El desacuerdo también se ha intensificado en los municipios de Aquila, Aguililla, Coalcomán, Buena Vista Tomatlán y Tepalcatepec, en donde ya hay manifestaciones sociales de repudio
Mientras el gobernador Fausto Vallejo dice que las fuerzas militares han llegado para entrenar policías, el secretario de Gobierno afirma que en los próximos días el Ejército podría tomar el control en otros municipios
Michoacán se ha puesta bajo la lupa de la atención nacional y el fantasma de la desaparición de poderes ronda en la entidad.
Sobre todo después del regreso de Fausto Vallejo Figueroa como gobernador del estado y cuando el Gobierno Federal ha tomado de facto el control de Michoacán.
Por lo pronto la federación ha asumido por su riesgo y cuenta la seguridad pública de varios municipios, la mayoría de ellos en la zona de Tierra Caliente, en donde se vive prácticamente un estado de guerra.
Mientras el gobernador Fausto Vallejo dice que las fuerzas militares han llegado solo para entrenar a sus policías y niega alguna intervención, el secretario de Gobierno afirma que en los próximos días el Ejército podría tomar el control de la seguridad pública en otros municipios.
Como parte del control del estado, también el gobierno federal ha asumido ya el aporte de fondos económicos para la ejecución de obras públicas del orden federal.
A la vez el gobierno no ha podido salir de la parálisis financiera en la que encuentra, a pesar de que ya fue autorizada –por parte del congreso local con apoyo de la federación– la reestructuración de la deuda pública.
Esto mantenía frenado, el plan de trabajo de la administración priista, según argumentos.
Fausto Vallejo Figueroa, visiblemente desmejorado de salud, mantiene una agenda ligera de trabajo.
No hay inversiones públicas en toda la entidad y los gobiernos municipales siguen reclamando participaciones estatales.
La ejecución de obras se limita a lo que permite la recaudación municipal o las participaciones federales que llegan en forma directa.
Además, la mayor parte de las carreteras de cuota que cruzan por el estado se encuentran bloqueadas, en algunos puntos por maestros que –faltando a clases– continúan en su movimiento de rechazo a la reforma educativa.
En otros puntos también en conflicto están los agricultores, que piden el establecimiento de un precio de garantía a sus cosechas.
En tanto, el gobierno del estado no es capaz de brindar el libre tránsito de sus ciudadanos ni el acceso a la educación de sus niños.
Las autoridades solo observan
En materia de seguridad el gobierno estatal se ha limitado a observar la confrontación que sostienen diversos grupos de civiles armados en varios municipios de la zona sur de la entidad, en donde al día de hoy se mantiene un estado de sitio.
En algunos puntos se encuentra bajo el control de las fuerzas federales de seguridad, pero en otras partes controlados por los llamados grupos de autodefensa.
Y como si lo anterior fuera poco, la iglesia católica ha decidido asumir un papel más participativo en cuanto a la denuncia de la inseguridad que prevalece en la entidad.
Fue el obispo de Apatzingán, Miguel Patiño Velázquez, quien ha hecho severos señalamiento en donde destaca el abandono de las funciones del gobierno de Michoacán para con sus ciudadanos.
Hoy, la versión más aproximada –porque no hay una postura oficial– indica que el obispo está amenazado de muerte y que se encuentra en resguardo dentro de las instalaciones militares de Apatzingán.
Esta situación ha causado molestia a las autoridades del Vaticano, que este mismo día han hecho un extrañamiento al Gobierno Federal por el riesgo en el que se encuentra el prelado michoacano.
El Obispo de Apatzingán no es el primero en alzar la voz en contra del clima de inseguridad que se mantiene en Michoacán.
Anteriormente el Obispo de Zamora, Javier Navarro Rodríguez, ya había denunciado también el clima de hostilidad. Las denuncias de los dos prelados han recibido el apoyo de la Conferencia del Episcopado Mexicano.
En una carta Obispos de México han declarado su solicitud a las autoridades federales, estatales y municipales “para que se lleve a cabo una acción pronta y eficaz ante la injusticia de los levantones, secuestros, asesinatos y cobro de cuotas que afectan al bien y la prosperidad de tantas personas y comunidades, y les pedimos estrategias para favorecer la calidad de vida de los ciudadanos y su desarrollo integral”.
El reclamo de los obispos, que abanderan la voz de miles de michoacanos, sean o no católicos, parece que tuvo eco en la federación, en donde se determinó aplicar una estrategia de acción, pasando por encima del pasivo gobierno estatal, a fin de retomar el control de la seguridad pública en los municipios considerados como “focos de violencia”.
