Joaquín Vargas presentó ayer las pruebas que acreditan que recibió presiones de funcionarios del gobierno federal para despedir a la periodista Carmen Aristegui a cambio de obtener el refrendo de la banda de 2.5 GHz.
Estas pruebas son una especie BlackBerryLeaks, ya que están basadas en una conversación que sostuvieron Vargas, presidente de MVS, y Javier Lozano, secretario del Trabajo, a través del servicio de mensajería de esa compañía de telefonía celular.
El empresario también reveló una carta de disculpa que Aristegui debía leer en su programa, la cual fue revisada y avalada por Alejandra Sota, vocera de la Presidencia.
Estos BBLeaks ponen al descubierto las presiones y chantajes a los que estuvo sujeto Vargas a partir de la pregunta que lanzó Aristegui en su programa de radio sobre el supuesto problema de alcoholismo del presidente Felipe Calderón. Y lo hizo a partir de una manta que colgó el legislador Gerardo Fernández Noroña en la Cámara de Diputados.
Tanto Lozano como Sota han reconocido que las revelaciones hechas por Vargas son ciertas, pero que tanto el chat a través de BlackBerry como la conversación en persona se realizaron en un contexto privado, no como parte de una relación entre funcionarios de gobierno y un empresario.
Aceptada la veracidad de los hechos por todos los actores, quedan como referente de cómo se intenta frenar desde el gobierno las libertades de expresión y de prensa en México.
Conoce la historia de los BBLeaks.
¿Felipe Calderón tiene problema de alcoholismo?
Joaquín, escuchaste hoy a Carmen con lo que dijo respecto de que FHC/alcoholismo??”, preguntó a través de su BlackBerry el secretario del Trabajo Javier Lozano a su amigo Joaquín Vargas el viernes 4 de febrero de 2011.
“Para mi desagradable sorpresa y encabronamiento sí. El lunes se disculpará”, contestó Vargas.
Y es que en su programa matutino de ese viernes 4, Aristegui preguntó al aire: ¿ Calderón tiene un problema de alcoholismo?
“¡Qué gran error, no ayuda en nada!”, replicó Lozano, quien había venido fungiendo como asesor de Vargas para que éste obtuviera el refrendo de la banda de 2.5 GHz.
Javier Lozano escribió: “Se sugiere una rápida y contundente respuesta de salida. El tratamiento del tema. Ve el tratamiento en todos los medios (incluido La Jornada). No puede ser esta pinche fobia de Carmen.
“Tanto que has avanzado en estas semanas para que todo se revierta de un momento a otro. Y la que me avisó del tema fue Ale Sota (la coordinadora de Comunicación Social de Los Pinos). Es decir, hay una gran molestia (en Los Pinos)”.
La pregunta había desatado la ira presidencial. Y Vargas pudo dar cuenta de ello ese mismo día, cuando fue recibido por el secretario de Comunicaciones y Transportes.
En la conferencia de prensa que ofreció ayer, Joaquín Vargas fue claro: “En MVS no nos dedicamos a grabar, ni a realizar actividades de espionaje. Los testimoniales que presentaremos a continuación fueron obtenidos de mi teléfono celular marca BlackBerry, modelo Torch, que venía programado para guardar los comunicados que se emitían y recibían desde el aparato.
“La palabra de una persona debería ser suficiente ante la arbitrariedad del gobierno. Las pruebas no deberían ser necesarias cuando siempre se ha obrado buena fe. Desafortunadamente, no estamos ante ese caso”.
Y después de presentar algunos antecedentes, Joaquín Vargas exhibió las pruebas que confirmaron la veracidad de lo que dijo la semana pasada.
Pero, al mismo tiempo, evidenció que muchos empresarios, incluido él mismo, no pueden presumir que respetan la libertad de expresión.
Las evidencias que exhibió Vargas no son “mensajitos” de celular, como algunos han señalado.
