Las elecciones de 2024 y el fenómeno definitivo de las redes sociales

La contienda presidencial del próximo año será entre dos mujeres y un hombre, aunque en realidad podría ser entre tres mujeres. Si bien, Samuel García seguramente aparecerá en las boletas electorales abanderando la tercera vía de Movimiento Ciudadano, el carisma y nivel de penetración en redes sociales y por tierra de su esposa Mariana Rodríguez, podría inclinar la balanza a su favor y robarle votos a las dos candidatas.

El fenómeno de Mariana Rodríguez es fuerte en lo local y puede crecer a nivel nacional, sobre todo, en un entorno en donde ni Claudia Sheinbaum ni Xóchitl Gálvez logran conectar con la audiencia digital.

De acuerdo con datos del Instituto Nacional Electoral con corte al 23 de noviembre de este año, en el Padrón Electoral de nuestro país están inscritas 99 millones 316 mil 749 personas, de las cuales 26 millones 614 mil 908 son personas entre los 18 y 29 años de edad, es decir, representan alrededor del 27 por ciento del padrón.

Incluso el grupo de edad más numeroso y que podría definir la elección es el de 20 a 24 años, con 11 millones 379 mil 175 personas inscritas en el padrón con ese rango de edad.

En el caso de las personas que participarán por primera vez en una elección presidencial, el órgano electoral contabiliza a 15 millones 390 mil 626 jóvenes que podrán acudir a las urnas el próximo 2 de junio de 2024.

En 2018 el actual presidente Andrés Manuel López Obrador ganó la elección presidencial con alrededor de 30 millones de votos y se convirtió en el mandatario más votado en la historia del país.

En los próximos comicios especialistas prevén una menor participación que en 2018, por lo que los votos de los jóvenes y los primerovotantes valdrán mucho y podrían definir el día de la jornada electoral y el rumbo del país.

Conectando con los más jóvenes

Entre los tres políticos que se perfilan para ser candidatos en 2024, solamente Samuel Garcia podría conectar más fácilmente con la juventud, por su cercanía de edad. Claudia Sheinbaum tiene 61 años, Xóchitl Gálvez 60 años y el emecista tan solo 35 años de edad.

García, además cuenta con el apoyo en campaña de la empresaria e influencer Mariana Rodríguez que tiene 28 años de edad, lo cual la hace conectar más fácilmente con el sector que será clave para definir la elección en 2024.

Mariana Rodríguez entiende a los jóvenes, le habla a los jóvenes y seguramente convencerá a miles de personas para votar a favor del movimiento naranja.

La Encuesta Nacional de Cultura Cívica del Instituto Nacional de Estadística y Geografía publicada en 2020, reveló que mientras que el 13.9 por ciento de las personas mayores de 60 años utilizan las redes sociales para informarse, entre la población de 18 a 29 por ciento lo hacen más del 65 por ciento.

Estos datos revelan que las redes sociales, que ya fueron claves en las pasadas elecciones, lo serán todavía más en 2024.

Muestra de este impacto fue la polémica que protagonizó el expresidente Vicente Fox al insultar en X (antes Twitter) a Mariana Rodríguez y señalarla de “dama de compañía”.

La empresa tecnológica propiedad de Elon Musk no solo borró la cuenta de Fox, sino que la opinión popular en la red social fue a favor de Rodríguez y en contra de la violencia ejercida por el panista, impulsando indirectamente al aspirante de MC y golpeando a la candidata de oposición, Xóchitl Gálvez, a quien apoyaba abiertamente el exmandatario.

Bastaron un par de publicaciones para sumar apoyos y perder adeptos.

“Señor, no soy una dama de compañía. Soy una mujer, soy licenciada, soy empresaria, soy esposa y soy madre.

“No le permito que me hable así a mí, ni a ninguna otra mujer. No somos accesorios, ni objetos, ni puede faltarnos al respeto, y menos de esa forma tan vulgar”, le respondió Rodríguez a Fox.

El fenómeno ‘fosfo, fosfo’

Mariana Rodríguez Cantú además de ser empresaria e influencer es psicóloga, de acuerdo con el especialista en redes sociales e imagen pública, Enrique Ortega, justo en su profesión se encuentran las herramientas que ha utilizado para posicionar su imagen y la de su esposo.

“Eso la convierte en una herramienta con un enorme poder para la persuasión. Entiende la mente de las personas, con qué estímulos se puede construir una respuesta específica, esa es una de sus fortalezas.

“También, es relevante para la campaña de Samuel García porque es una persona no solo con muchos seguidores, sino con un alto engagement (alto nivel de interacción con su audiencia”, dice el especialista.

El fenómeno, recuerda Ortega, es similar como el que ocurrió con Angélica Rivera y Enrique Peña Nieto en la antesala de las elecciones de 2012, pero con la diferencia de que ahora importan más las redes sociales que los medios de comunicación tradicionales.

“Ahora los medios tradicionales vienen a la baja y los medios digitales están más fuertes. Samuel es la persona más joven que aparecerá en las boletas y es nativa de internet, a diferencia de las otras contrincantes que son migrantes digitales y se han tenido que adaptar.