El Ejército intranquiliza
Apenas las fuerzas federales se posicionaron en instalaciones estratégicas municipales y del puerto, comenzó un paro de actividades del transporte
La presencia del ejército no ha sido bien vista por diversos sectores sociales en el municipio de Lázaro Cárdenas.
Apenas las fuerzas federales se posicionaron en instalaciones estratégicas municipales y del puerto, comenzó un paro de actividades del transporte público de pasaje, afectando a miles de usuarios que no pudieron asistir a sus actividades diarias fuera de su domicilio.
Los permisionarios del transporte público en el puerto de Lázaro Cárdenas rechazan la presencia de los militares en funciones de policía municipal, por el temor a verse sometidos a actos de corrupción, o a ser criminalizados por decisión unilateral de algún mando que les toque encarar en cualquier calle de la ciudad.
La militarización en Michoacán, según la ha querido argumentar el gobernador Fausto Vallejo, es en función de una capacitación de las policías municipales por parte de los elementos militares.
El desacuerdo también se ha intensificado en los municipios de Aquila, Aguililla, Coalcomán, Buena Vista Tomatlán y Tepalcatepec, en donde ya hay manifestaciones sociales de repudio.
Este martes hubo diversos bloqueos a las carreteras que comunican la zona de Tierra Caliente con los municipios de la región Costa, en donde los militares se han hecho cargo de la seguridad pública.
La vía que registra un mayor número de bloqueos es la carretera que conecta a los municipios de Lázaro Cárdenas y Aquila. Allí se registran cuatro puntos de bloqueo.
También se han detectado bloqueos a lo largo de la carretera costera, que comunica con los poblados de Rio Cachán, Maruata y La Placita.
Allí no solamente se registran los bloqueos sino que también hay manifestaciones de repudio en contra de la presencia de los militares que tienen bajo su control la ciudad y el puerto de Lázaro Cárdenas.
En la zona de la costa también se han ubicado otros puntos en donde además de bloquear la circulación hay grupos de civiles armados repudiando la acción del Gobierno Federal, esto en los puntos conocidos como Tisupan y Caleta de Campos.
Este día el gobernador Fausto Vallejo se reunió en privado con los mandos militares que tomaron el control de la zona económica más importante del estado de Michoacán, al término de cuya reunión el gobernador salió convencido de que la presencia militar era con el único fin de darles capacitación a los mandos policiacos preventivos de esa localidad.
Contrasta la versión del secretario de gobierno, Jaime Mares Camarena, quien dijo que en los próximos días los elementos del ejército que se encuentran en Michoacán, podrían tomar el control de la seguridad publica en otros municipios, en donde no precisó de ningún tipo de capacitación para los policías preventivos.
La Crisis del Obispo Patiño
Durante la misa del pasado 3 de noviembre, en la catedral de Apatzingán, el obispo Miguel Patiño Velázquez habló de la población civil que estaba siendo tomada como rehén en el marco del clima de violencia que se vive en Michoacán.
En ese acto religioso público, el prelado invitó a los fieles a perder el miedo y alzar la voz para denunciar los actos de violencia de los que son víctimas los vecinos de la zona de Tierra Caliente. Habló de los “muertitos de Michoacán”.
Invitó, adentrado en la homilía de la palabra, a que todos los presentes hicieran digna la muerte de los “muertitos de Michoacán”, y convocó a que todos los presentes escribieran el nombre de una persona cercana que haya sido víctima de la violencia.
La invitación del obispo tuvo eco y antes de que terminara la misa se formó una cruz con cientos de papeles en donde se leían diversos nombres. El prelado habló de esos muertos como víctimas de la violencia que se vive en esa parte de Michoacán.
Uno de los encargados de derechos humanos de El Vaticano, el cardenal Karl Josef Becker, ha difundido públicamente, en base a las cifras recabadas por el obispo de Apatzingán, que el número de muertos en esa región, en lo que va del año ya llega a 920.
El obispo Miguel Patiño Velázquez llamó la atención de publica nacional desde el pasado 15 de octubre, cuando escribió una carta en donde denunciaba que la inseguridad que se vive en Michoacán obedecía a la complicidad de autoridades locales con la delincuencia.
Posteriormente el mismo obispo hizo una convocatoria para hacer una marcha por la paz en la zona de Apatzingán, a donde asistieron más de 3 mil personas que marcharon por las principales calles de esa ciudad exigiendo paz y tranquilidad.
