Lo que pasa en la UNAM…
La Procuraduría de Justicia del Distrito Federal (PJDF) no realiza operativos -encubiertos o al descubierto- al interior de Ciudad Universitaria para tratar los delitos que ahí se presentan, aseguró Óscar Montes de Oca, subprocurador de averiguaciones previas desconcentradas de la dependencia.
En entrevista, Montes de Oca explicó bajo el argumento de ser respetuoso de la autonomía, en Ciudad Universitaria sólo tienen una actuación reactiva cuando las autoridades de la UNAM les solicitan su colaboración.
Imelda Garcíahttps://www.youtube.com/watch?v=vBClZVeFoWo
La Procuraduría de Justicia del Distrito Federal (PJDF) no realiza operativos -encubiertos o al descubierto- al interior de Ciudad Universitaria para tratar los delitos que ahí se presentan, aseguró Óscar Montes de Oca, subprocurador de averiguaciones previas desconcentradas de la dependencia.
En entrevista, Montes de Oca explicó bajo el argumento de ser respetuoso de la autonomía, en Ciudad Universitaria sólo tienen una actuación reactiva cuando las autoridades de la UNAM les solicitan su colaboración.
“Nosotros tenemos un protocolo, un acuerdo firmado con autoridades universitarias en el sentido de que cada que se solicita la intervención de parte del jurídico de ellos, nosotros intervenimos. Cuando se han agarrado a narcomenudistas adentro, los mismos de seguridad de adentro llaman a Seguridad Pública y luego nos los entregan a nosotros.
“Dependiendo del delito que se haya denunciado, pero nosotros no hacemos investigaciones al interior de Ciudad Universitaria”, expuso el funcionario.
La semana pasada, Reporte Indigo publicó un reportaje sobre los hechos delictivos que ocurren al interior de Ciudad Universitaria donde, bajo el argumento de la autonomía, ninguna autoridad policiaca puede entrar para buscar delincuentes. De hacerlo, se pone en peligro la propia integridad de los agentes.
En noviembre del 2014, un grupo de agentes del Ministerio Público acudió a las inmediaciones de la Facultad de Filosofía y Letras para investigar una denuncia por asaltos en la estación del Pumabús que se encuentra en la zona.
Los estudiantes increparon a los agentes y comenzó una gresca que terminó con personas heridas de bala en el campus universitario y el auto de los policías ministeriales vandalizado por gente con el rostro cubierto.
“Somos respetuosos de la autonomía y, además, es una competencia de la Federación; eso es competencia de la PGR lo que ocurra al interior de Ciudad Universitaria cuando se afecte su patrimonio, su estructura, su funcionamiento o su organización.
“(En el caso de delitos del fuero común) nos mandan llamar a nosotros y nos dicen ‘Oye, fíjate que hay una víctima de un delito’ y ya sea que nos la canalizan a las instalaciones de la Agencia que está ahí en la salida de Ciudad Universitaria, o en su caso si se necesita practicar alguna diligencia, cumplimos con el procedimiento”, señaló Montes de Oca.
De acuerdo con datos otorgados por el funcionario, la Agencia del Ministerio Público Especializada en Atención a la Comunidad Universitaria, tiene registradas un total de 129 averiguaciones previas entre enero del 2014 y enero del 2015. El 95 por ciento de ellas se refiere a robo en diversas modalidades.
En el caso del narcomenudeo, se han iniciado 17 averiguaciones previas desde el 2012 al 2015, de las que se han detenido a 31 personas que se encuentran consignadas y detenidas.
Reporte Indigo publicó que en ciertas zonas de Ciudad Universitaria, como “Las Islas”, el acceso a la compra y consumo de estupefacientes es cosa común.
De las 17 averiguaciones previas, sin embargo, sólo tres corresponden a hechos ocurridos dentro del campus universitario, donde los elementos de Auxilio UNAM han sido los encargados de detener a las personas y remitirlas con las autoridades capitalinas.
“Los 14 eventos que restan son cometidos en las inmediaciones de Ciudad Universitaria. Ahí sí nosotros hacemos un operativo o lo que se tenga que hacer, atendemos denuncias anónimas, y procedemos a la captura de estos sujetos”, explicó Montes de Oca.
