El Zócalo de la Ciudad de México se pintó de rosa y se proclamó una “marea rosa” en, lo que aseguran es, la defensa de la democracia y del Instituto Nacional Electoral (INE).
La manifestación del 26 de febrero se realizó en uno de los contextos políticos más complejos del país: el exsecretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, fue sentenciado por una corte en Estados Unidos por cinco cargos: tres por tráfico de cocaína, uno por delincuencia organizada y uno más dar declaraciones falsas a las autoridades estadounidenses.
García Luna trabajó para el expresidente y exmilitante del Partido Acción Nacional (PAN), Felipe Calderón Hinojosa, quien fue, además, promovente del mitin realizado este domingo en la plancha del Zócalo, al cual no asistió.
La polémica por el veredicto en contra del expolicía federal llegó hasta la manifestación y, horas antes de que iniciara el evento, en el edificio de los portales que está frente al Palacio Nacional se desplegó una manta con la imagen de Genaro García Luna y el logo del PAN.
Asimismo, en calles aledañas, principalmente en la calle 5 de mayo, se podían ver carteles azules con el logo de Acción Nacional, la imagen de García Luna y el mensaje “Calderón sabía”, en referencia a que el exmandatario conocía la relación del exfuncionario con el narcotráfico.
Con la gigantesca lona como escenario, a las 9:30 de la mañana, llegaron los primeros asistentes: entre ellos, destacó el empresario y activista (criticado por el oficialismo como defensor del viejo régimen), Claudio X. González.
Poco a poco arribaron más asistentes al evento, a quienes se les convocó a estar en la Plaza de la Constitución a las 11:00 de la mañana. En esta ocasión no hubo el clásico “acarreo” de eventos políticos mediante combis y microbuses; sin embargo, cientos de asistentes arribaron en camiones de primera clase Pullman de Morelos.
La gran mayoría de los presentes asistieron vestidos con prendas de ropa color rosa, sombreros y sombrillas para protegerse del sol, y portaban banderines con la leyenda “El INE no se toca”.
Dentro de los asistentes destacados al evento estuvieron presentes el senador Miguel Ángel Osorio Chong, del Partido Revolucionario Institucional (PRI); Jorge Romero Herrera, coordinador del PAN en Cámara de Diputados; el activista Adrián LeBarón; el presidente de la Mesa Directiva de la Cámara baja, Santiago Creel; el dirigente nacional del blanquiazul, Marko Cortés; y María Amparo Casar, presidenta de la organización Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad.
A la 10:15, 45 minutos antes del inicio del evento, los organizadores que estaban en el templete, localizado en el circuito de la Constitución casi esquina con la calle Corregidora, invitaron a todos los asistentes a dejar flores y rosas en las escalinatas de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para invitar a la autoridad a hacer bien su trabajo, sin presiones, e invalidar las reformas que modifican las facultades del INE.
También pidieron hacer una ola, una “marea rosa” como símbolo de que México ya despertó y que se viene una “primavera mexicana”.
A las 11 en punto, la periodista Beatriz Pagés dio el primer mensaje de manera apresurada, en el que acusó al actual Gobierno federal de utilizar al INE para llegar al poder y “hoy quiere matarlo para impedir la alternancia”.
Después, José Ramón Cosío, exministro de la SCJN, emitió su mensaje, en el que conminó a la Corte a hacer su trabajo e invalidar el llamado Plan B de la reforma electoral.
“Si estos procesos no se realizan debidamente, alguien puede creer que su proyecto de Gobierno puede sernos impuesto. La política dejará de hablar y lo harán los órganos de gobierno e impartición de justicia. En este momento la Suprema Corte de Justicia está en el análisis de las nuevas leyes, esto es lo que la constitución faculta”, explicó Cossío.
Llamarán al voto
En entrevista para Reporte Índigo, la analista política María Amparo Casar calificó de extraordinaria la convocatoria al Zócalo capitalino y destacó que debe de mantenerse la unidad en la ciudadanía.
Respecto a las acciones a realizar si las y los ministros de la Corte no invalidan el Plan B del Presidente de México como lo han solicitado los opositores, aseguró que llamarán al voto para fortalecer las vías democráticas del país
Al ser cuestionada sobre una posible oposición debilitada, Casar señaló que sí lo estuvo durante los primeros tres años del mandato de López Obrador, debido a su popularidad, no obstante, se ha fortalecido y continuarán organizándose.
“No estamos en defensa de regímenes anteriores, porque la pobreza, la falta de acceso a la salud y a la educación continúa”, subrayó.
