El borrador del Programa de Manejo del Parque Nacional Cumbres, que está en consulta pública desde julio de 2020, podría basarse en un modelo sustentable con participación privada en La Huasteca, operada por el organismo descentralizado Parque Fundidora.
Su publicación se debe a que el Artículo 65 de la Ley General de Equilibrio Ecológico y Protección al ambiente establece que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) debe formular el programa de manejo del Área Natural Protegida (ANP), dando participación a las personas interesadas.
“El Bronco” cedió 200 hectáreas del Parque La Huasteca para que sean administradas por Parque Fundidora
El programa está disponible en la página de internet de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp). Su objetivo general es constituir el instrumento de planeación y regulación, que establece proyectos, actividades, acciones y lineamientos para el manejo y la administración.
Sin embargo, establece un apartado llamado componente de uso público, turismo y recreación al aire libre hacia modelos sustentables, mediante la capacitación, sensibilización y control de las empresas y prestadores de servicios turísticos y visitantes, acompañados de estrategias de vigilancia.
“En el Parque Nacional se llevan a cabo actividades de turismo que ofrecen un elevado potencial para la generación de ingresos, tanto para la administración del Parque como para sus pobladores, es necesario definir y aplicar lineamientos de uso”, expone el nuevo programa.
De acuerdo con este documento, las subzonas de uso público son aquellas superficies que presentan atractivos naturales para la realización de actividades de recreación al aire libre, cultural y esparcimiento donde es posible mantener concentraciones de visitantes.
Y aunque los objetivos específicos sean promover el ordenamiento de las actividades turísticas que se realicen en el Parque Nacional para la protección de la misma y fomentar entre los prestadores de servicios turísticos y visitantes una cultura de la conservación del ANP, el 7 de enero de este año el gobierno de Jaime Rodríguez cedió 200 hectáreas del Parque La Huasteca, para que sean administradas por el organismo público descentralizado Parque Fundidora.
Desde hace tres años consecutivos, “El Bronco” no contempla recursos para el Parque Fundidora, pues tiene que ser autosuficiente y 100 por ciento sustentable desde el punto de vista financiero. Por ello, en sus instalaciones se realizan eventos masivos que sirven al lucro de terceras personas.
Valle de Reyes, una realidad dentro del Parque Nacional Cumbres
La consulta pública del nuevo Programa de Manejo del Parque Nacional Cumbres, en su apartado primero transitorio, prácticamente oficializó la construcción del desarrollo Valle de Reyes, pues los terrenos están excluidos de estas reglas por contar con un amparo.
“Quedan excluidos de la aplicación del presente Programa de Manejo del Área Natural Protegida con la categoría de Parque Nacional Cumbres de Monterrey, todos aquellos predios respecto de los cuales se concedió mediante sentencia ejecutoriada del órgano jurisdiccional competente el amparo y protección de la justicia federal en contra del Decreto por el que se declara área natural protegida con el carácter de parque nacional, la región conocida con el nombre de Cumbres de Monterrey”, dice el documento.
Los propietarios de terrenos que cuenten con este recurso legal de los municipios de Allende, García, Montemorelos, Monterrey, Rayones, Santa Catarina, Santiago y San Pedro Garza García no estarán dentro del programa de manejo
La categoría de área natural protegida del Parque Nacional Cumbres Monterrey fue decretada en 1939 por el entonces presidente Lázaro Cárdenas. En el año 2000, Ernesto Zedillo, quien era titular del Ejecutivo, promulgó un nuevo mandato de redelimitación.
Ante ello, inversionistas del proyecto Valle de Reyes obtuvieron un amparo y el juicio duró años en litigio. El decreto se publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) con un plazo de 10 años para conformar el Programa de Manejo pero en dos décadas todavía no se ha concretado, por lo que la construcción se suspendió.