Son diálogos reveladores que demuestran que el gobierno del presidente Felipe Calderón hizo todo lo posible por apagar la voz de una periodista incómoda.
Vargas también exhibió un texto de disculpa redactado en Los Pinos con la intención de que fuera leído públicamente por la periodista Carmen Aristegui.
Ese 4 de febrero fue un día largo para el presidente de MVS.
El secretario de Comunicaciones y Transportes, Dionisio Pérez-Jácome, le notificó el enojo presidencial y le dio a conocer la suspensión de cualquier trámite relativo a su concesión mientras Carmen Aristegui no ofreciera disculpas públicamente.
Pero eso no fue todo.
“Alrededor de las 23:50 horas del 4 de febrero recibí una llamada en mi domicilio por medio de la cual me solicitaron que acudiera al día siguiente, sábado 5 de febrero, a las 13 horas, a la oficina de la señora Sota.
“El sábado 5 de febrero llegué a Los Pinos. Entré con mi automóvil por la puerta que da a Molino del Rey. Registré mi acceso en la entrada y en él fui conducido hacia la oficina de la señora Sota.
“Me pidió que tomara asiento en la sala de juntas que tiene el en seguida de su escritorio y me entregó, en propia mano, el texto que ella consideraba ‘era lo mínimo’”, dijo Joaquín Vargas en la conferencia de prensa que ofreció para explicar y probar que había sido víctima de un chantaje por parte del gobierno.
El texto que la vocera del presidente le entregó al empresario contenía la disculpa pública que Carmen Aristegui debía leer en su programa de radio del 7 de febrero. Así, Joaquín Vargas podría continuar tramitando el refrendo de la banda 2.5.
El texto redactado en Los Pinos decía: “El viernes pasado aludí al contenido de la manta de Fernández Noroña.
“Debo decir que he recibido un sinnúmero de críticas y cuestionamientos en las redes sociales y personalmente a través de distintas vías.
“El más serio de ellos es que violenté el código de ética que me comprometí a respetar, que dice ‘XXX’, en este concreto, di por válida una presunción. En tanto que estoy pidiendo pruebas que la desmientan, di por válida una presunción y una duda verdaderamente grave sobre la integridad física y de comportamiento de una persona y específicamente del presidente de la República.
“Además, preguntando un poco acerca del comportamiento personal del presidente a través de quienes más lo conocen o han tenido oportunidad de convivir con él como presidente, e incluso a través de la fuente que cubre la Presidencia de la República, incluyendo a la reportera xxx que ha llevado a cabo en su calidad de presidente de la República más de 1700 eventos públicos, a los cuales no se tiene ningún reporte por parte de la prensa que lo cubre o por cualquier otro medio a que haya faltado en una sola ocasión por razones de salud a uno de sus eventos públicos, mucho menos por las razones infundadamente aludidas por el diputado Fernández Noroña.
“El presidente es una persona saludable, practica deporte, en particular ciclismo, natación o corre entre 3 y 5 kilómetros diariamente”.
“Al conocer el texto, supe de inmediato que Aristegui no lo aceptaría”, dijo ayer Vargas.
‘Haz lo que te toca hacer’
Joaquín Vargas continuó su relato.
“Le dije (a Sota) que si yo corría a Aristegui y después ellos destrababan el tema de la 2.5, aparecería esa gestión como moneda de cambio por la cabeza de la señora Aristegui.
“Hice otras consideraciones respecto del escándalo que se ocasionaría si Carmen salía del aire como consecuencia de su alusión al supuesto alcoholismo del presidente de la República.
“Me interrumpió, le pidió a alguien unas llaves, se puso de pie, abrió la puerta de cristal que da a los jardines de la residencia presidencial y me pidió que la acompañara.
“Y siguió caminando alrededor de su oficina. Nuevamente le advertí de los riesgos de generar un escándalo mayúsculo; de mi temor fundado de que por el despido de la periodista y las reacciones que ello generara se inhibieran (los del gobierno) de continuar con las gestiones para la prórroga de las concesiones de MVS; de la cantidad de gente que trabaja en la compañía; de los compromisos con los accionistas; de mi responsabilidad como presidente del Consejo de MVS, etc.
