Valeria Macías, maestra de universidad y ahora activista social, ha vivido siete años de su vida con temor a que su presunto acosador cumpla su amenaza de matarla, mientras la autoridad de Nuevo León mantiene su caso sin resolverse.
En el año 2021, la docente se volvió viral al contar en un video su miedo de ser asesinada por su exalumno, de nombre David, quien le mandaba mensajes por las redes sociales, la seguía hasta su casa y trabajo al confesarle que estaba enamorado de ella.
@valeriaymv Respuesta a @Carla Rachel Me han pedido en varias ocasiones el contexto de mi caso pero ya son tantos años y con tanta informacion que es muy dificil resumirlo, como quiera, aunque omiti algunas partes, trate de platicarles lo mas relevante y la actualizacion hasta el momento. Sigo luchando por justicia y seguire, ya me robo 8 años de mi vida y no voy a irme, no voy a abandonar mi vida por culpa de el, por culpa de la ineficiencia en nuestras autoridades, tampoco permitire que nadie de mi gente le haga nada para que se termine volteando el caso, dejandolo a el como victima y exentando a la autoridad de responsabilidad. Lo hago porque debemos abrir camino para las demas. #niunamenos #yabasta
La víctima de acoso interpuso una denuncia ante el Ministerio Público y aunque el hombre fue encontrado y encarcelado, solo duró ocho meses preso, pues una Jueza lo dejó en libertad al no estar tipificado el acecho como delito.
El caso se volvió mediático y las autoridades volvieron a retomar el caso; sin embargo, cuando se giró una nueva orden de aprehensión, David se dio a la fuga de su domicilio y hasta el momento no ha sido localizado.
Posteriormente, Valeria Macías explicó que su agresor promovió un amparo que lo protege de cualquier orden de aprehensión, por lo cual ahora anda por las calles libre sin que pueda ser detenido por ninguna autoridad.
La maestra interpuso una revisión para que activaran nuevamente la orden de aprehensión, pero el caso no ha avanzado y está estancado desde hace más de un año y medio.
“Mi agresor sigue suelto y yo vivo con miedo cada día de que pueda ser mi último día. Las autoridades siguen sin resolver, pero no se las voy a dejar fácil, voy a seguir luchando por mi caso y por todos los casos que pueda apoyarlas a ustedes”, dijo.
Se une al activismo
La maestra, al enterarse de las lagunas en el sistema penitenciario y la falta de una ley que castigue el acoso de personas, comenzó un movimiento para promover una iniciativa llamada Ley contra el Acecho.
“Estoy trabajando con un grupo de activistas internacionales para tipificar en México la Ley contra el Acecho, haré que mi experiencia valga la pena para que tú no lo tengas que vivir”, dijo.