México, entre la ‘guerra fría’ y la Reforma Eléctrica
El conflicto entre Estados Unidos y China podría traer repercusiones comerciales positivas para México si el gobierno sabe aprovecharlo y se mantiene neutral entre ambas naciones, no obstante, la Reforma Eléctrica impulsada por Andrés Manuel López Obrador amenaza con desincentivar tanto a empresarios como a inversionistas de permanecer en el país
Julio RamírezEl conflicto económico entre el “Tío Sam” y el “Dragón Rojo” podría dejar dividendos a México si nuestro país sabe tomar ventaja de la situación y aprovecharla de manera comercial, pero preocupa la reforma eléctrica, coinciden analistas consultados por Reporte Índigo.
En este momento de conflicto internacional, el país que lidera el presidente Andrés Manuel López Obrador, tiene un buen escenario del cual debe saber sacar ventaja, apunta el maestro César Soto Morales, experto en temas de la región Asia-Pacífico.
“El presidente AMLO hace dos semanas que fue a Washington con Biden propuso que hiciéramos una mayor integración comercial en Norteamérica, dado que los productos asiáticos están tardando en llegar. Entonces, Andrés Manuel y Marcelo Ebrard le dieron a entender al presidente Biden que si China no les conviene para hacer comercio internacional, pues ahí está México. Además, estamos cerca y podemos aprovechar todas las cadenas de valor que se han creado en esta región para venderles productos que ellos necesitan”, asegura.
Preocupa reforma eléctrica
Un tema que tiene intranquilos a los empresarios mexicanos es la aprobación de una Reforma Eléctrica, de acuerdo con Sergio Díaz, socio director de Vestiga Consultores.
La Reforma Eléctrica viene como el principal problema para los empresarios y tomadores de decisiones, quienes perfilan que, en caso de ser aprobada, se complique su operación y se encarezcan sus servicio.
De acuerdo con Sergio Díaz, socio director de Vestiga Consultores, en la segunda mitad de 2021, lo más preocupante para el sector empresarial fue la posible regulación del sector eléctrico.
“En el segundo semestre del año lo que ha empeorado las expectativas y ha compensado negativamente el avance de la pandemia, es el tema de la inflación y lo que puede pasar con la Reforma Eléctrica. Sí sienten ellos, los empresarios, y es muy marcado, que se puede afectar la relación entre ellos y el Gobierno, y que puede generar una salida de inversión.
“El 67 por ciento de los empresarios sentían que iba haber un impacto negativo si se aprobaba la contrarreforma, pues consideraban que iba tener un impacto negativo. Mientras que el 72 por ciento dijo que esta reforma iba a empeorar las relaciones entre empresarios y la actual administración”, sentencia.
Según los críticos, esta medida es una vuelta al pasado que aleja la producción de energía de las fuentes renovables.
Además, desde Palacio Nacional se ha mostrado una embestida contra el sector empresarial, en específico contra la tienda Oxxo, a las que acusa de pagar menos en su recibo de energía eléctrica.
“Es evidente de que tienen una tarifa preferencial y que por eso se oponen a la Reforma Eléctrica, lo demás corresponde a las autoridades competentes, en este caso a los gobiernos municipales, a los gobiernos estatales. Esto es lo que puedo comentar. Y no es nada personal contra el señor (José Antonio) Fernández, es que tenemos que defender el interés público”, indicó el presidente el 24 de noviembre pasado durante la conferencia mañanera.
Ese mismo día, el titular del Ejecutivo, dijo que se tiene que mantener la participación del sector empresarial, pero sin que se abuse de ello para tomar beneficios del sector público.
“Esto no significa que no participe la iniciativa privada, claro que necesitamos de inversión privada, nacional, extranjera, pero necesitamos que se hagan negocios lícitos, no permitir la corrupción, los atracos, porque esto que expongo sobre el gas, por ejemplo, pues es un robo, no se le puede llamar de otra manera, es un abuso de quienes detentaban el poder, quienes tenían influencias.
“Entonces se requiere de la participación de empresarios y hay empresarios muy responsables, afortunadamente. Pero la regla es que se puedan hacer negocios con utilidades razonables, con ganancias razonables, no atracos, no 100, 200, 300 por ciento. No robo”, externó el primer mandatario del país.