Los 5 problemas políticos de Samuel García en 2023

Debido a sus continuos arrebatos, posturas jurídicas y a su negación al diálogo, el gobernador Samuel García se convirtió en el mandatario estatal más polémico de la historia neoleonesa.

En 2023, García Sepúlveda atrajo la atención nacional por su intención de contender por la Presidencia de la República, sin dejar el control del gobierno estatal al intentar dejar como encargado a su secretario de Gobierno, sin embargo, no pudo lograrlo.

Aunado a ello, la excesiva inseguridad, el alza en las ejecuciones, el peor esquema de transporte de las últimas décadas, incrementos en cobros de servicios y la mala administración del agua ante la escasez de líquido, lo mantienen en el ojo del huracán.

Las pugnas contra la oposición

Entre los asuntos que crearon más controversia entre García y la oposición, destaca la discusión por el presupuesto, una dificultad que está por repetirse.

El 12 de enero de 2022, luego de casi tres meses de tensión política entre el Gobierno de Nuevo León y el Congreso local, el Legislativo votó por unanimidad el Presupuesto de Egresos 2023 por 140 mil millones 037 mil pesos, con un incremento de 10 por ciento. En términos reales, destacó una asignación del 17 por ciento para obra pública, una reducción del 10 por ciento a la nómina, y un recorte del 55 por ciento en servicios profesionales.

Los diputados le quitaron al paquete fiscal un monto de 12 mil millones de pesos, que aseguran el gobernador lo deseaba para utilizarlo con fines político-electorales.

Para el 21 de marzo, alcaldes de la Zona Metropolitana de Monterrey (ZMM),  encabezados por el munícipe de Apodaca, César Garza, se reunieron con el tesorero estatal Carlos Garza y le solicitaron la liberación del resto del Fondo Metropolitano de 2 mil 500 millones de pesos del presupuesto estatal contemplado para los municipios, ya que a esas fechas solamente habían recibido poco más de 700 millones. En la visita no consiguieron nada.

Posteriormente llegaron hasta los tribunales para exigir la entrega del dinero, sin embargo, el asunto sigue sin ser resuelto.

En noviembre y diciembre, los alcaldes realizaron varias protestas para exigir los mil 750 millones de pesos restantes, pero el gobernador se niega a entregarlo aduciendo, entre otras razones, que el fondo solo beneficia a municipios del PRI y del PAN.

A través de sus redes sociales, el mandatario advirtió recientemente que ese dinero se perderá al concluir 2023.

En septiembre, Samuel García y el presidente Andrés Manuel López Obrador “inauguraron” el acueducto El Cuchillo II, con el que se abastecería más rápido de agua a la ZMM, lo que representa que se consuma más pronto el líquido que se encuentra escaso desde hace varios años.

Sin embargo, días después se constató que la obra no estaba concluida y que no abastecería de agua a la ciudad en un lapso de siete a 10 días más como lo anunciaron, lo que ocasionó un reproche de la oposición.

Finalmente, el 16 de diciembre López Obrador y García Sepúlveda pusieron, nuevamente, en marcha la obra con la que suministrarán cinco mil litros por segundo de agua.

Hacia octubre comenzó a gestarse lo que representa el máximo escándalo del año para Samuel García. El Congreso local recibió su solicitud de licencia hasta por seis meses, para buscar contender por Movimiento Ciudadano a la Presidencia de la República.

El Legislativo le otorgó la licencia, pero le negó la petición de dejar al secretario General de Gobierno, Javier Navarro, como interino, ya que la ley faculta al Congreso a definir quién sería el que ocupe el cargo, y nombraron para el puesto a Arturo Salinas, presidente del Poder Judicial en el Estado, quien rendiría protesta el 2 de diciembre.

García Sepúlveda se inconformó, declaró que era ilegal ese nombramiento e impugnó ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) el hecho para “tumbar” a Salinas e imponer a Navarro.

El 13 de noviembre, la SCJN no aprobó las designaciones ni de Salinas ni la de Navarro, y precisó que es facultad del Congreso nombrar al interino.

El 29 de noviembre, en medio del caos, daños materiales y hasta el estallido de una bomba de humo por parte de militantes del MC y empleados del gobierno estatal, que irrumpieron en el Pleno para tratar de detener la sesión, el Congreso de Nuevo León nombró por mayoría al exvicefiscal del Ministerio Público de la entidad, Luis Enrique Orozco, como gobernador interino, cuyas funciones iniciarían a las 00:00 horas del 2 de diciembre.

De nuevo, García se inconformó, a pesar de que públicamente había dicho que aceptaría a Orozco en el cargo.

En clara rebeldía al Legislativo y a la SCJN, el gobernador recurrió a amparos como últimos intentos para imponer a Javier Navarro, pero de nuevo la Corte se pronunció el 1 de diciembre a las 23:30 horas para respaldar el nombramiento de Orozco.

A las 00:20 horas del 2 de diciembre, ya como gobernador interino, Orozco llegó a Palacio de Gobierno a iniciar su mandato, pero, cuando parecía que la novela política concluía, elementos de  Fuerza Civil no lo dejaron ingresar.

Diez minutos después logró entrar y en las escalinatas del Palacio de Cantera dio una rueda de prensa para informar sus primeras acciones de trabajo. La entrevista aún no terminaba cuando Javier Navarro salió a informarle que Samuel García declinaba a sus aspiraciones políticas, y que siempre no haría efectiva su licencia.

El 20 de noviembre, bajo el argumento de la falta de aprobación de la Ley de Ingresos, el gobernador Samuel García no entregó completa la propuesta para el Presupuesto de Egresos para 2024, a pesar de que el plazo vencía ese día.

Esta situación ocasionó la inconformidad del Poder Legislativo y la crítica política, además de advertencias de que de no hacerlo, incurriría en diversos delitos y ocasionaría dificultades para el proceso electoral local de 2024.

El 6 de diciembre el Tribunal Superior de Justicia ordenó al Gobierno entregar el complemento, no obstante, el mandatario no accedió.El 16 de diciembre, tras finalizar el periodo ordinario de sesiones, Samuel García declaró que no lo enviará.

Hasta el momento este caso sigue en incertidumbre, pues el Legislativo se encuentra de vacaciones y el Presupuesto 2024 sigue sin llegar.