La Agencia Especializada de la PGJDF, ubicada a las afueras de Ciudad Universitaria, atiende a miembros de la comunidad universitaria y de la zona circundante. Y aunque se había hablado sobre la posibilidad de cerrarla luego del incidente de noviembre pasado, las autoridades decidieron que se mantuviera en operación.
La ‘mega peda’
Ciudad Universitaria, el campus de educación superior más emblemático e importante de todo el país, se convirtió el viernes pasado en una megacantina.
Cientos de estudiantes de la UNAM celebraron a lo grande su salida del semestre con una fiesta en la zona conocida como “Las Islas”, ubicada justo detrás de Rectoría.
Bebidas embriagantes y consumo de enervantes fueron el común denominador en la llamada #Megapeda.
El evento ocurrió en medio de una serie de cuestionamientos públicos hacia la máxima casa de estudios por los niveles de delincuencia que se viven al interior de Ciudad Universitaria y por el tráfico y consumo de enervantes que se llevan a cabo en algunas zonas del campus.
La semana pasada, Reporte Indigo publicó que en “Las Islas”, la misma zona donde se llevó a cabo el festejo, es común encontrar a personas consumiendo mariguana o alcohol, y hasta ahí llegan dealers a traficar con los estupefacientes.
La convocatoria para la #Megapeda UNAM fue lanzada en Facebook por Luis Soto Zarza, un supuesto estudiante de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, quien llamó a los universitarios a “sacar el estrés del semestre” en una “reunión pacífica” que se llevaría a cabo en Las Islas, el viernes 22.
En la página del evento, Soto Zarza llamó a quienes asistieran al evento a no enfrentarse con el personal de Auxilio UNAM.
“Recuerden llegar en grupitos, buscar evitar drogas ilegales, no caer en ningún tipo de provocación por parte de Vigilancia UNAM, los cuales terminarán ‘cooperando’ al ver que somos bastantes (la unión hace la fuerza), llevar bolsas de basura y obviamente a disfrutar la conbebencia de manera sana”, escribió el supuesto estudiante en la red social.
Así, el viernes 22 de mayo, desde las 13:00 horas, jóvenes de todas las facultades comenzaron a arribar a Las Islas con botellas de cerveza u otras bebidas embriagantes, o con enervantes.
Auxilio UNAM, el brazo de vigilancia que resguarda las instalaciones del campus, esperaba una afluencia de 20 mil personas.
Por ello, ese día desde temprano se preparó un operativo en el que decenas de vigilantes se apostaron en las inmediaciones de Las Islas, sin entrar en la zona, para evitar cualquier confrontación.
Se cerraron instalaciones cercanas a la zona, como facultades, bibliotecas, estacionamientos, baños y otras facilidades del campus, para evitar un posible daño por personas en estado de ebriedad.
Las autoridades de la UNAM se pusieron en contacto con la delegación Coyoacán para solicitar que se suspendiera la venta de alcohol en los comercios cercanos a Ciudad Universitaria, para así evitar que los jóvenes adquirieran más bebidas embriagantes.
Los elementos de Auxilio UNAM no pudieron hacer nada por dispersar a los jóvenes. Quien sí lo logró fue la lluvia. Cerca de las 19:00 horas, un aguacero obligó a los jóvenes a retirarse del lugar. Fue así como terminó la #Megapeda UNAM.
Contrario a lo establecido en la convocatoria del evento, de llevar bolsas para retirar los desechos, los jóvenes dejaron toneladas de basura tras de sí.
El sábado por la mañana, decenas de jóvenes y profesores se dieron cita en Las Islas para limpiar aquel lugar.
La #Megapeda no fue la primera experiencia de este tipo. El 31 de octubre pasado, aprovechando la instalación de las ofrendas del Día de Muertos, cientos de estudiantes organizaron una fiesta con bebidas alcohólicas en Las Islas.
Y ante ello, las autoridades de la UNAM se limitan a hacer campañas de contención y concientización sobre el consumo de alcohol y drogas.
La semana pasada, Reporte Indigo publicó un reportaje sobre los hechos delictivos que ocurren al interior de Ciudad Universitaria donde, bajo el argumento de la autonomía, ninguna autoridad policiaca puede entrar para buscar delincuentes. De hacerlo, se pone en peligro la propia integridad de los agentes