“Samuel entiende muy bien las redes sociales y su impacto y Mariana Rodríguez, no es que se haya casado con ella por una cuestión estratégica, pero ya estando con ella, es una clave muy importante para consolidar su campaña. Mariana entiende muy bien la simbología y los mensajes que se tienen que comunicar en internet”, agrega.

Finalmente, Ortega concluye que las campañas de 2024 se podrían definir justamente en internet.

“Samuel García va a ser un candidato bastante competitivo por la influencia de su esposa y por entender muy bien el manejo digital. Creo que mucho del peso del voto del 2024 se va a dirimir en internet y es por eso que Mariana Rodríguez es una herramienta muy poderosa para esta campaña”, concluye.

Se diluye el ‘efecto Xóchitl’

El destape de Xóchitl Gálvez para la Presidencia provocó un fenómeno mediático y elogios de diversos sectores del país. Analistas y especialistas afirmaron que la senadora llenó un vacío que la oposición había experimentado ante la falta de perfiles para competir con Morena

Fue tal el ascenso de Xóchitl Gálvez que el presidente Andrés Manuel López Obrador centró sus pilas en descalificarla y la nombró como “la señora X”, apodo que adoptó la política mexicana para promocionar su imagen, logrando una buena aceptación entre la militancia de los partidos PRI, PAN y PRD.

Sin embargo, de forma sorpresiva en las últimas semanas se ha observado un descenso en la popularidad de la candidata del Frente Amplio, principalmente en redes sociales, sin que Gálvez pueda frenar estos embates de forma eficiente.

Por si fuera poco, este retroceso se ve agravado por los errores cometidos por la precandidata y su equipo en su gira por el país en las últimas semanas, lo que ha generado un cambio en la percepción pública.

La tunden en redes

En redes sociales, las críticas contra Xóchitl Gálvez crecen. A diferencia de la aspirante de Morena, Xóchitl Gálvez sigue sin presentar el equipo completo que la acompañará en los comicios de 2024, y los videos de sus errores se viralizan.

Según analistas consultados por Reporte Índigo, el rostro mediático prometedor que había encontrado la alianza opositora en Xóchitl Gálvez se empieza a desmoronar.

José Manuel Urquijo, maestro en Comunicación política y gobernanza por la George Washington University, relata que pareciera que la precandidata del Frente no tiene nada que perder, pues las encuestas la colocan hasta 20 puntos por debajo de Claudia Sheinbaum.

“Sí tiene algo que perder: el segundo lugar que hoy tiene, si su campaña comete errores fatídicos, puede que su electorado voltee a ver a Samuel García”, precisa el analista político.

Manuel Urquijo sostiene que “la señora X” se enfrenta al desafío de navegar en una línea delgada entre la autenticidad y la bufonería, por lo que debe encontrar el equilibrio y que su mensaje se mantenga auténtico.

Sheinbaum se consolida

Claudia Sheinbaum, coordinadora de los Comités de la Cuarta Transformación, se encamina hacia las elecciones de 2024 con una imagen de serenidad y con un control de daños robusto. Trata de no equivocarse y se dirige al electorado más leal de Morena.

Así lo afirman especialistas en comunicación e imagen pública consultados por este diario. Claudia Benassini Félix, investigadora de la Universidad La Salle, sostiene que la precandidata oficialista mantiene una campaña enfocada al electorado más leal a Andrés Manuel López Obrador, es decir, aquellos que no necesariamente se encuentran en redes sociales.

No obstante, precisó que tanto Claudia Sheinbaum como Xóchitl enfrentan el mismo desafío: comparten contenido similar en sus plataformas digitales, pero se dirigen a audiencias diferentes.

“Es crucial reconocer que los usuarios de Tik Tok tienen necesidades distintas a los de Meta, lo que implica la necesidad de adaptar el contenido para públicos diversos”, precisa la especialista.

Mientras que José Manuel Urquijo confirma que la morenista busca consolidar un estilo caracterizado por la serenidad. También se presenta como una figura que trata de transmitir calma y confianza.

“La precandidata oficialista comienza a consolidar un estilo propio de mucha más serenidad, de una mujer que transmite tranquilidad y seguridad. Su prioridad es mantenerse en la cima y conservar la ventaja que hoy tiene, por lo tanto difícilmente veremos que asuma algún tipo de riesgo, porque sabe que no lo necesita”, sostiene el académico.

Crece en redes sociales

El incremento del uso de las redes sociales como Meta y X (antes Twitter) por Claudia Sheinbaum refleja un esfuerzo por conectar con la audiencia en las últimas semanas.

Una revisión en Google Trends revela un incremento en el interés de la población al buscar información específica sobre la exjefa de Gobierno de la Ciudad de México en los últimos meses.

Los picos de conversación digital en torno al nombre de la coordinadora de Morena reflejan un alza en los primeros meses de septiembre de este año y durante la segunda semana de noviembre.

De ahí la efectividad de la campaña en línea que ha desplegado Sheinbaum en fechas recientes, con videos publicados sobre los lugares que ha visitado en su recorridos por el país.