Manuel León Ríos nació en el estado Oaxaca y desde pequeño supo que no era heterosexual y no entendía el motivo por el cual en su entorno social dos hombres no podían ser pareja.
“Para mí era incomprensible por qué dos hombres no podían tomarse de la mano ni demostrarse afecto en público sin miedo”, relata.
Después de salir del ‘clóset’, ser aceptado por su familia y migrar a la Ciudad de México, en diciembre de 2018, recibió su diagnóstico positivo por el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) adquirida y meses más tarde, vivió discriminación.
En marzo de 2019, trabajó en el Hotel Punto MX en el Centro Histórico de la Ciudad de México y al revelarles a sus superiores su diagnóstico, padeció malos tratos y posteriormente fue despedido por un supuesto error.
Fue en junio de ese mismo año cuando se abrió una oportunidad laboral para entrar a trabajar a otro hotel; sin embargo, las autoridades del Hotel Punto MX dieron malas referencias laborales de él y difundieron su condición médica sin su autorización, por lo que volvieron a violar sus derechos.
León Ríos acudió ante la Fiscalía General de Justicia y ante el Consejo para Prevenir y Erradicar la Discriminación de la Ciudad de México (Copred), pero no pudo acceder a la reparación integral del daño.
Esa situación, cuenta León Ríos, lo ayudó a convertirse en defensor de las personas LGBTTTI+ y de pacientes con VIH.
“Ambas condiciones te hacen vulnerable y cuando te enteras que tienes VIH, no sabes qué hacer ni cómo avanzar, por eso tomé la decisión de acompañar casos como el mío”, indica.
En 2019, ante el desabasto de medicamentos para tratar el VIH, Manuel creo una red de apoyo para que quienes tuvieran medicamento sin caducar pero ya no lo usaran por un cambio de esquema, lo pudieran donar a otros pacientes con el virus.
Asimismo, comenzó a ayudar a víctimas de discriminación por tener VIH o ser de la comunidad de la diversidad sexual.
“Cuando eres víctima de algo así no sabes con quién o a dónde acudir, por eso acompaño a esos casos de manera institucional para que no se violen los derechos (…) Esto es muy importante porque también son situaciones que no se pueden afrontar solo”, comenta.
También, considera que su trabajo ayuda a hacer conciencia en las personas sobre la transfobia, la homofobia y la lesbofobia.
Actualmente, el miembro de la etnia zapoteca, colabora con la organización Indetectable MX y con el Centro de atención Vive de Aguascalientes (CAVA) para la venta de playeras con el fin de recaudar recursos para migrantes y personas con VIH.
“Todo lo recabado se destina a grupo CAVA en Aguasclalientes que ayuda a casos de discriminación y a personas migrantes. Hacen pruebas de detección de VIH y los apoyan para conseguir tratamientos”, señala.