Bajo el marco del Foro Regional Sobre Impunidad y Violencia Letal Contra las Mujeres, investigadoras de la sociedad civil presentaron una mesa sobre la Militarización de la seguridad pública y cómo afecta ésta en la vida cotidiana de las mujeres.
Juliana Miranda, socióloga del Centro de Estudios Legales y Sociales mencionó durante su ponencia que la militarización de México no es una excepción sino más bien una tendencia extendida en países latinos. “Desde el inicio del siglo XXI, se ha buscado que las fuerzas armadas sean re entrenadas para enfrentar fenómenos como amenazas a la soberanía como el narcotráfico o el terrorismo, el enemigo que todos los ciudadanos tendrían en común gracias al discurso oficial”.
De acuerdo con Juliana, tener un país militarizado trae consecuencias preocupantes como el hecho de reposicionar como actores políticos a los militares, los aumentos exponenciales a violaciones a derechos humanos, generar efectos institucionales de difusión de una cultura de violencia y autoritarismo donde las muertes de mujeres son un aspecto tradicionalmente oculto por la violencia institucional ya que casi no hay información sobre sus muertes y sus violencias especificas no lo ven como un problema.
“No producir información sobre esta violencia y sus víctimas es tolerancia y desinterés por conocer las características de estos problemas”.
Carolina Torreblanca, miembro de Datacivica e investigadora de la violencia que viven las mujeres vs la que padecen los hombres, aclaró que los homicidios de mujeres desde la militarización de la seguridad pública ha cambiado durante los últimos 19 años.
Torreblanca detalló que entre 2007 y 2017 la tasa de homicidios de mujeres se volvió 2.6 veces más grande mientras que la de hombres se triplicó.
La militarización ha afectado también a las mujeres, si bien casi 91% de víctimas son hombres ha habido una explosión de violencia contra las mujeres. Las mujeres desproporcionadamente mueren en vivienda -1 de cada 3, cuando aumenta la violencia en la calle es obvio que aumentan las muertes en vía publica, es como un contagio de violencia, mencionó la investigadora.
También detalló qué hay un tipo de violencia que se ejerce contra las mujeres que ha cambiado en su modo de operación, y es la que se vive dentro de los hogares. “En el año 2000 solo el 23.7% de los homicidios de mujeres en la vivienda se perpetraron con arma de fuego, para 2017 subió a 62.7%. Es decir, si antes la violencia se ejercía con armas blancas, asfixia o envenenamiento ahora se recurre a un arma de fuego para matar en casa”.
Lisa Sánchez de México Unido Contra la Delincuencia, afirmó durante su ponencia que quienes son criminalizadas de manera más injusta, quienes viven una mayor violencia simbólica, se les abandona en procesos penales y son mayormente sancionadas en un delito del Estado mexicano como las drogas son las mujeres porque se les considera el primer ejemplo de los hijos.
Si después de más de 10 años se demuestra al gobierno que debido a la estrategia de militarización no tienes menos violencia ni mejores policías pero si muchos muertos y desaparecidos es obvio que se tiene que cambiar, la vía civil es la contrapropuesta que nadie quiere ver.
En entrevista para Reporte Índigo, la diputada independiente Lucía Riojas explicó que se acaba de acordar en el Senado el paquete de cuatro leyes secundarias de la Guardia Nacional.
“Estaremos recibiendo en la Cámara de Diputados estas leyes para tener un periodo extraordinario parece ser que jueves y viernes para discutirlas. Tenemos que ser muy cuidadosos en el análisis de estas leyes y ver de que carecemos en materia de recomendaciones internacionales, escuchar a los expertos y defensores de derechos humanos para alzar la voz en tribuna sobre qué falta colocar las exigencias de la sociedad civil”.
Riojas sostuvo que al ser los jóvenes, tanto hombres como mujeres, el mayor número de víctimas en este entorno de violencia, se debe de considerar como una alerta en estas estrategias repetitivas respecto a los militares en la calle.
