Localizan tomas clandestinas en General Bravo, NL; aseguran tractocamión
Elementos de la Guardia Nacional realizaron el hallazgo sobre la carretera Reynosa-Monterrey
Mónica Patricia Zúñiga MartínezUn tractocamión con combustible presuntamente robado, así como el hallazgo de dos tomas clandestinas fue reportado por la Guardia Nacional en el municipio de General Bravo, Nuevo León, esto sobre la carretera Reynosa-Monterrey.
La autoridad federal informó vía comunicado que luego de recorridos de inspección y vigilancia por la zona, a la altura del kilómetro 185+400 ubicaron la unidad que estaba abandonada en una brecha de terracería, la cual estaba acoplada a un semirremolque sin ninguna señalización.
Al indagar sobre el tractocamión se percataron que contenía 55 mil litros de combustible presuntamente de procedencia ilegal, por lo que de inmediato fue asegurado.
Asimismo, durante las mismas labores de inspección los elementos de la Guardia Nacional ubicaron dos tomas clandestinas de hidrocarburo, de donde se presume fue extraído el combustible.
Las autoridades informaron del hallazgo al personal de Petróleos Mexicanos (Pemex) y en coordinación con personal de seguridad física, se realizaron las maniobras para inhabilitar las conexiones irregulares.
Será el agente del Ministerio Público Federal quien se encargue de las investigaciones correspondientes.
Detectan tomas clandestinas en Cadereyta y Los Ramones
Dos tomas clandestinas fueron ubicadas en los municipios de Cadereyta y Los Ramones, Nuevo León, provocando el despliegue de las autoridades como la Secretaría de la Defensa Nacional y personal de Petróleos Mexicanos.
Los hechos ocurrieron ayer jueves por la tarde donde la autoridad informó que una de las tomas clandestinas fue localizada sobre el oleoducto de la línea 2 que está a la altura del kilómetro 487, en el municipio de Cadereyta.
De la segunda toma, la Sedena y Pemex solo indicaron que estaba en el municipio de Los Ramones, sin dar más detalles.
Una vez detectadas las tomas clandestinas, personal de Pemex se trasladó al sitio y empezó a reparar los ductos para evitar más robo de combustible, el denominado “huachicoleo”.
La zona quedó con vigilancia, en tanto que se llevan a cabo investigaciones que lleven a dar con los responsables de estas tomas clandestinas.