Tras la publicación de la carta y la convocatoria a la marcha por la paz en el municipio de Apatzingán, según fuentes cercanas al obispo, fue que comenzó a recibir amenazas de muerte. Junto con el obispo también fueron amenazados otros sacerdotes de la zona.
Tras dar a conocer estas amenazas de muerte, el gobierno federal fue que asumió la responsabilidad de velar por la seguridad de los religiosos en la zona de Tierra Caliente, instrumentándose un operativo de seguridad que los mantiene bajo resguardo a la fecha.
Por parte del gobierno estatal no se sabe cuál es la condición actual del obispo de Apatzingán, ni se ha dado a conocer si se ha instrumentado un operativo de seguridad contra el resto de los miembros de la iglesia católica en la entidad.
Un estado en sitio
Por Roberta Carrillo
El estado natal del presidente Felipe Calderón vivía una guerra interna por la lucha entre cárteles. Así se han desarrollado los hechos desde el inicio de su gobierno, en 2006.
11 de diciembre 2006
Operativo Conjunto Michoacán
> A 10 días de ser presidente de la República, Felipe Calderón anuncia el Operativo Conjunto Michoacán como la primera etapa de la Guerra contra el Narcotráfico (después conocida como “Guerra contra las drogas”). Se habían contabilizado 500 muertes relacionadas con el narcotráfico.
14 junio 2006
Contra derechos humanos
> El entonces presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos denunció, a seis meses del inicio del Operativo, que había recibido por lo menos 53 quejas en contra de militares por violaciones a los derechos humanos de civiles.
13 de diciembre 2006
Ataque en plantío
> En Dos Aguas, Coalcomán, soldados mexicanos incursionan en un plantío de marihuana y son atacados por personas que cuidan la cosecha. Aseguran tres armas largas, tres cargadores, 50 cartuchos y detienen a un civil. Otro agresor murió mientras el tercero se dio a la fuga.
19 de abril 2009
El bautizo
> Cuarenta y cuatro miembros de La Familia Michoacana son detenidos durante un bautizo en Morelia, Michoacán.
Rafael Cedeño “El Cede”, lugarteniente y responsable de la expansión de La Familia hacia Guerrero, fue detenido.
26 de mayo 2009
El Michoacanazo
> Diez alcaldes de Michoacán y otros 20 funcionarios son detenidos por la Policía Federal como sospechosos de colaboración con la Familia Michoacana. Coordinado por Luisa María Calderón “Cocoa”, el operativo fue conocido como “El Michoacanazo”. No se demostró la culpa de los perredistas detenidos.
9 de diciembre 2010
Abaten a Nazario Moreno
> Nazario Moreno, líder del cártel de La Familia Michoacana, es abatido en un enfrentamiento que duró varios días con las fuerzas de seguridad.
11 de julio de 2009
Detienen a “La Minsa”
> El jefe operativo de La Familia Michoacana, Arnoldo Rueda Medina “La Minsa” es detenido, causando ataques contra la policía federal en Michoacán, Guanajuato y Guerrero. Al día siguiente se encontraron los cuerpos de 12 agentes federales que hacían tareas de inteligencia. En la emboscada mueren dos Policías Federales.
19 de Julio 2009
Infiltración entre policías
> Diez policías fueron arraigados en Arteaga, Michoacán, por el asesinato de los 12 policías encontrados una semana antes. Varios días después otras cuatro personas fueron detenidas por su probable participación en el mismo delito.
16 de julio 2009
Refuerzos federales
> El Gobierno Federal anuncia el envió de mil 500 efectivos de la Policía Federal, 2 mil 500 del Ejército y mil 500 de la Armada de México, a Michoacán. Instalan también 67 bases de operaciones móviles y 9 de operaciones mixtas con personal militar y de la Policía Federal, envían también tres helicópteros.
25 de noviembre 2010
Tregua navideña
> La Familia Michoacana anuncia una tregua que duraría todo el mes de diciembre, con el fin de demostrar a las autoridades, al Gobierno Federal y al pueblo michoacano, que son luchadores sociales y no culpables de actos violentos.
31 de diciembre 2010
“El bigotes”, detenido
> La tregua navideña se rompe el 31 de diciembre con la detención de Francisco López Villanueva ‘El Bigotes’, líder de La Familia Michoacana, cerca del puerto de Lázaro Cárdenas.
7 de julio 2011
Narcobloqueos violentos
> Organizaciones criminales instalan narcobloqueos en Apatzingán, Morelia, Nueva Italia, Úspero y Zinapécuaro. El saldo fueron cuatro miembros de los Caballeros Templarios muertos y tres agentes de la policía heridos.