“Después de escucharme, la señora Sota me dijo que no tenía de qué preocuparme, y afirmó: ‘Tú haz lo que te toca hacer, y yo me ocupo de lo que me corresponde’”.
El 9 de febrero, el presidente de MVS le envió un correo electrónico a Alejandra Sota:
“Estimada Alejandra:
“El pasado viernes 4 de febrero me explicaron en la SCT que la reunión de trabajo programada para ese día no podía llevarse a cabo hasta entonces no se solucionara el lamentable problema ocurrido ese mismo día; asimismo se me ofreció que tan pronto se solucionara éste, se reactivaría dicha reunión, inclusive para el pasado lunes, a pesar de ser un día festivo, o bien el martes, a mi conveniencia.
“Como verás en el correo que sigue a éste, no solamente no es ajeno a la cita, sino que además me cancelaron otra reunión que tenía con el presidente de la Cofetel.
“Sinceramente, espero no estar en el supuesto (temor) que te externé, en el sentido de que se iban a inhibir de continuar mis gestiones por el escándalo que mi decisión provocaría.
“Honestamente, estoy confundido”.
Para asegurarse de que Alejandra Sota había recibido su correo, Joaquín Vargas le envió un mensaje por el teléfono.
Y la vocera de la Presidencia le contestó: “Ahorita hablo con Dionisio y te sugiero que no me mandes correos de tu cuenta institucional… No te preocupes por lo de Dionisio, ahorita le llamo”.
En esos momentos, Carmen Aristegui ofrecía una rueda de prensa en la que acusaba al gobierno de Felipe Calderón.
“¿La estás escuchando?”, le preguntó Alejandra Sota al empresario por medio de un mensaje.
“Sí va a ser necesaria una reacción de tu parte, Joaquín”, le exigió al empresario.
Y continuó: “Aristegui dice que Los Pinos exigieron a MVS, no a ella, una disculpa formal.
“Presidencia no respondió mi cuestionamiento. Cuestionamiento duro pero no injurioso. Tampoco violaba el código de ética.
“Que tú te sentiste obligado por presiones… que por un comentario editorial se le corta la cabeza a alguien…”.
Durante el intercambio de mensajes por BlackBerry, Joaquín Vargas trataba de contener la embestida de Los Pinos con respuestas como: “Te comento terminando…”, “Fernández Noroña clausurando MVS radio…”, “Mi correo está lleno de mentadas”.
Finalmente, Alejandra Sota puso sus condiciones.
“Joaquín es MUY importante tu salida pública porque a nosotros nos pone contra la pared”.
Después trató de calmarlo con otros mensajes:
“Me dijo Dionisio que ya que la reunión mañana”.
“Hola. Ya vamos a sacar un comunicado. ¿Cómo vas?”.
A Sota le urgía tanto que Joaquín Vargas desmintiera públicamente a Aristegui, que hasta le leyó el proyecto de comunicado de la Presidencia:
“La Presidencia de la República rechaza haber tenido cualquier participación en la salida de Carmen Aristegui de MVS noticias…
“Las especulaciones sobre supuestas presiones del Gobierno Federal son falsas. La política y la práctica diaria de la comunicación social de este gobierno no se mezclan ni se confunden con la política pública en materia de telecomunicaciones. Las decisiones en ese ámbito se toman con total transparencia y estricto apego a la ley, sin ninguna otra consideración que la concordancia de los principios de cobertura, convergencia y competencia… ¿Cómo lo ves?
“Estaré mañana en la oficina de Gerardo Ruiz Mateos… ojalá puedas acompañarnos de nuevo”.
“Allí estaré”, contestó Vargas.
El regreso de Carmen
“Están subiendo fuerte en Twitter que Carmen Aristegui regresa, que es un hecho”, le escribió Alejandra Sota a Vargas por BlackBerry.
