Las huellas de la tragedia
A dos años de instalado, el Registro Nacional de Personas Desaparecidas o no Localizadas es el más claro indicador de cómo el problema aumenta sexenio tras sexenio
Linaloe R. FloresEl fenómeno de la desaparición ensombrece a México. El Registro Nacional de Personas Desaparecidas o no Localizadas (RNPDNO) de la Comisión Nacional de Búsqueda cambia a cada momento para mostrar una cifra más alta y un mapa del país marcado con tonalidades más fuertes como señal de que cada vez son más las personas que se han sumado
a la tragedia.
La alarma de la desaparición, encendida primero en los estados, ahora está en la capital del país.
En 2022, con mil 492 personas, la Ciudad de México se ubicó como la tercera entidad con mayor número de desaparecidos después de Nuevo León, con dos mil 455, y el Estado de México que tuvo dos mil 456.
En mayo de 2022, ese registro llegó a más de 100 mil personas desaparecidas. Desde entonces y hasta el cierre de esta edición se habían añadido nueve mil 689.
En los primeros cinco días de 2023 se registraron 25 personas desaparecidas, de las cuales 22 permanecen sin localización.
El panorama numérico de los desaparecidos en México apenas tiene ocho años. El 6 de marzo de 2012, la Cámara de Senadores aprobó la Ley del Registro Nacional de Datos de Personas Extraviadas o Desaparecidas que implicaba la publicación de una base de datos con acceso a la consulta de los ciudadanos.
Pero esa base de datos no fue publicada hasta agosto de 2014. Se trataba de un registro que respondía a la búsqueda con datos específicos y no presentaba números o incidencia por entidades. El registro era alimentado por información de las procuradurías general y estatales (hoy fiscalías).
A finales de 2017, en el epílogo del gobierno de Enrique Peña Nieto, fue aprobada la Ley General en Materia de Desaparición Forzada, Desaparición Cometida por Particulares y del Sistema nacional de Búsqueda de Personas (LGMD) que ordenó un nuevo registro para sustituir al RNPED.
El 13 de julio de 2020, la CNB instaló el RNPDNO. Hoy, sus números cambian mientras varios mecanismos previstos por la ley de 2017 no se han puesto en marcha y los datos abiertos muestran pocas compras de insumos para la búsqueda de los ausentes.