[kaltura-widget uiconfid=”38728022″ entryid=”0_ph0oh8bn” responsive=”true” hoveringControls=”false” width=”100%” height=”75%” /] El sexto y último Informe de Gobierno de Enrique Peña Nieto poco sirvió para ilustrar la realidad que viven millones de mexicanos, sin embargo, los invitados que asistieron a Palacio Nacional, celebraron todas y cada una de las intervenciones del presidente.
Cinco fueron las prioridades del gobierno que encabezó el mexiquense al llegar al poder: fortalecer las instituciones del país y combatir a los grupos del crimen organizado; disminuir la pobreza, asegurar educación de calidad para todos; eliminar barreras de crecimiento económico y fortalecer la presencia del país a nivel internacional.
Custodiando ambos lados del templete desde donde el exgobernador del Estado de México rindió cuentas de su último año de gobierno y del sexenio en general, se encontraban su Gabinete y los gobernadores de las 32 entidades que conforman al país, quienes asentían silenciosamente ante el discurso de Peña Nieto.
Después de señalar que el mayor logro de su administración fue la implementación de las llamadas reformas estructurales, la primera cuestión que se atendió fue el tema del fortalecimiento institucional y el combate del crimen organizado, donde ante la evidente crisis de violencia e inseguridad por la que atraviesa México, admitió que no en todo se lograron avances.
Sin embargo, el jefe del Ejecutivo, recalcó que a pesar de que se vio un retroceso en algunas cuestiones como el aumento de homicidios dolosos, se implementaron una serie de acciones que sí ayudaron a revertir esta problemática.
Destacó cuatro acciones: el mejoramiento de la coordinación operativa entre los tres órdenes de gobierno, el fortalecimiento de las capacidades institucionales de las corporaciones policiales, el uso intensivo de sistemas de inteligencia y la prevención social de la violencia y el delito.
Para cerrar con el bloque, Peña Nieto agradeció a todas las corporaciones policiacas, sobre todo a las Fuerzas Armadas por su labor y entrega en el combate al crimen organizado, reconocimiento que provocó que todos los espectadores se levantaran de sus asientos y aplaudieran por más de un minuto.
En defensa de reformas y programas
La lucha por eliminar la pobreza y garantizar la inclusión y la igualdad para todos los mexicanos también formó parte importante del informe.
Cuando Enrique Peña Nieto llegó al poder, en México había aproximadamente 53.3 millones de personas que se encontraban en condiciones de pobreza de acuerdo con las cifras del CONEVAL, además de que persistían altos niveles de exclusión, privación de derechos sociales y una gran desigualdad entre personas y regiones del país.
Por ello, el jefe del Poder Ejecutivo, indicó que desde el inicio de su administración se puso en marcha una nueva política que estuviera enfocada a no sólo atender un piso mínimo de bienestar, sino a combatir las causas que provocan la pobreza.
En este sentido, Peña Nieto destacó la puesta en marcha de la Cruzada Nacional Contra el Hambre, con la cual aseguró se realizaron acciones para brindar una mejor alimentación a las personas más necesitadas así como acceso a servicios de educación, salud, vivienda adecuada y mejores ingresos.
A esto se sumó El Programa de Abasto Rural con el cual se atendió a las familias de más alta marginación y el Programa de Inclusión Social Prospera, con el cual se atendió a más de 6.9 millones de familias para ayudarlas a salir de la pobreza.
“El fin último de nuestra estrategia para fomentar la inclusión es que todos los mexicanos puedan incorporarse a la vida productiva del país y atender sus necesidades básicas y las de sus familiares”, dijo.
Entre las cifras que destacó se encuentra la creación de 5 mil comedores comunitarios, la construcción de más de mil 200 centros Diconsa, la reafiliación de más de 26.1 millones de personas al seguro social, la construcción de más de 40 nuevos hospitales y la disminución de la edad para obtener una pensión de los 70 a los 65 años de edad, entre otros.
“De seguir por la misma ruta, México podría acabar con la pobreza en la próxima década”, indicó.
En lo que a educación se refiere, el presidente de México aseguró que su administración sembró la semilla del cambio más importante en esta materia de los últimos 60 años con la implementación de la Reforma Educativa.
Sobre esta reforma, la cual el próximo gobierno buscará echar para atrás, dijo que gracias a ésta se logró pasar de un sistema discrecional donde el clientelismo había sustituido al mérito por uno que garantiza la educación de calidad para niños, niñas y adolescentes.
Entre los puntos más destacados en esta materia recalcó las más de 4 mil plazas docentes recuperadas, el cambio en los programas de estudios basados en competencias y habilidades; el fortalecimiento de la enseñanza del inglés y la inversión que se hizo para mejorar la infraestructura de las escuelas en todos los niveles escolares la cual fue de 138 millones 696 pesos.
En materia económica, el presidente dejó en claro que sin estabilidad no puede haber desarrollo.
En este sentido, resaltó la creación de la Reforma Hacendaria, la cual dijo permitió que ahora 78 por ciento de la población sean contribuyentes.
También reveló que la deuda del país se redujo a 45.5 por ciento del PIB y que el número de empleos aumentó, calificando su administración como “el sexenio del empleo”.
Peña Nieto tampoco olvidó señalar que la tarifa eléctrica bajó en 99 por ciento de los hogares, que se impulsó la inversión extranjera como nunca antes gracias a la Reforma Energética y que se crearon avances muy importantes en la explotación de gas natural.
Por último, en lo que se refiere al tema internacional, el primer mandatario del país, puso especial énfasis en los acuerdos logrados durante la renegociación del TLCAN y de otros tratados internacionales como el Acuerdo de París, con el cual se pretende combatir los estragos del cambio climático y reducir la emisión de Gases de Efecto Invernadero.
En el cierre de su mensaje, el todavía presidente de la República, deseó el mayor de los éxitos a Andres Manuel López Obrador y agradeció a toda su familia, de quienes se expresó con cariño y dijo que siempre lo apoyaron.
“Ha sido el más alto honor de mi vida servir a los mexicanos con pasión, entusiasmo, alegría patriotismo y entrega”, dijo en un tono que a momentos se escuchó entrecortado y que dio pie a los aplausos finales que se extendieron por varios minutos.