Ante la indiferencia de las autoridades y la poca seriedad de los inversionistas interesados en adquirir Mexicana de Aviación, el personal de esta aerolínea prendió su última vela.
Esperan que el presidente electo, Enrique Peña Nieto, con quien han sostenido ya varias reuniones, tome la decisión “correcta” en enero próximo para que retome el vuelo esta aerolínea, que hasta el segundo semestre del 2010 tenía una participación del 28.7 por ciento del mercado doméstico
El secretario general de la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores (ASPA), Carlos Manuel Chávez Díaz Morineau, admite que el tiempo se agota, pero asegura que Mexicana de Aviación “no está muerta”.
El Concurso Mercantil sigue sus tiempos y será en enero cuando se defina si el grupo de inversionistas que representa Iván Barona cumple los requisitos para adquirir la aerolínea.
Por lo pronto, los pilotos han tenido ya acercamiento con Peña Nieto y con Gerardo Ruiz Esparza, coordinador de infraestructura del equipo de transición, quien les ha asegurado que el tema de Mexicana de Aviación forma parte de la agenda del presidente electo.
ASPA recurre al gobierno entrante en busca de “certidumbre” para que los inversionistas interesados adquieran la empresa. Una de sus propuestas es que se modifique la política aeronáutica del país y todas las empresas del sector tengan cabida.
En otros países, las aerolíneas con problemas similares a los de Mexicana continúan operando, ya que es la única forma de pagar sus deudas.
En México, desde hace más de dos años la empresa lucha contra la indefinición de su quiebra, pese a que han transitado 33 inversionistas interesados en participar en la reestructuración de la empresa.
Se ha pedido, incluso, a la juez concursal Edith Encarnación Alarcón, que amplíe la gama de inversionistas, confiesa el dirigente de ASPA, pero se mantiene solo el ofrecimiento del grupo de Barona, International Mining Traders.
Sostuvo que una de las principales trabas a la inversión es que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT)no les otorga el certificado de operador aéreo hasta que no muestren el capital.
El Juzgado Segundo de Distrito en materia Civil con sede en el Distrito Federal, le otorgó la calidad de potencial inversionista a Iván Barona.
Él fue uno de los primeros interesados en el rescate de Mexicana, e incluso firmó un acuerdo con la SCT a fines de 2011 para entregar la documentación que avalaba la disponibilidad de los recursos.
Semanas después se retiró del proceso al considerar que no había condiciones para cerrar la compra de la aerolínea.Hoy lo vuelven a ratificar y deberá demostrar y aportar los 250 y 300 millones de dólares necesarios para el reinicio de operaciones de la compañía.
Aunque Mexicana de Aviación suma ya dos periodos de conciliación de 365 días, siendo que la Ley de Concursos Mercantiles marca como máximo uno solo, Griselda Nieblas, directora general del Instituto Federal de Especialistas de Concursos Mercantiles (Ifecom), confirma que la aerolínea aún puede volar.
Los procedimientos concursales, con los que se busca reestructurar pasivos de las empresas y darles viabilidad de mediano y largo plazos, explica, suelen ser largos.
Tan es así que cerca del 80 por ciento de las empresas salen de los concursos mercantiles en tiempos extraordinarios, de acuerdo con datos recabados por Ifecom.