El Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), a través de la Sección 10, logró resolver la situación laboral de prefectos y ayudantes de laboratorio de la Ciudad de México que, debido a una interpretación equivocada de la ley, su basificación había quedado indefinida.
Gracias a la gestión del Sindicato, este jueves se entregaron nombramientos definitivos a 861 prefectos de secundarias generales y técnicas, así como a 139 ayudantes de laboratorio de secundarias generales.
La ceremonia estuvo encabezada por el presidente del SNTE, Juan Díaz de la Torre, quien expresó que con estos logros se demuestra la fortaleza, unidad y utilidad del Sindicato para los agremiados y sus familias.
“Contrario a la tendencia mundial de precarizar el trabajo y disminuir la seguridad social, el SNTE está consolidando la certeza laboral para sus agremiados: mejora sus condiciones de trabajo y salariales; ofrece alternativas de actualización y profesionalización, además de garantizarles una jubilación justa. Unidos en un sindicato somos más fuertes. Nosotros cumplimos con hechos, no hacemos demagogia”.
Advirtió que ante la lesión del tejido social que padece México, “la educación es la llave que nos permitirá salir de los problemas a los que nos enfrentamos: corrupción, inseguridad, impunidad, injusticia e inequidad. Nos corresponde a todos actuar dentro de nuestras responsabilidades; los trabajadores de la educación están cumpliendo y son respaldados por su sindicato”.
Díaz de la Torre adelantó que el SNTE ya planteó a la autoridad educativa un trámite similar para otorgar el nombramiento definitivo a médicos escolares y a 6 mil docentes de Tecnologías; sin embargo, precisó, éste es un proceso más largo, debido a que se requiere una conversión de plazas.
A su vez, el secretario general de la Sección 10, Gustavo Vera Franco, señaló que la entrega de nombramientos es “un acto de justicia laboral, en el que el Sindicato cumple con sus agremiados. El nombramiento brindará tranquilidad a ustedes y a sus familias, porque les garantiza el empleo. Además, es una muestra tangible del compromiso del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación y de la Sección 10 con nuestros compañeros”.
A nombre de los mil beneficiados que recibieron su constancia, el prefecto de la Escuela Secundaria Diurna 178, en Coyoacán, habló Pedro Rosado Álvarez. “Gracias por reconocernos como parte de la fuerza de trabajadores de la educación del país y por la seguridad que este nombramiento dará también a mi esposa, a mis hijos y que me permitirá seguir cumpliendo con mi familia y con mi país. Gracias al apoyo del SNTE hoy podré dormir más tranquilo y continuar con más entusiasmo mi labor diaria como prefecto”, expresó.
Cabe recordar que, en los primeros cuatro años de implementación de la Reforma Educativa, la autoridad interpretó que la única posibilidad de que cualquier trabajador interino lograra el nombramiento definitivo, dependía de su resultado en la evaluación del desempeño.
Sin embargo, la Coordinación Nacional del Servicio Profesional Docente determinó que algunas especialidades en educación básica, como la de prefectos y ayudantes de laboratorio, no son sujetas de la aplicación de lo dispuesto en la Ley General del Servicio Profesional Docente; por lo tanto, no requieren de la evaluación obligatoria. Ante ello, el SNTE realizó las gestiones necesarias para que dichos trabajadores pudieran recibir su plaza de manera definitiva y no seguir con interinatos, que en algunos casos ya habían cumplido hasta 37 años.
A la ceremonia de entrega de nombramientos también acudieron el secretario general del SNTE, Alfonso Cepeda Salas; el director general de Administración de la Autoridad Educativa Federal en la Ciudad de México, Joaquín Francisco Guzmán López; y María Teresa López Mata, de la Dirección General de Administración y Organización de la SEP, además de miembros de los Órganos Nacionales de Gobierno sindical y del Comité Ejecutivo de la Sección 10.
