México acaba de experimentar el año más violento de las últimas dos décadas; por si esto no fuera suficiente, el país es el más impune de Latinoamérica y el cuarto a nivel mundial, además el porcentaje de delitos que no se resuelven se agravó en 26 de los 32 estados.
Según datos del Índice Global de Impunidad México 2018, elaborado por la Universidad de las Américas Puebla, el país tiene un índice de impunidad de 69.85 por ciento, lo que representa un incremento de 2.43 por ciento respecto a la última medición de 2016.
El estudio sugiere que estos altos niveles de impunidad se deben a que México sólo cuenta con 120 mil policías, la mitad de los elementos que necesita el país.
México también registra un déficit de fiscales en la indagación de delitos y tiene cuatro veces menos jueces que el resto del mundo; lo que convierte al país en terreno perfecto para la impunidad.
“Nuestro país vive un momento crítico, producto del profundo deterior en el desempeño de las instituciones de seguridad y justicia, donde el Estado mexicano es incapaz de garantizar a sus ciudadanos las condiciones mínimas de seguridad”, señaló durante la presentación del estudio, el rector Luis Ernesto Derbez.
Los datos muestran que el Estado de México en la entidad con el mayor de nivel de impunidad con 80.06 por ciento; de las más de 200 mil carpetas de investigación abiertas, sólo se registran poco más de 1200 sentencias en primera instancia.
Le siguen de cerca Tamaulipas (78.88%), Baja California (78.08%), Coahuila (77.88%), Quintana Roo (77.33 por ciento), Guerrero (76.08%), Aguascalientes (75.85%), Veracruz (75.62%), Puebla (75.59%) y Oaxaca (75.12%).
Las entidades con el menor grado de impunidad son Campeche con 45.06 por ciento y la Ciudad de México con 59.54 por ciento.
A nivel internacional, el país más impune es Filipinas con 75.6 por ciento, mientras que el menos impune fue Croacia con 36 por ciento.