“Así es, estoy enviando el boletín informativo”, respondió Joaquín Vargas. Y le puntualizó la historia de la traición.
“Recapitulemos: 1. Pinos exige una disculpa… 2. SCT por instrucciones presidenciales congela mis gestiones de cuatro años, hasta tanto la conductora no se disculpe públicamente. “3. Advertí de los riesgos que se correrían, en el caso de que la conductora no aceptara ofrecerle disculpas.
“4. Me manifestaste que no había problema y me entregaste un texto al tenor del cual tenía que ofrecerse la disculpa.
“5. Yo acepté hasta llegar a las últimas consecuencias con tal de no poner en riesgo mis concesiones. Por todo lo anterior estamos convencidos.
“6. Tomamos la decisión de dejarla ir y sacamos un comunicado en donde asumimos la responsabilidad de su salida del aire.
“7. Tú sacaste un boletín en el que aseguraste NO TENER NADA QUE VER con su salida del aire.
“8. Hoy consideramos que la mejor forma de cuidar al señor presidente es no hacer ninguna referencia ni a lo sucedido, ni a lo especulado”.
Alejandra Sota preguntó: “¿El lunes ella va a ofrecer una disculpa pública?”.
Joaquín Vargas reviró: “¿Cómo verías una entrevista el lunes con el señor presidente?”.
“Nos buscamos mañana. Evaluemos la opinión pública de mañana y hablamos”, concluyó.
Joaquín Vargas se volvió a reunir en Los Pinos con Alejandra Sota, quien le pidió que hiciera una declaración pública para exonerar al presidente de lo acontecido en las dos últimas semanas.
Joaquín Vargas lo consultó con el Consejo de Administración. Y el 20 de febrero de 2011 le comunicó su decisión por escrito a Alejandra Sota.
“Alejandra: terminando una larga junta en la que concluimos (después de consultar con los expertos) que lo mejor para la imagen del presidente era ya no tocar el tema que tratamos el día de ayer.
LA PRESIDENCIA Y LOZANO CONTESTAN
Por Paulina Villegas
Mientras que se pasan de un lado a otro la bolita, negociando “en lo oscurito” el precio de la cabeza de Carmen Aristegui, por el de la banda 2.5MGz e intercambiando una limpia de imagen del presidente, por una forzada disculpa pública, las dos partes revelan ser tan chantajeados como chantajistas.
Una irritada y nerviosa Alejandra Sota, vocera de la Presidencia de la República, afirmó en conferencia de prensa ayer que el cese de Aristegui “fue decisión exclusiva del señor Vargas, no solicitud o exigencia del gobierno federal, ni de un berrinche presidencial.”
De no haber sido así, cuestionó: ¿Porqué el señor Vargas confirma a sus accionistas su decisión personal? ¿Porque la empresa, así fuera en el momento de la recontratación nunca hizo públicas las supuestas presiones del gobierno?
“Simple y sencillamente porque no las hubo”, dijo Sota y agregó: “Yo no exigí una exoneración del gobierno tras la recontratación de Carmen Aristegui, yo le exigí que aclarara que los Pinos nunca solicitó la remoción de la conductora de su programa.”
La vocera afirmó que el escándalo resurge porque las pretensiones de Vargas de mantener el control de la banda 2.5, no cumplen con los criterios técnicos.
Y “recurre al chantaje político para evadir el pago que le corresponde de un bien que es de todos los mexicanos”.
Además ventaneó una supuesta reunión entre los hermanos Vargas y el jefe de la oficina de los Pinos, Gerardo Ruiz Mateos, el 10 de febrero del 2011, a la que Sota asistió.
Mientras leía con tropiezos un documento, Sota reiteró que en la supuesta reunión Ruiz dijo: “Que les quede bien claro que la presión de quitarla no vino de aquí, fue una decisión estrictamente de su cadena MVS”.
