Lorena Beltrán, directora de Cannabisalud y una de las impulsoras de la regulación de la planta, comenta que la prohibición no es el camino para los vaporizadores o cigarros electrónicos, ya que seguramente se seguirán comercializando en un mercado irregular, lo cual representa un problema para la salud.
“Si estuvieran regulados, al igual que la cannabis, le darías la opción al consumidor de elegir un producto del que sabe que hubo un análisis de calidad y eficacia en vez de comprarlos en la calle y no saber qué está consumiendo.
“Es una lástima que no quieran regular los productos y las sustancias, pero sobre todo, que se quieran hacer responsables de algo que ya existe y que no se va a ir a ningún lado con un decreto prohibicionista”, opina.
Al igual que con la cannabis, que a raíz de litigios desde 2015 se han conseguido amparos para poder consumir la planta con fines medicinales y personales, Beltrán señala que la estrategia de los vaporizadores podría seguir el mismo camino.
“Fue un decreto que se sacaron de la manga con sanciones que no sabemos cómo surgieron o por qué. Definitivamente este tipo de decretos dan entrada a estrategias de litigio para lograr amparos cuestionando su legalidad. Serán las empresas más grandes y fuertes las que se vayan por esas vías al igual que despachos legales que ofrecerán la ayuda para ese tipo de litigios, y ellos serán los beneficiados”, concluye.
