Preparan terreno para dreamers

El Gobierno federal ya tomó el primer paso para recibir a los jóvenes que sean deportados de Estados Unidos o que decidan regresar a México por su propio pie.

Ayer, el Ejecutivo presentó una iniciativa preferente para facilitar la revalidación de estudios de los mexicanos que vuelvan al país, así como su acceso al sistema educativo nacional.

Ante las amenazas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, el presidente mexicano Enrique Peña Nieto decidió utilizar su facultad para que el Congreso de la Unión dictamine su iniciativa a más tardar en 30 días.

Entre 2007 y 2015 fueron repatriados 190 mil 981 menores de edad –entre los 0 y los 17 años de edad-, según cifras del Anuario de Migración y Remesas México 2016 realizado por el Consejo Nacional de Población y la Fundación BBVA Bancomer.

La mayor parte de ellos, alrededor del 80 por ciento, son adolescentes entre los 12 y los 17 años que cursaban en Estados Unidos la escuela secundaria o la preparatoria. Los llamados dreamers (soñadores).

Esto significa que se debieron abrir espacios en las escuelas públicas para ofrecerles la oportunidad de estudiar; aunque no siempre es sencillo.

Entre los requisitos que se solicitaban para revalidar estudios y poder ingresar a las escuelas del país, se solicitaba la apostilla de los documentos y la traducción por un perito certificado, lo que tenía un costo considerable.

Ahora, pronto será posible simplificar esos trámites y hacer una equivalencia automática de estudios.

Retorno voluntario

Durante la presidencia de Barack Obama, del 2008 a enero de este año, poco más de 3 millones 417 mil mexicanos regresaron a México.

De acuerdo con datos del Anuario, entre el 2009 y el 2014, solo el 15 por ciento de esos mexicanos que regresaron a territorio nacional lo hicieron porque fueron deportados.

Casi la mitad, el 46 por ciento en promedio, volvieron por reunificación familiar –en gran parte cuando un familiar fue deportado-.

La cifra indicaría que por cada persona deportada, dos o tres vuelven a México voluntariamente para no perder su unidad familiar. 

Aunque la reforma propuesta a la Ley General de Educación es un primer paso, las normas administrativas están plasmadas en el Acuerdo 286 de la Secretaría de Educación Pública (SEP), que también será reformado por la propia dependencia.

La iniciativa presidencial fue enviada al Senado, donde tendrán hasta 30 días para analizarla y eventualmente aprobarla; pasará después a la Cámara de Diputados, donde tendrá el mismo plazo, al seguir el trámite de una iniciativa preferente.

Simplificar trámites

El presidente Peña Nieto propuso varias modificaciones a la Ley General de Educación y plantea la disposición de que a los estudiantes se les dé oportunidad de ingresar al sistema educativo, aun sin tener los documentos necesarios.

“Se les deberán facilitar opciones para obtener la documentación que permita su integración o tránsito por el sistema educativo nacional”, señala la propuesta.

También se abre el espectro para que las instituciones de educación superior particulares puedan revalidar estudios o dar equivalencias parciales de estudios de licenciatura.

Las universidades particulares tendrán que obtener estas autorizaciones de las autoridades educativas estatales o federales.

La Secretaría de Educación Pública deberá modificar las normas administrativas para que se simplifiquen los trámites en las escuelas del país.

Estas normas están plasmadas en el Acuerdo 286 de la SEP, del año 2000, en el que se establecen todos los procedimientos para la revalidación de estudios.

Los solicitantes con estudios en el extranjero deben presentar documentos apostillados, traducidos por un perito oficial y en algunos casos hasta los planes de estudio certificados de las escuelas de origen.

Las solicitudes se hacen en las escuelas a donde se quiere ingresar y, en algunos casos, la decisión sobre si se revalidan o no los estudios es hecha por un consejo técnico o en las autoridades estatales o federales.

Eliminar requisitos

La Secretaría de Educación Pública anunció también la modificación de algunos requisitos de revalidación para bajar la burocratización de los trámites.

Entre ellos, eliminará la necesidad de presentar la apostilla de los documentos de identidad y académicos, la traducción de un perito reconocido por las autoridades y la entrega de los programas de estudio.

Con esto, los niños que quieran ingresar a la educación básica solo tienen que acudir a la escuela, que tendrá que admitirlos sin pedir documento alguno.

Para la educación media superior, por ejemplo, será suficiente solamente con presentar un escrito bajo protesta de decir verdad, lo que simplificará los trámites de ingreso.

Esta medida obedece a la necesidad que muchos estudiantes deportados –o que retornan a México voluntariamente- seguramente no podrán traer sus documentos escolares por haber sido detenidos y devueltos a México o en una situación de emergencia.

El General Education Development (GED), un certificado otorgado en Estados Unidos como equivalente a los estudios de preparatoria, será reconocido en México directamente como certificado de educación media superior.

Como las leyes de educación no aplican en las universidades autónomas, tanto federales como estatales, la SEP ha dicho que les enviará algunas recomendaciones para que también flexibilicen sus trámites de admisión de estudiantes y de revalidación de estudios.

Aunado a esto, la SEP también comenzará un programa de certificación de habilidades laborales y fortalecerá la alfabetización de ciudadanos mexicanos en Estados Unidos.

Estudiantes de regreso

De acuerdo al Anuario de Migración y Remesas México 2016, los menores de edad deportados son un sector numeroso:

>3.4 millones de mexicanos regresaron al país de 2008 a enero 2017

>15 por ciento reingresó al territorio nacional tras ser deportados

>46 por ciento volvió voluntariamente siguiendo a un familiar deportado

>190,981 menores de edad fueron repatriados entre los años 2007 y 2015

>80 por ciento cursaban en EU la secundaria o preparatoria