Entonces, dice la vocera, el intento por callar a Carmen Aristegui, fue nada más y nada menos que una estrategia comercial de MVS, por querer adueñarse de un bien público.
“El presidente de MVS acusa a gobierno federal de coartar la libertad de expresión cuando es él primero que lo hace”, agregó.
La otra respuesta oficial llegó del senador electo Javier Lozano, por su cuenta en twittwe. Ahí,aclaró que la opinión sobre la “viabilidad” de recontratar a Carmen se la dio en una plática personal, no oficial.
“Niego categóricamente haber amenazado o condicionado al señor Joaquín Vargas la viabilidad de su interés en el asunto de referencia a la no recontratación de la señora Carmen Aristegui”, leía la declaración que difundió en su cuenta personal de Twitter.
Y agregó: “Como el propio señor Vargas reconoce, él fue quien me buscó como amigo que era suyo y no en mi calidad de Secretario. Fue en ese tenor y en ese contexto que siempre le compartí mi opinión a Joaquín Vargas y nunca hablando a nombre del Presidente de la República.”
‘QUE LA CNDH INTERVENGA EN CONFLICTO’
Por Armando Estrop
La Comisión Permanente del Congreso de la Unión aprobó ayer un punto de acuerdo para que la Comisión Nacional de Derechos Humanos realice una investigación en el caso MVS por la posible violación de los derechos fundamentales de la periodista Carmen Aristegui.
Además se solicitó que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes entregue un informe sobre el conflicto que tiene el gobierno federal con la empresa MVS.
El punto fue promovido por el perredista José Luis Jaime Correa y lo apoyó el diputado del Partido del Trabajo, Jaime Cárdenas.
Sin embargo la legislatura está por terminar, así que lo más probable es que el titular de la SCT Dionisio Pérez Jácome, tenga que responder a la siguiente legislatura que toma protesta el primero de septiembre.
El recurso legislativo pudo ser subido a tribuna el mismo día en que el presidente de MVS, Joaquín Vargas, dio una segunda rueda de prensa donde denunció las presiones que recibió del gobierno federal para despedir a la periodista Carmen Aristegui.
Originalmente se pediría una comparecencia de Pérez Jácome pero por el término de la legislatura ya no se podría realizar el encuentro, y finalmente se quedó en la solicitud de información que tiene carácter de oficial.
“La medida tiene visos de ser un acto de venganza que busca favorecer los intereses de los monopolios televisivos, tal como lo han adelantado muchos analistas y especialistas, en todo caso resulta indispensable que el gobierno federal, a través del Secretario de Comunicaciones y Transportes haga llegar a esta soberanía un informe que explique las razones de fondo y las consideraciones técnicas que fundamentaron su decisión para iniciar las acciones de rescate de las concesiones de la banda 2.5 gigahertz y aclarar las dudas y cuestionamientos que han surgido”, dijo el perredista desde la tribuna.
Se aprobó de urgente y obvia resolución por lo que se turna de manera inmediata a la SCT sin necesidad de que pase por las comisiones para su dictaminación.
Nadie increpó al orador.
Su compañero de izquierda, Jaime Cárdenas, quien desde el inicio de la sesión condenó la actitud del gobierno federal por considerar que es un acto claro de censura y coartar la libertad de expresión, pidió nuevamente la palabra.
Y es que Cárdenas fue uno de los diputados que junto a Gerardo Fernández Noroña presentaron en febrero del 2011, una manta en plena sesión de la Cámara de Diputados, donde se denunciaba el presunto alcoholismo del presidente Felipe Calderón.
Fue al relatar este hecho y cuestionar su veracidad cuando Carmen Aristegui entró en la polémica y se desató el conflicto que ahora tiene enfrentados a la Presidencia de la República con la empresa radiofónica.
El exconsejero del Instituto Federal Electoral aseguró que es tal la gravedad del caso que amerita una investigación por parte de la Comisión Nacional de Derechos Humanos.