La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) avanza en la reglamentación del uso de cannabis medicinal, pues aprobó conceder un amparo a Carlos, un menor de 15 años con discapacidad múltiple y epilepsia resistente a fármacos, y ordenó a la Secretaría de Salud armonizar las disposiciones sobre el uso terapéutico del cannabis en un plazo de 180 días hábiles.
En el caso de Nuevo León, en marzo de 2018, una propuesta para regular el cannabis para uso medicinal fue presentada en el pleno del Congreso local por el exdiputado independiente, Jorge Blanco Durán. Pero este dictamen está congelado todavía en la actual legislatura.
Se trata de la iniciativa con 72 artículos para expedir la Ley General para el Control, Producción, Distribución, Comercialización y Consumo del Cannabis, por la cual se crea un instituto de control de cannabis para uso medicinal, con el objetivo principal de distribuir el cannabidiol.
Este documento tendría que ser aprobado por los diputados locales de la Septuagésima Legislatura del Poder Legislativo de Nuevo León; después enviado al Congreso de la Unión para que lo analice y, en su caso, haga cambios en la Ley General que contempla el tema a nivel federal.
La propuesta de Blanco Durán se centra principalmente en la creación del Instituto Mexicano de la Cannabis (IMCANN), para uso medicinal en enfermedades crónicas
“Se crea el Instituto Mexicano de la Cannabis (IMCANN), como un organismo público descentralizado de interés social, con personalidad jurídica y patrimonio propio, así como con suficiencia presupuestal y sectorizado en la Secretaría de Salud”, dice el artículo 7 de esta misiva.
En la entidad neoleonesa, existe el caso de Graciela Elizalde Benavides, quien se convirtió en la primera menor en recibir un tratamiento del cannabis en México, pues sufría 400 crisis de epilepsia al día.
Su padre, Raúl Elizalde Garza, tramitó un amparo en 2015 en el Juzgado Tercero de Distrito en Materia Administrativa en el Distrito Federal para que se le autorizada adquirir el cannabidiol.
Tras ganar este recurso y al paso de 4 años, su hija presenta mejoría, ya que ahora sólo tiene alrededor de 20 crisis de epilepsia al día.
La propuesta del exdiputado independiente establece que este instituto podrá reglamentar las actividades de la plantación, cultivo, cosecha, transportación, almacenaje, expendio y venta del cannabis.
“Y tendrá que promover y proponer acciones tendientes a reducir los riesgos y daños asociados al uso problemático del cannabis”, cita el artículo 8.
El IMCANN tendría la facultad de expedir licencias para procesar, cultivar, almacenar y vender cannabis.
La iniciativa de ley fue remitida a la Comisión de Legislación del Congreso del Estado, ahora a cargo del legislador panista, Félix Rocha, para su estudio y eventual aprobación. Pero ningún diputado o grupo parlamentario ha intentado revivir este tema.
Inspirar acciones conjuntas por el Cannabis Medicinal
El padre de Graciela Elizalde Benavides, Raúl Elizalde Garza, quien ganó un amparo para que su hija tuviera un tratamiento para mitigar la epilepsia, considera que el Congreso local y el Gobierno estatal podrían conformar acciones para separar el cáñamo y la mariguana de la Ley.
“Creo que el Congreso y el Ejecutivo tendrían que decirle a la Secretaría de Salud para que la agricultura de Nuevo León pueda producir estos productos medicinales e industriales, porque se pueden hacer muchas cosas con el cáñamo”, señaló el padre, en entrevista con Reporte Índigo.
En Estados Unidos, el presidente Donald Trump en 2018 firmó la nueva Ley del Campo que autoriza la producción de cannabis sativa que contenga menos de 1.3 por ciento del tetrahidrocannabinol (THC)
“Para este año Estados Unidos va tener una de las mayores producciones porque ya se podrá sembrar en Texas, o cualquier estado por más conservador que sea. Esto nos deja en desventaja”, considera.
Raúl Elizalde Garza manifestó su desacuerdo porque la Secretaría de Salud ha incumplido con el reglamento homologado entre varias dependencias federales, que debió haber quedado listo desde 2017.
Graciela Elizalde Benavides (Grace), la niña regiomontana que padece epilepsia, rompió paradigmas a través de un amparo que le permitió utilizar el cannabis para uso medicinal.
Los padres lucharon contra el tabú que genera el consumo de mariguana. A sus 12 años puede acceder a un tratamiento a base de mariguana y un ejemplo para que otros padres en una situación similar intenten buscar un recurso legal.