10 de marzo 2011
Asesinan a mando
> Aparece el cuerpo sin vida de Jorge Hernández Espinoza, Director de Seguridad Pública del municipio de Tangamandapio, Michoacán.
3 de mayo 2011
Anarquía en Cherán
> Los comuneros de Cherán acusan a su alcalde de estar coludido en la sustracción ilegal de madera de la comunidad y lo desconocen. Colocan barricadas para defenderse de los ataques de los “talamontes”, quienes operan con el apoyo del narcotráfico.
10 de agosto 2012
Más bloqueos y enfrentamientos
> El municipio de Apatzingán sufre de narcobloqueos luego de una serie de fuertes operativos de la Policía Federal en contra del crimen organizado. Se registraron enfrentamientos en el poblado de Nueva Italia, y en la carretera Buena Vista-Tomatlán.
23 de julio 2013
Emboscada de Templarios
> Tras seis emboscadas contra la policía federal en el estado de Michoacán, 22 personas murieron, dos de ellos policías y los demás presuntos narcotraficantes del cártel de los Caballeros Templario.
4 de noviembre 2013
Segob anuncia operativo
> El Gobierno Federal anuncia el inicio de un nuevo Operativo Federal en Michoacán, ahora en el Puerto de Lázaro Cárdenas. La Secretaría de Marina incrementará el personal de operación para garantizar la seguridad en el puerto. La Procuraduría General de la República coadyuvará con las autoridades y recibirá e investigará denuncias.
Agricultores inconformes
Sumado al clima de caos que se vive en la zona de Tierra Caliente, los campesinos también se han sumado a las movilizaciones.
Al menos siete grupos distintos han tomado el control de varias casetas en la autopista de cuota de Occidente, que va de México a Guadalajara en el tramo que cruza por Michoacán.
La demanda de los productores rurales se centra en un precio de garantía para los productos agrícolas, principalmente sorgo.
Los productores agrícolas de la región del Bajío están reclamando la inmoral compra de sorgo en algunas empresas del Bajío, entre ellas el Grupo Dar, propiedad del secretario de gobierno Jaime Mares Camarena.
Las empresas acaparadoras de granos que se asientan en el Bajío –como ya es su práctica común– están empujando el precio de sorgo para llevarlo a la baja, pagando cantidades irrisorias a los productores, bajo el argumento de falta de pureza del grano.
El precio del kilo de sorgo se está aceptando entre los acaparadores del Bajío a razón de 2 pesos con 7 centavos por kilogramo, cuando el precio de referencia internacional, se ubica en 7 pesos por kilogramo.
Sobre el problema de los bloqueos carreteros por parte de los campesinos del Bajío Michoacano, no se ha hecho ninguna referencia por parte del gobierno estatal, en donde se ha pretendido presentar la toma de las casetas como una manifestación de los trabajadores de la educación que siguen su lucha para no aceptar la reforma educativa.
Obras de competencia federal
Las acciones con las que el gobernador Fausto Vallejo pretende callar las voces que reclaman inversiones para la infraestructura, son del orden federal, no hay obras al momento que tengan participación directa del estado.
La única obra que se ha dado a conocer y se luce como de inversión directa de la administración estatal de Michoacán, es el Centro de Rehabilitación Integral (CRI) Teletón, el cual se habrá de donar en forma íntegra en los próximos días a la Fundación Televisa.
Este día se anunció que el gobernador de Michoacán se reunió con más de 40 delegados federales en la entidad y los secretarios del gobierno estatal.
Esto con la finalidad de revisar el avance de los proyectos estratégicos para dar cumplimiento a los 15 compromisos del presidente de México, Enrique Peña Nieto, con Michoacán.
Las obras con las que el gobierno estatal pretende demostrar que hay un clima de trabajo y normalidad en Michoacán, son acciones que fueron compromisos del entonces candidato a la presidencia de la República, Enrique Peña Nieto. Aún son proyectos, pero ya se anuncian como un hecho.
Entre las obras prometidas está Modernizar la carretera Uruapan-Zamora, construir una planta de tratamiento de aguas residuales de Uruapan y recuperar los márgenes del Río Cupatitzio.
Se construirá el nuevo Hospital General de Michoacán, en sustitución del actual en el centro de Morelia, además del Hospital Regional de Apatzingán.
También se anunció la primera etapa de la carretera que conecte a Jiquilpan y Sahuayo con la autopista México-Guadalajara, modernizar y equipar el Hospital de Zitácuaro, construir la Autopista Zitácuaro – Valle de Bravo, esto además de otros planes aún no realizados.
