su patrimonio histórico.
Además hubo tres reuniones con la cancillería francesa y el ministerio de Cultura, sin olvidar a la Organización de las Naciones Unidas para la Ciencia, Educación y Cultura (UNESCO), cuya dirección de Patrimonio Cultural envío cartas a la subastadora y al órgano regulador de estos comercio en Francia.
Las gestiones no han tenido resultado, lamentó Gómez Robledo, quien insistió en que las piezas deben de restituirse a su legítimo propietario “que no es otro que México”.
Autoridades desconocen cómo salieron las piezas de la subasta
En una nueva iniciativa del gobierno encaminada a defender en el extranjero lo que considera patrimonio nacional, México había solicitado la cancelación de la subasta que llevaría a cabo Millon.
“Rechazamos totalmente la venta de este patrimonio porque la propia venta, en sí misma, constituye un ilícito”, afirmó el martes María Villarreal, coordinadora de asuntos jurídicos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en una conferencia en Ciudad de México.
Las autoridades mexicanas dijeron que desconocen cuándo y cómo salieron las piezas que fueron subastadas ya que la mayoría de los objetos proceden de Teotihuacán, Guerrero y Oaxaca, y del sureste de México, región de la cultura olmeca y maya en el país.